Capítulo 43

8.5K 949 175
                                    

Hiccup Haddock

Al día siguiente, en cuanto la noche llego a Berk, salí de mi casa a reunirme con los chicos.

Iríamos a rescatar a ______ y a ese tal Daven.

—Bueno, en marcha —dije una vez que los chicos estaba junto a sus dragones.

Cada jinete se montó a su respectivo dragón y emprendimos vuelo en silencio. Nadie hablaba o no se atrevían, seguramente preocupados por ser encontrados o vistos por cazadores.

—Estamos cerca, ¿No? —cuestionó Patán luego de unas cuantas horas de vuelo.

Traté de observar el mapa en la oscuridad, sin lograrlo.

Moody, quién nos guiaba de vez en cuando, comenzó a descender su vuelo, yo y los chicos hicimos lo mismo sobre nuestros dragones.

Una vez que aterrizamos, les hice una seña a mis amigos para que no hicieran ruido. Cada uno bajo de sus dragones tratando de hacer el menor sonido.

Miré para todos lados.

—¿No está? —susurró Patapez a mi lado.

¿Algo le habría pasado?

—¿Hola? —escuché una voz masculina proveniente de unos arbustos, esa persona salió— ¿Son los amigos de ______?

Era un chico de mi estatura, se notaba que tenía nuestra edad aproximadamente. Pero en la oscuridad, apenas pude distinguir su apariencia física.

—¿Daven? —cuestione dudoso.

—¡Chicos! —______ salió de los arbustos y emocionada.

Los chicos fueron a abrazarla rápidamente, en un abrazo grupal. Hace tiempo que no la veía.

—¿Tú no me abrazaras? —cuestionó _____ al separarse los chicos.

Reí y fui a abrazarla. La verdad sólo la quería abrazar yo y no en un abrazo grupal.

—Te abrazaría una y mil veces más —le dije casi en un susurro cuando nos íbamos separando.

______ me sonrió y luego miró a sus espaldas, donde estaba su amigo.

—Él es Daven, me ayudó cuando...—no termino de hablar y una expresión de temor apareció en el rostro de ella.

—Cuando te caíste al lago, sí —dijo su amigo rápidamente— es muy mala nadadora.

Por el tono de voz de ______ y su mirada, supuse que se trataba de otra cosa. Pero no era el momento de preguntar.

—Bien, podemos podernos al día en Berk, debemos irnos —les ordené a los chicos, cada uno montó su dragón.

Puse mi vista en ______, ella se subió sobre Moody y ayudó a que Daven subiera junto a ella. Él la tomó por la cintura.

Fruncí el entrecejo al ver la escena.

[...]

El viaje hasta Berk me resultó demasiado largo, me parecieron horas.

Cada uno de bajo de sus dragones emocionados, estábamos en Berk y no había sucedió nada que nos pudiera en peligro.

Como habían antorchas en Berk para iluminar el pueblo, finalmente pude observar el rostro de Daven.

Era un chico de cabello azabache, ojos azules y piel pálida. En otras palabras: atractivo.

—¿Es tu nuevo novio, _____? —preguntó Brutacio y luego me observó con una risa.

—Claro que no —______ me observó luego de responder y me sonrió.

Sus palabras me tranquilizaron.

—No me ha dejado serlo —Daven se encogió de hombros y le sonrió a _____.

Bien, lo odio.

—¿Dónde están nuestros modales? —Brutilda cuestionó en voz alta mirando a Daven con una sonrisa— soy Brutilda, soltera, por cierto —le guiño un ojo.

—Soy su hermano: Brutacio, y ella es un asco —Brutacio indico a Brutilda con repulsión.

—Yo soy Astrid, un gusto —Astrid se presentó formalmente.

—Yo soy Patán, el chico más lindo de Berk y él —indicó a Patapez, que dormía sobre su dragón— es Patapez.

—Soy Hiccup, Hiccup Haddock —me presente extendiendo mi mano de mala gana.

—Oh sí, ex prometido y ex novio de _____ —Daven tomo mi mano y la apretó con fuerza como saludo— también jefe de Berk ¿No?

Odiaba su tono de voz al dirigirse a mi.

—Sí —respondí de mala gana.

—Bueno, es justo que yo me presenté de una buena manera. Soy Daven Haraldsen, gracias por también rescatarme de ese lugar.

—No tuvimos opción —dije antes de que uno de los chicos respondiera.

Daven y yo nos miramos desafiantes.

—Bien, es tarde y creo que todos están cansados...deberíamos dormir —mencionó _____ incómoda.

—Oh sí, te mostraré donde puedes dormir, guapo —Brutilda agarró el brazo de Daven obligándolo a caminar.

—¿Y _____? —cuestionó él antes de irse.

—Dormirá conmigo —le sonreí victorioso.

El chico de cabellos oscuros me miró de una mala manera, pero no protesto. Solo se fue junto a Brutilda.

—¿Lo está llevando a nuestra casa? —cuestionó Brutacio con una mueca de asco— ¡Brutilda no seas tonta! —Brutacio se fue corriendo para alcanzar a su hermana y evitar que cometiera un error.

—¿Dormiré contigo? —cuestionó _____ divertida.

—¿No quieres? —le sonreí de vuelta.

Ella asintió y nos despedimos de los chicos para irnos a mi casa.

Seguramente mi madre ya dormía.

Al llegar lo comprobé, ella dormía. Lleve a ______ hasta mi habitación.

—¿Daven es solo tu amigo? —pregunté a la vez que me sacaba la armadura.

—Nunca te había visto tan celoso, Hiccup —______ sonrió a la vez que se sacaba su armadura.

Me senté en mi cama para observar cada acción que realizaba. Se volteó dándome la espalda y se sacó su camisa.

—¿Qué te sucedió? —pregunté preocupado al notar unas horribles marcas en su delicada espalda.

—Lo había olvidado...—se dijo ella para si misma— no es nada importante.

—Tú me importas, así que esto es importante y deberías decirme...

La última vez que la había visto semi-desnuda había sido hace unos meses, cuando aún estábamos juntos y ella no presentaba esas marcas, hasta ahora.

—Te lo explicaré mañana, lo prometo —Ella se puso una de mis camisetas, sabía que le gustaba dormir con ellas.

Sonreí al recordar eso.

—Oh...— ______ observó el anillo que estaba sobre la mesa, lo tomo entre sus manos y suspiró. Volteó a verme, pareciera como si quisiese decir algo, sin embargo, no lo hizo.

Era el anillo de nuestro compromiso fallido, pero que tenía ganas de recuperar.

Desde que te conocí [Hiccup y tú] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora