Capitulo 25

3.3K 174 0
                                    

   El olor putrefacto a mi alrededor me hizo abrir los ojos de repente y la humedad en mi mejilla; levantar la cabeza. Al darme cuenta que estaba durmiendo arriba de vomito viejo me hizo dar arcadas. Rápidamente me levanté de la cama que se encontraba llena de mi emesis, me encontraba en mi casa de Nueva York, ni siquiera recordaba cómo había llegado hasta allí.

Corrí al baño y abrí la ducha lo más rápido posible, me metí al agua con ropa y todo, pues  estaba completamente sucio, mi cabello se encontraba hasta duro de la cantidad de porquerías que tenía. Una vez que el agua se encontraba tibia, relajante, me quité toda la ropa empapada, lave bien mi cabello y el olor a shampoo inundó mis fosas nasales. Mucho mejor que el olor anterior.

Al salir de la ducha con la bata puesta volví a la habitación, era un asco. Drogas de todo tipo por todos lados, botellas de alcohol que ni siquiera sabía que tenía se encontraban en el piso, volcadas. No recordaba nada de ayer, al igual que todas las noches durante una semana aquí, encerrada y sola.

Cada día el exceso era peor y peor, ni siquiera comía ya que utilizaba unas vitaminas que una vez un médico me recetó en una de mis giras. Mantenerme parada era un logro y mis huesos cada vez se notaban más, no me importaba mucho, no tenía nada que perder; ya lo había perdido todo.

Comencé quitando las sábanas sucias del colchón pensando que esto debía pasar Benny y la gente de limpieza cada vez que yo estuve así, ahora al estar sola me doy cuenta que es un total y completo desastre y disgusto. Al pensar esto una punzada de vergüenza penetró mi pecho imaginando lo que la gente encontraba a mi lado cada día.

Seguí limpiando el piso, mientras la lavadora cumplía su función, tirando varias botellas a la basura. Me di cuenta que mis brazos ardían, pues las lastimaduras cada vez eran más visibles.

Destinada a seguir con el trabajo de ordenar mi habitación, un timbre desesperado me detuvo y al abrir me encontré con Harry, agitado. Y aunque su apariencia de susto al verme me estremeció no pude evitar soltar una gran sonrisa.

-Estás bien. -Me agarró la cara mirando cada parte de mi cuerpo buscando algún signo de malestar y al ver que todo estaba en orden me abrazó como si no hubiera un mañana, a lo que correspondí. Lo había extrañado tanto.

-Volviste. -Dije sin soltarlo.

-Cómo no volver cuando me llamas de esa manera? Me asustaste, qué pasó? -Sus ojos preocupados me hacían sentir segura y querida, un sentimiento que hace mucho no experimentaba.

-De que hablas? -Realmente no sabía de qué hablaba, no recuerdo haber llamado.

-Ayer. Me llamaste diciendo que te sentías muy mal.

-Oh... es que... -Tenía que inventar algo rápido para que no descubra que era una maldita adicta nuevamente. -...tenia mucha fiebre. -Mentí. -Estaba delirando, ni siquiera recuerdo lo que dije. Pero ya estoy bien lo juro.

-Delirando? Qué pasa, Emma? -Estaba confundido y tal vez enojado, tal vez había descubierto que le mentía.

-Tengo que contarte un par de cosas... pasa. -Lo invité debido a que seguíamos hablando en la puerta sin darnos cuenta por la emoción de volvernos a ver y su preocupación.
   Al entrar le ofrecí un poco de agua, lo que aceptó.

-Primero... -Comencé a hablar. -por qué estás aquí tan temprano? es decir, creí que llegarías en unos días.

-Cancelé las últimas fechas, necesitaba ver que estabas bien... ayer me asusté mucho.

-Qué? Por qué? -Posé una mano en mi cabeza sintiéndome culpable por haber abandonado su trabajo antes de lo esperado.

-Me asuste. Estabas diciendo que te morías dentro de poco! -Levantó la voz.

Cerré los ojos, refregándome la cara con mi mano de la frustración. No tendría que haber dejado todo solo porque yo lo llamé. -No debiste venir, Harry. Cómo vas a dejar todo por una simple llamada? Que le dijiste a tu gerente y cómo dejó que te vayas? -Más que una pregunta, era un reproche.

-Cómo no hacerlo? No podías ni hablar. Que diablos tienes, Emma? Por qué nadie estaba contigo? -Me giré dándole la espalda, dejando los vasos en el lavadero, no podía escucharlo más. La culpabilidad de hacerlo volar hasta aquí solo por hablar con él estando drogada hasta la médula, me carcomía.

-No debiste. -Volví a mirarlo.

-Por qué? -Intentó acercarse a mí pero me alejé, me daba asco que me toque, no por él obviamente, sino por mí. Yo era un asco y no merecía a alguien como él. -Emma... que tienes? Estás enferma? Podemos arreglarlo... no te preocupes. -Su cara de preocupación me estrujaba el corazón.

-No es eso, solo... -No quería decirlo.

-Solo qué, Emma!? -Me apuró impacientemente, todo se estaba volviendo más violento.

-Estaba drogada! Y estoy drogada ahora mismo, Harry! Qué no te das cuenta!?-Exploté gritando y automáticamente me arrepentí de mis palabras. Se alejaría de mí y quedaría totalmente sola.

Se sentó de nuevo donde estaba antes, pasando sus manos por la cara procesando lo que acababa de decirle. Supongo que estaba decepcionado o tal vez lo sabía pero no quería reconocerlo.

-Por qué? -Preguntó sin mirarme, su vista estaba en el suelo, con sus codos apoyando en sus rodillas y las manos entrelazadas.

-Por qué, qué?

-Por qué haces esto!? -Gritó de golpe haciéndome sobresaltar, su voz era grave y enojada, sus ojos hechos un fuego me miraban como si pudieran traspasar mi alma.

-Porque así me siento bien, Harry! No tengo trabajo, no tengo familia, no tengo amigos! No tengo a nada! -Bajé la cabeza para que no viera como una lágrima salía de mi, la vergüenza me mataba.

-Me tienes a mi. -Se acercó y me abrazó, depositando suaves besos en mi sien. -Puedo ayudarte.

-No necesito ayuda. Estoy bien. -Hablé suavemente.

-Está bien... resolveremos todo. -Se balanceaba lentamente mientras acariciaba mi espalda con una de sus manos para hacerme sentir bien y si que lo lograba.

   De repente paró, me miraba a los ojos dulcemente con una pequeña sonrisa. Nuestras narices se rozaban, su aliento a menta chocaba con el mío, los segundos pasaban tan lentamente...

No lo resistí y lo besé, esperando que no rechace mis súplicas nuevamente.

MetGala // Harry Styles |TERMINADA|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora