Capítulo 13.

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Después de clases, Dagan y yo decidimos ir a despejarnos al bosque. Grisel no se enojó, solo nos miro a ambos y sonrío como si hubiera descubierto algo.

—Lo mío no es tanto el salir a caminar.

—¿Qué tal correr?

—Eso es mucho mejor.

—Me di cuenta de eso hace mucho, créeme.

Dagan acaricia su estómago.

—Tengo hambre, ojalá River haya preparado la comida.

—No hables de comida en este momento. — pido.

Vamos aún caminando cuando mi tripa comienza a rugir, inmediatamente cubro mi estomago con mis manos.

—Acaso fue... — lo interrumpo

—¿Qué? — Digo sorpresiva —.Yo no escuche nada.

Mi estómago vuelve a rugir y creo que la vergüenza no puede ser peor. Dagan se detiene cogiéndome por los hombros, hasta que se pone de rodillas pegando su oído a mi estómago.

—¡Oye! ¡Quítate! — lo empujo.

—Pensé que se trataba de un animal moribundo, pero solo eres tú.

—¡Tú comenzaste hablar de comida!

—Vamos, alimentaré a tu bestia interna — suelto un golpe en su brazo y este lo hace reír.

❃❁❃❁❃❁❃

De lo rápido que anduvimos a través del bosque, ya nos encontramos en el camino hacia la cabaña.

Pero Dagan se detiene en seco.

—¿Qué ocurre? — levanto ambas cejas.

—¡Maldita sea River!

Guardo silencio y observo a lo que se refiere, River hizo otra reunión en la cabaña.

—Descuida puedo ir a casa y comer algo.

—No, dije que te daria algo de comer y lo haré — asegura —. Pero me molesta que River ni siquiera me haya avisado cuando yo...

No termina la frase.

No entiendo porqué esta molesto cuando las fiestas son muy frecuentes en su casa.

¿O simplemente es otra razón?

Tomo su mano y lo jalo.

—Andando, la bestia no podrá alimentarse por sí sola.

❃❁❃❁❃❁❃

Nos adentramos en la cabaña y hay más gente que la última vez, hoy no hay un música acústica; en su lugar hay una radio que envía vibraciones dentro de la cabaña, música se expande y llena todo el espacio.

Al menos así no se escucha mi tripa rugiendo.

—¡Ay! — grito cuando recibo un golpe en mis costillas.

Dagan me pone delante de él y me cubre con su cuerpo de los empujones de alrededor, sonrío para mis adentros por la acción protectora que tiene.

¿Es así cuando un chico te protege?

Subimos las escaleras con dirección a su habitación y al entrar vemos a un par de chicos en su cama.

—Fuera de aquí — ordena.

Ambos se sobresaltan por el grito de Dagan. La chica pasa a mi lado acomodándose su blusa.

Embarazoso.

RAIN [Libro 1]Where stories live. Discover now