Un Matrimonio "Ilegal" [NS] (Wattys2019)

Capítulo 37

Sasuke echó un vistazo a la habitación del hospital, hacía pocos minutos que una de las tantas enfermeras fue revisar su estado. Por fin había recuperado la movilidad de su cuerpo, pero aún así, debe de quedarse hasta el otro día.

Después de haberse liberado de Jūgo, solo fue cuestión de minutos para que llegara una patrulla y una ambulancia. De camino, Naruto le explicó todo lo que tuvieron que hacer para poder encontrarlos, y que cuando dieron con su ubicación, no pensó en nada más que no fuera ir a salvarlo.

La puerta de su habitación se abrió, sin embargo, no era Naruto quien entraba.

—¿Cómo te sientes? —preguntó con voz tímida, sin mirarlo a los ojos.

—Mejor. —respondió sincero. —¿Qué hay de ti?

—Sabes que a mí no me hizo nada, así que me siento bien. —se sentó en una de las incómodas sillas para visitantes, para estar más cerca de la camilla. —Sasuke, quiero pedirte disculpas otra vez, siento que no me va a alcanzar la vida para hacerlo, de verdad actué como una estúpida. Todos estaríamos bien si tan solo yo...

—Las acepto, Hinata. —los ojos claros de la mujer se fijaron en él, sorprendida por lo que acababa de escuchar. —No pienso vivir guardándote rencor, ya todo pasó. La única condición que pongo, es que no vuelvas a meterte entre Naruto y yo, porque esta vez no lo voy a permitir.

—Lo prometo. —levantó una de sus manos después de soltar una risita. —Sasuke, ¿cómo fue que llegaste y se dio todo entre Naruto y tú?

—No vayas a pensar que nos enredamos mientras ustedes estaban casados. —le aclaró antes de empezar. —El mismo día que llegué de Corea, encontré la mansión, y vi que estaban necesitando un cocinero. Mi padre siempre pensó que yo sería igual al resto de mi familia, que pasaría toda mi vida encerrado en una oficina o algo similar, siempre me sentí como la "oveja negra", mis aspiraciones eran muy diferentes. Los Uchiha tenían que ser una.. familia perfecta, pero nunca me sentí como tal. —se le hacía extraño contarle eso a Hinata, pero ella sí le estaba prestando su atención. —Mi plan al viajar a Japón era terminar la carrera que quiero, pero nunca pensé que toparía con alguien como Naruto. Lo conocí ese mismo día, pero a la hora de la cena, no sabía que era el dueño de esa casa. Admito que sí me interesé en Naruto, pero cuando supe que era tu esposo, establecí mi distancia, al contrario, ¡fue él quien empezó a acercarse!

—Y no lo culpo, en ese punto, nuestro matrimonio estaba tan mal, y a eso hay que sumarle que nunca estuvo enamorado de mí, que para él tuvo que ser algo único el haberte conocido. Naruto no es de los que suelen fijarse solo en el exterior de la persona, en ese momento que se conocieron, tuvo que haber visto algo en ti que le encantó. Me sentí celosa, porque te sonreía como nunca había hecho conmigo, incluso comencé a temer por mi relación con él, pero al final no pude hacer nada.

—Cuando él y yo nos casamos.—continuó con su historia. —La misma noche de bodas, despertaste. Naruto no quiso tener responsabilidad sobre ti, porque ya no había nada que los uniera, solo quería pensar en nuestro matrimonio. Pero cuando el doctor nos dijo tu estado, le pedí que ocultáramos todo, al menos hasta que recuperaras la memoria y pudiéramos explicarte. Lo que nunca pensamos, era que tu mamá se iba a entrometer.

—Mamá sí tuvo mucho que ver en varias de las cosas que hice. —y ahora podía entender la razón que tuvo. —Pero siempre iba a ser en vano, Naruto jamás iba a regresar a mi lado. Me hizo creer que tú eras su amante, y hasta me pidió que continuara fingiendo amnesia.

—De haber sabido que habías recuperado la memoria, te hubiéramos contado todo.

—Sé que sí, siempre fui una tonta que se dejó llevar por los "consejos" de mamá, debí de ser como Hanabi. —estrujó su bolso, que estaba sobre sus piernas. —Me siento bien al saber que nada de lo que hice funcionó, no me habría servido tener a Naruto conmigo si su corazón iba a estar en tus manos. —se levantó. —Sasuke, me alejaré de ustedes, te juro que nunca más pienso volver a separarlos; ustedes, después de todo lo que sacrificaron por mi culpa, merecen ser felices. Viendo todo más claro, me doy cuenta que eres una persona muy especial. Solo quiero pedirte una favor. —ya se acercaba a la puerta. —Haz feliz a Naruto por todos los años que yo le robé.