Sweeter Than Heaven |l.s.| Español

veintiséis - 2014

veintiséis – 2014

            Cuando Zayn se despierta, Liam no está a su lado.

Es todo un poco confuso al principio, mientras trata de recordar los acontecimientos de la noche anterior; los gritos, los gemidos, el llanto, los besos que él y Liam intercambiaron, todo. Un sentimiento de gratitud corre a través de su corazón cuando se da cuenta de que aún está vivo, pero desaparece en el momento que se da cuenta del espacio vacío junto a él -Liam no está allí.

Zayn se traga el nudo en su garganta, mientras intenta con todas sus fuerzas no entrar en pánico por el hecho de que su amante está desaparecido, lo que significa que él está solo en un vacío, edificio abandonado y no sabe hacia qué dirección tiene que ir. Eventualmente, el joven se levanta del suelo de la sucia cocina y empieza a dar un paseo por la cocina, y luego sale hacia el pasillo; él no recuerda a Liam dejando sus brazos, a pesar de que trato de dormir en gran medida, para que todo lo que pasó con él no le hiciera daño en absoluto.

—Despertaste —la voz de Liam lo sobresalta, causando que su corazón casi saltara por su garganta. Se da la vuelta para enfrentar a Liam, que está apoyado en la puerta con una sonrisa pícara en sus labios y sus musculosos brazos cruzados delante de su pecho.

—Tienes que dejar de hacer eso —respira con alivio Zayn, caminando hacia Liam—. Pensé que habías desaparecido.

—¿Y adónde habría ido, tonto? —se rio en voz baja el muchacho mayor—. Realmente bay mucho que explorar.

Zayn entierra el rostro en su pecho— Realmente no quise decir eso —murmura.

—Nada va a pasarnos de todos modos, amor —lo calma Liam después de que comprendiera lo que Zayn estaba insinuando—. Mira, es de día y estamos vivos, y yo estoy aquí contigo y nada va a pasarnos.

—El hecho de que haya luz no significa que no pueda estar oscuro en cualquier momento —razona con escepticismo Zayn—. ¿Piensas que el sol simplemente va a protegernos de cualquier mierda que acecha en este lugar?

—Podríamos ir a sentarnos afuera si así lo deseas —sugiere Liam—. No tienes que sentarte aquí más, se ha ido la tormenta y esta soleado afuera —extiende su brazo para que Zayn pueda tomarlo, pero en cambio Zayn lo abraza con sus dos brazos alrededor de su espalda— ¿Z?

—Simplemente, gracias, ya sabes. Por- por confiar en mi y todo lo relacionado con algo tan personal, no creo que yo pudiera haber confesado eso tan fácilmente si fuera tú.

Liam muerde sus labios— Pensé que si quería estar contigo en una real y adecuada relación, tenía que resolver todos mis problemas y luego seguir adelante; Yo no quería que tuvieras un mal momento conmigo por algo que sucedió en el pasado y en lo que no estuviste involucrado. Tú harías lo mismo por mí.

—Sí —sonríe con timidez Zayn—, lo haría. Me alegro de que confiaras en mí lo suficiente con algo tan personal y que de hecho bajaras la guardia, yo- yo sé lo difícil que debió haber sido para ti. Y, y lo siento por lo de anoche también, yo no quise decir-

—No tienes que disculparte por algo que no se puede evitar, cielo —lo interrumpe Liam con dulzura—. Ambos estábamos asustados, te lo puedo asegurar —su mano, cálida y tierna, se extiende para alcanzar las desaliñadas mejillas de Zayn mientras presiona su pulgar, acariciándolas con amor—. Eres tan hermoso —susurra Liam, inclinándose y presionando sus labios contra los de su novio.

El beso es cálido, confortable y relajante; Los labios de Liam se derriten lentamente contra los de Zayn mientras el muchacho más grande envuelve sus brazos alrededor del delgado torso de Zayn, ahuecando a escondidas su pequeño trasero— Sólo quiero salir de aquí —Zayn siente a Liam susurrar contra sus labios—. Quiero que salgamos de aquí y volver a mi casa y dormir y simplemente no preocuparme por nadie más que tú y yo —y Zayn puede imaginar eso, muy vívidamente podría decirse; él imagina quedarse en la cama con Liam, envuelto en mantas calientes, con la terrible estancia en el Manicomio siendo olvidada. Se imagina los besos que dejara en el cuerpo de Liam, y que va a hacerlo sentir muy, muy bien, compensando por todos los días que perdieron uno sin el otro.