Capítulo 8

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Pov Valentina

Me levanté del mueble, haciendo unos leves movimientos de cuello. No debí dormir aquí, debí aceptar la invitación de dormir en una cama, en una cama cómoda y no en éste cochino mueble. Es más... debí de haberme marchado en cuanto dejó de llover, pero creo que el sueño me venció.

_ Veo que despertaste_ me encontré con la mirada de Juliana, y por un momento creo que la vi sonreír. Seguro fue mi imaginación, o seguro sigo dormida_ ¿Quieres desayunar antes de irnos? ¿O te quieres dar un baño primero?_

Yo sólo me quedé en silencio, no todos los días te despiertas y tienes en frente a la chica que te gusta, ofreciéndote desayuno_ No es necesario, creo que ya deberíamos irnos Juliana_ aproveché que ella se dió la espalda y me pasé las manos por el rostro, lo más probable es que me vea horrible, despeinada y con unas ojeras de muerte_ ¿A dónde vas?_ le pregunté, caminando detrás de ella.

_ Vamos a desayunar_ ¿Para qué me pregunta?, si va a hacer lo que se le venga en gana... No entiendo... _ además, deberías de ducharte, te ves espantosa_ Me quedé estática, antes de llegar al comedor. Lo sabía, me veo horrible. Que vergüenza, llamaré a mi madre para que vaya haciendo mi testamento, creo que acabo de morir_ Sólo bromeo, estás muy_

_ ¿Muy?_ deslicé una silla para que ella tomara asiento, pero sólo hizo una mueca. Grosera...

_ Muy tú_ terminó de decir, me encogí de hombros, sentándome en el otro asiento, al lado de Juliana_ ¿Quieres frutas?_ ella comenzó a comer de su plato, sólo iba a desayunar frutas... ¿Frutas? Eso no es un desayuno, con eso no aguantaría ni dos horas.

_ Gracias, pero no_ justo en ese instante mi estómago se removió, vale. Tal vez si tengo hambre, pero no de frutas. Necesito algo más fuerte_ ¿Y tú abuela?_

_ Sigue dormida, a penas son las seis de la mañana niña_ por la luz que se penetra por las ventanas, llegué a pensar que era más tarde. Pero resulta que no..._ Al menos deberías tomar un poco de café_ dijo, señalando la taza de café frente a mi plato. Parece que había preparado el desayuno para las dos...

_ Gracias_ fue lo único que dije, tomando un poco de café. Reprimí una cara de asco, ésto no es café. Ni siquiera sabe a eso.

_ ¿Entonces yo te gusto?_ comencé a toser en cuanto escuché esas palabras,  tragando seco, creo que me tomó fuera de guardia_ ¿Entonces?_ ella me miró, sonriendo de lado; mientras seguía desayunando muy normal.

_ No, para nada_ volví a tomar del horrible café, creo que ya hasta sabor está agarrando.

_ Yo creo que sí_ debo salir de aquí, debo irme. Pero no puedo, ella es tan hermosa y más así como está ahora, sin maquillaje, con unos short y sólo una camiseta de tirantes; simplemente es más que hermosa.

_ Yo digo que no, además. Tú fuiste quien me besó, ¿Se te olvidó?_ ¿Qué estoy haciendo? Debo callarme, pero ella tocó el tema y pues claro que me gusta.

_ Porque creí que eras Valery_ listo, hora de irme. Se está pasando, eso fue un golpe muy bajo. Toda mi vida he sido comparada con mi hermana, como para que ella también lo haga.

_ Pasa buen día_ dije en un suspiro, levantándome para irme de aquí, pero ugg. Yo la traje, ¿Cómo se supone que va a volver? Tampoco es que eso es de mi incumbencia.

