Punta, talón [YoonMin myg+pjm]♡

⌦ 35: Eso si que no

—

¡No, no! Eso sí que no, Jimin.

— Yoongi ya te dije que ella es capaz de ir-

—Capaz de ir a una fiesta—Lo imitó— Eso ya lo sé, pero aún así ¿Por qué no podemos llevarla nosotros?

Jimin intentaba con muchísima paciencia explicarle a su casi esposo porqué su hija Yeji podía ir a una fiesta a las 8 de la noche un sábado sin la compañía de ambos, pero el pelinegro empresario no estaba totalmente de acuerdo con el rubio.

—No quiero que mi hija se suba en la motocicleta de ese chico, Jimin. —Respondió aflojándose la corbata.

—Y ahí está el padre celoso nuevamente... —El rubio se burló y Yoongi lo miró con los ojos entrecerrados.

—No soy un padre celoso, solo estoy tratando de ser un padre que cuida a su hija adolescente  de un adolescente que usa cabello largo, chaquetas de cuero y conduce una motocicleta extremadamente peligrosa. —Lo dijo tan rápido que su cara se coloreó de rojo y Jimin río.

Mientras el rubio se encerraba en el baño para reírse de Yoongi, el pelinegro se dejó caer en su costoso colchón aún con su traje puesto.

Él no estaba celoso, esas ideas erróneas de Jimin lo estaban haciendo quedar mal ¿Qué había de malo con cuidar a su pequeña Yeji? Eso no eran celos ni sobreprotección, solo era la reacción normal de un padre normal hacia su hija.

Además ese tal  Jooyeon no le daba buena vibra. Era justamente el tipo de chico que le rompía el corazón a la jovencitas cuando Yoongi estaba en la universidad ¡Y su hija ni siquiera estaba en la universidad!

Soltó un suspiro cansado y cerró los ojos, entre los preparativos de su boda con Jimin y la empresa últimamente no había tenido tiempo para dormir bien, tal vez necesitaba uno de esos masajes con final feliz que Jimin siempre le hacía cuando estaban ellos solos en casa.

Abrió los ojos de repente.

¿Solos en casa?, Pensó Yoongi y su boca salivó.

Tal vez era algo incorrecto, pero si su pequeña Yeji iba a esa fiesta el día siguiente, él y Jimin iban a tener mucho tiempo solos. Ahora sonaba un poco más razonable.

Se levantó y entró al baño encontrándose con la figura casi obscena de Jimin enjuagando la espuma que quedaba en sus piernas.
Yoongi cerró la puerta haciendo que Jimin girase a verlo sorprendido.

— He venido a negociar.—Le sonrió al rubio que son el dedo índice le dió la sensual orden de que se acercara.

—Muy bien CEO Min, dígame qué es lo que quiere y veré qué puedo hacer. —Jimin le habló al oído bajando sus labios sobre el cuello del mayor.

—Estoy de acuerdo con que Yeji vaya a esa fiesta —Jimin succionó una porción de su cuello y provocó que su piel vibre.— Pero nosotros la llevaremos con coche hasta allá, no quiero que mi hija- —Jimin llevó su mano hasta el cierre de sus pantalones.