EP 33: ¿QUÉ QUIERES?

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Me llevaron a una reunión que tenían con un amigo de Pablo. El cual resultó ser un egocéntrico y pretencioso. Nos enseñó la maqueta del álbum nuevo que iba a sacar y, siendo sincera, era una auténtica basura. Después de dos horas soporíferas, Nat se ofreció a llevarme en coche hasta el hotel, y Pablo se quedó con su amigo.

- André es un imbécil —declaró ella al volante de su coche, mientras se encendía un cigarrillo.

- Pues él cree que es una estrella - contesté.

- Para ser una estrella hay que tener luces. Y él no las tiene.

Me quedé meditando aquellas palabras mientras el humo de tabaco llenaba el Peugeot 208 con el que se había ofrecido a llevarme al hotel.

- ¿Por qué me mandaste a la mierda cuando te solicité la entrevista? – me atreví a preguntar.

Nat abrió un poco la ventanilla para que escapara el humo antes de contestar.

- Te confundí con una Alba que me persigue. Después de montarme un numerito en medio de un concierto, ha tratado de ponerse en contacto conmigo de las formas más extrañas. Por eso pensé que eras ella.

- Supongo que la echaron los de seguridad del concierto.

Mientras entrábamos ya en los primeros suburbios de París, Nat me miró de reojo y esbozó una sonrisa. Estaba asombrada por mi ingenuidad.

- ¿Seguridad? En el club donde tocaba hay un camarero y gracias. Suficiente para los cuatro gatos que vinieron a escucharme.

- ¿De qué zona de España eres? – me interesé.

- De Pamplona – comentó – bueno, nací allí, lo que pasa es que mi familia se mudó a Londres cuando yo tenía un año más o menos – miraba por el retrovisor – y yo en cuanto cumplí los dieciocho me mudé a Madrid – me miró unos segundos, dudando si decirme lo siguiente – vivía por Malasaña.

- ¿En serio? – abrí los ojos sorprendida – yo viví una temporada allí – me quedé en silencio unos segundos – bueno, eso me han contado, yo no me acuerdo.

Antes de dar pie a que me preguntase el motivo, decidí ir directa al grano y que me contara lo que me interesaba saber.

- En el artículo —mentí—, quiero hacer bastante hincapié en las letras. Por eso voy a hacerte preguntas sobre cada una de las canciones.

- Yo no soy como André - protestó, cambiando repentinamente de humor—. No me gusta hablar de cómo están hechas mis canciones. Las canto y punto.

No entendía por qué se ponía a la defensiva. Aquella mujer no dejaba de desconcertarme.

- Tú cuenta sólo lo que quieras - contesté para calmarla-, pero necesito tener información para hacer el reportaje.

- Puedes hablar de lo del taller interactivo que nos ha contado André. Es una fantasmada, pero este tipo de movidas se llevan mucho ahora.

- Lo del taller me parece de un interés muy limitado, igual que André - dije poniéndome seria-. Prefiero centrar el reportaje en ti. No deja de ser curioso que una cantante española se haya mudado a París.

- ¿No te gusta París?

- Claro que me gusta. Pero no me parece la ciudad más adecuada para empezar la carrera de alguien que canta en castellano.

Mi comentario pareció disgustar a Nat, puesto que ya no respondió. Se limitó a conducir por el centro de París. De repente me sentí ridícula por estar representando aquella mentira.

Al primer vuelo - ALBALIAWhere stories live. Discover now