Capitulo 29

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Natalia's POV 

El sonido del timbre de mi casa hace que me sobresalte ya que la casa estaba en completo silencio. Voy a abrir, sabiendo quién es el que llama a la puerta. Cuando abro, ni siquiera recibo un "Hola", en cambio el saludo que me da me hace reír.

-¿Todavía no estás lista? No me lo puedo creer. Estuve dos horas arreglándome y salí de casa con tiempo por si acaso había tráfico y llegaba tarde; que lo hubo, ¿y tú estás así todavía? Te odio.

-Solo me queda calzarme y peinarme, Carlos.-me río por lo exagerado que es.

-Menos mal que dijiste que te vas a peinar.-dice sentándose en el sofá.-Si llegas a salir con ese pelo de casa te abandono en el desierto.

-Eres idiota.-lo insulto en broma.

-Vamos, por el amor de Dios, que tu novia está esperando.-me apura mientras me pongo los zapatos.

En cuanto acabo, me pongo delante del espejo de la entrada y me peino con los dedos. Me recojo el pelo en una coleta, pero dejo unos pequeños mechones de pelo sueltos a cada lado. Luego doy unos pasos hacia atrás para verme entera. Llevo una camiseta suelta negra de manga corta que deja que mi ombligo se vea, unos pantalones vaqueros cortos. Y los zapatos negros.

-¡Ya estoy!-informo a Carlos, que estaba enviando mensajes a alguien, me imagino que a Marta o Africa.

Carlos se levanta del sofá y guarda el móvil en su bolsillo del pantalón.

-Joder, que buena estás.-dice mirándome de arriba a abajo.

-Venga, idiota.-me río de nuevo, poniéndole una mano en la nuca y haciendo que salga de casa.

Nos metemos en el Audi de Carlos y el conduce hasta el sitio donde quedamos con Alba, Africa y Marta. Mis amigos querían conocerla, y este fin de semana por fin estamos todas en la ciudad así que aprovechamos para quedar. No se si esto fue buena idea, mis amigos están locos. Aunque creo que ellos están más nerviosos que yo o que Alba.

Durante el camino, Carlos pone música, y tardo un tiempo en darme cuenta de que lo que está poniendo es el álbum Smoke+Mirrors de Imagine Dragons que pensé que había perdido hace meses. Lovmiro con los ojos muy abiertos y el se muerde el labio.

-¿Lo tenías tú?-pregunto.

-Me lo habías dejado.-responde.

-¡Hace 8 meses!-exclamo.-Se supone que cuando alguien te presta algo lo tienes que devolver.

-Lo siento.-se disculpa rodando los ojos.-Llegamos.

-Tienes suerte de que hayamos llegado ya.-digo mirándolo mal.

En realidad todas estas broncas y peleas que tenemos no son tan serias como parecen. En realidad, estamos bromeando un poco siempre que lo hacemos. Salimos del coche y nos acercamos a la puerta del hotel, donde están Marta y Africa. Alba no está en ninguna parte, pero no me preocupa, llegar tarde es algo que está en sus genes. Habíamos quedado en frente del hotel para ir a dar una vuelta y hablar, aunque creo que yo no hablaré mucho. Mis amigos querrán que sea Alba la que hable.

Justo cuando llegamos a donde están nuestras amigas, Marta señala algo detrás nuestro y Carlos y yo nos giramos. Vemos a Alba caminar hacia nosotras, con una preciosa sonrisa en la cara. Yo me quedo mirándola como una idiota, pero Carlos no tarda en pegarme un codazo. Alba llega a nosotras y saluda a mis amigos de uno en uno, dejándome a mi para el final. Yo en vez de un beso en la mejilla recibo un beso en los labios.

Después de presentar a mis amigos, empezamos a caminar. Como me imaginaba, yo no digo nada. Mis amigos bombardean con preguntas a Alba, que parece estar divirtiéndose con ello. Normalmente Alba es más reservada, pero se está dsenvolviendo muy bien con mis amigos hoy. La verdad es que si hay algo que mis amigos hacen bien es hacer que la gente se sienta cómoda cuando están con ellos.

Wanted || AlbaliaWhere stories live. Discover now