♡ 052 ♡

58.1K 4K 9.4K
                                    

"Me rehuso a que vaya."

"Alfa."

"¿Qué tal si le pasa algo? Podemos pagar una niñera." Harry se cruzó de brazos. "No irá."

"Amor, en la guardería no le pasará nada y tiene que hacer amigos, Eros tienes tres años y a las únicas personas que conoce son los que viven en esta casa." Louis lo abrazó por atrás besando su espalda. "Estará bien." 

El alfa suspiró dándose por vencido acariciando los brazos del omega con cariño. Louis apoyó la mejilla en su espalda.

"Está bien, vamos."

Louis sonrió corriendo a la habitación de Eros, el pequeño omega dormía su siesta así que con suaves pasos se acercó a la cama.

"Mi amor, despierta." El omega susurró acariciando sus rizos dorados. "Vamos a salir príncipe." Sonrió cuando Eros comenzó a moverse.

"¿Mami?" Murmuró con la voz adormilada.

"Vamos mi dulce niño." Louis lo tomó en brazos y Eros se acurrucó sobre su pecho. "No te duermas otra vez."

"Sueño mamá."

"Lo lamento mi niño pero si espero un segundo más tu padre se arrepiente." Susurró bajando las escaleras.

Eros bostezó abriendo los ojos y sonrió al ver a su padre en la sala.

"¡Papá!"

"Mi bebé, mi niño bonito ven aquí." Harry abrió sus brazos y Louis sonrió bajando a Eros para que pudiera correr a los brazos de su padre. El pequeño omega chilló con emoción cuando el alfa lo alzó por el aire besándole las mejillas.

Eros era la adoración de sus padres, de todos. Era tan listo para su edad y reía demasiado. Amaba a Louis de una manera ridícula siempre pidiendo sus brazos, acurrucándose sobre su pecho. Pero la manera en la que Eros amaba a Harry era totalmente diferente, Eros buscaba a Harry todo el tiempo, Louis se sentía celoso al saber que la primera palabra de su bebé fue para Harry. Cuando el alfa llegaba Eros se convertía en un espectáculo de chillidos y risas queriendo estar con el alfa pero eventualmente regresaba a Louis porque lo echaba de menos.

Eros era un omega consentido, lo que quería lo tenía ¿eso era malo? Quizá, pero si Harry mimaba a sus omegas era asunto suyo y nadie se atrevía a decirle nada. Tener dos omegas consentidos en casa era todo un espectáculo y tener a un alfa que haría cualquier cosa por ellos era incluso mejor. Los empleados ya estaban acostumbrados sin mencionar que Zayn adoraba a Eros como un pequeño dios y Louis sabía que tenía que mantenerlo lejos en esta decisión porque era capaz de convencer a Harry de no dejar salir a Eros nunca.

"Te extrañé." Eros abrazó a su padre acurrucándose sobre él.

"Te extrañé mucho Eros, estabas dormido cuando llegué."

"Siesta."

"¿Era hora de tu siesta?" Harry acarició sus rizos con una sonrisa y lo sintió asentir.

"Vamos, Zayn quiere que vayamos a cenar con ellos." Louis tomó la mano del alfa y salió de la casa.

"¿Terminaron de desempacar?" Harry caminó al estacionamiento y buscó un auto. "Elige un auto Eros." Lo bajo y sonrió cuando el pequeño omega corrió hasta la camioneta blanca.

"¡Aquí!"

"Ya escuchaste a tu hijo, omega." Harry le besó los labios. "Te amo."

m i m a d oDonde viven las historias. Descúbrelo ahora