Un Matrimonio "Ilegal" [NS] (Wattys2019)

Capítulo 3

Aunque en otras condiciones Naruto era considerado como un completo idiota, cuando estaba en su oficina era todo un maestro con los negocios. Uno de sus amigos estaba haciéndole compañía, ayudándolo con un papeleo, mientras charlaban tranquilamente.

—Si no te conociera, diría que no tienes nada, pero... ¿en qué piensas tanto? —indagó Kiba, apilando unos papeles.

—¿Por qué lo dices?

—Tienes esa cara de idiota que indica que estás pensando en alguien, y sé que no es Hinata. —más que tener una relación de jefe-empleado, eran buenos amigos. Se conocieron desde la secundaria. —Como sé que tu matrimonio ya no vale nada para ti, ¿quién es? —lo miró picarón.

—No se te escapa nada, eh. —dejó lo que estaba haciendo a un lado. —La persona que estábamos buscando ya llegó a la casa, sabes que no quería que Chiyo se siguiera desgastando, así que quise buscar a alguien para que ayudara en la cocina. Ayer que llegué, había un doncel muy hermoso preparando la cena.

—Mmm... creo saber por dónde va esto.

—Se llama Sasuke, tiene una belleza única. Ya sabes, belleza extranjera. —se dejó caer en el asiento, imaginando el rostro del Uchiha. —Nunca había sentido con nadie lo que sentí cuando lo vi a él.

—¿Piensas enamorarlo?

—Quizá, primero quiero conocerlo bien. Si todo sale como estoy planeando, me divorciaré de Hinata, dejaré de pensar en la prensa por un momento y todas esas mierdas. —volvió a su trabajo. —De paso me servirá para saber qué clase de persona es, apenas si lo conozco.

—Suena bien. Procura que Hinata no se entere, sabes que no será contigo con quien se desquite. —corrió la silla hacia atrás para poderse levantar. —Tienes mi apoyo, pero trata de que ese doncel no vaya a pagar por lo platos rotos de tu matrimonio.

—Eso tenlo por seguro. Empezare de una vez con ello.

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—En verdad aprendes bastante rápido, cada vez estoy más segura de no haberme equivocado contigo. —la anciana le brindó una sonrisa desde su asiento, Sasuke había logrado preparar a la perfección uno de los platillos favoritos de Hinata. —Estoy segura de que con esto podrás demostrarle que está equivocada con todo lo que dijo, hay que hacer las cosas de buena manera.

—Espero que de verdad funcione, en serio no quisiera ser un problema en esta casa. Aún no desisto de la idea de buscar otro trabajo.

—Si el señor insiste en que te quedes, no veo porqué quieres irte. Él mismo te aseguró que estarás bien aquí. —miró la hora. —Ve a dárselo, debe de estar en el jardín.

Asintió, tomando una bandeja con el platillo encima. Ya empezaba a conocer cada vez más esa casa, pronto la tendría dominada de pies a cabeza. En efecto, la Hyūga estaba descansado en el jardín, esta vez solo se limitaba a observar las flores, no había na revista o un celular que captara su atención. Parecía pensar en algo.

—Le traje esto. —dejó el plato frente a ella, tomando con fuerza la bandeja entre sus manos.

—Gracias. —prefirió dar media vuelta para irse, antes de que se presentara otra situación incómoda. —Espera, quisiera disculparme contigo por lo sucedido anoche. Hablé con Naruto y decidí darte una oportunidad, solo te pido una cosa.

—Dígame.

—No tomes mucha confianza con mi esposo, ¿entendido? Quiero evitarme tener problemas, y estoy segura que tú tampoco los quieres. Con eso claro, puedes retirarte. —hizo un ademán con la mano, indicándole que se fuera.