_ Valentina, espera_ ella se había levantado, tomándome del brazo y dándome la vuelta_ lo siento, yo_

_ ¿Tú qué? Lo acabas de decir, pensaste que era Valery, todo está clarísimo. Tú no me gustas, ni yo te gusto. No tenemos porque estar teniendo ésta conversación_ quise soltarme de su mano, pero hizo su agarre más fuerte_ Juliana, por favor_

_ ¿Puedo?_ observé en cámara lenta como ella se acercaba más y más a mí, tanto que estoy sintiendo su respiración caliente chocar contra mi rostro.

_ ¿Qué ha-c-es?_ casi no puedo ni hablar, me sudan las manos, mi pecho sube y baja sin parar. Mientras ella está a pocos centímetros de mis labios, con su mirada puestos en ellos y su frente pegada a la mía_ Juliana_

_ Dices que no te gusto, pero estás temblando_ solté otro suspiro al sentir el roce de sus labios.

_ Dices que no te gusto, pero estás queriendo besarme_ dije en un hilo de voz, intentado safarme_ pero anda a besar a mi hermana, ella si lo hará_

_ Shhh_  apreté los ojos cuando me besó, quise apartarme, pero no me dejó. Soltó mi mano, llevando la suya detrás de mi nuca, no me quedó de otra que ceder al beso. Bajando la guardia, sintiendo sus labios suaves con sabor a frutas. Joder, ¿Por qué tiene que besar tan bien?. Nuestras bocas se mueven en sincronía, no se por cuanto tiempo nos estuvimos besando, sólo eso. Llevé mis manos a su cintura, acercándola más a mí. Mientras ella soltaba un suspiro cuando atrapé su labio inferior entre mis dientes, tirando de el lentamente_ Mierda_ dijo con la respiración descontrolada, yo estaba peor o igual que ella.

_ No puedes hacer eso, no puedes besar a mi hermana y luego besarme a mí_ ella no dijo nada, sólo volvió a besarme, un beso más lento; sentí la punta de su lengua rozar mis labios, la dejé entrar de inmediato, soltando un gruñido de satisfacción al sentir su lengua moverse dentro de mi boca, como si conociera todo el lugar.

_ Juliana, ¡¿Qué te dije la última vez?!_ me aparté de ella al escuchar esa voz, había una mujer alta de piel morena con el ceño fruncido, creo que está enojada. Miré a Juliana en busca de una explicación, pero ella está con la cabeza agachada y los puños apretados. ¿Qué sucede? ¿Y quién es ésta mujer?_ ¡Te dije que no trajeras tus ligues a la casa! ¡A la casa de tus padres! ¡¿No respetas su muerte?! Ni un solo día lo has hecho_ dijo con un tono demasiado alto, acercándose más a Juliana. Yo sólo me quedé en el mismo lugar, no tengo idea de lo que está pasando. ¿Los padres de Juliana están muertos? Como lo voy a saber, si a penas se su nombre.

_ Descuida tía, ya nos íbamos_ Juliana tomó mi mano, entrelazando nuestros dedos. Ésta chica está mal, muy mal. No puede hacer ese tipo de cosas.

_ Huye como siempre, recuerda que por tu culpa ellos están muertos. Por tu culpa_

Juliana se dió la vuelta antes de llegar a la puerta de la salida, sostuve su mano más fuerte. No puede meterse en problemas_ ¡No es mi culpa! ¡No lo es!_

¿Qué rayos le pasa a su tía? No puedo opinar sin saber que pasó y tampoco tengo porque saberlo.

_ ¡Si lo fue! ¡Y ya vete!_

Por suerte la puerta está abierta, y no fue ningún problema sacar a Juliana de la casa, sentí una rabia horrible cuando su tía nos cerró la puerta en la cara. ¿Qué acaba de pasar? No tengo la mínima idea, sólo se que Juliana está llorando y que se lanzó a mis brazos, la abracé sin pensarlo dos veces, acariciando su espalda.

_ Juliana_

_ Vámonos de aquí_ dijo entre sollozos, levantando la cabeza, con las lágrimas brotando de sus ojos cafés_ por favor_ asentí, caminando con ella hacia el auto.

Tenían que ser dos (Juliantina) Where stories live. Discover now