15

6.9K 497 8
                                    

-Wowowow ¿Qué mierda acabas de decir? Esto es broma ¿No? - miro a ambos pero al ver qué nadie responde me deja claro que no, no es ninguna broma- es imposible, ¿Cómo me voy a casar contigo? Esto es una jodida locura.

-Bueno, sea una jodida locura o no eso se hará, nos vamos a casar y no, no puedes negarte, el consejo ya ha hecho las cosas y así se deben cumplir, además que míralo como algo bueno, los dos seremos más fuertes-.

¿Será que con eso de nuestras almas se vuelven más fuertes es a lo que refirió mi madre? De ser un cirux... aún así no puedo hacerme a la idea de casarme y menos con este tipo.

-Yo, lo siento, no puedo hacerlo...-

-¿Y porqué no?- dice con cierto tono de enojo.

-Porque no te amo y no me veo una eternidad a tu lado-

-No queda de otra, nos vamos a casar, la fiesta de presentación es en dos días, así que hazme el gran favor de no hacer nada estúpido- miro como se marcha de la sala para después dar un portazo.

Miro a Jay esperando a que me diga que es broma.

-Mi pequeña, Gi, es lo que hay y no puedo hacer nada para ayudarte, solo...piensa que es lo mejor para ti...para ambos- dicho eso se retira dejándome con una confusión de mierda, ¿Quién diría que me casaría por obligación? Buah, que más da, en dos días me presentan como la prometida de este baboso y no sé cuando sea la boda.
En fin, me levanto de mi asiento y salgo al jardín, hoy es un día nublado. Me recuesto en el pasto y cierro mis ojos, trato de inhalar todo el aire que puedo como si este se pudiera acabar, siento unas pisadas cercas, rápidamente me reincorporo y miro a mi alrededor, no hay nadie, que raro, juraría que escuché algo, debió de haber sido un animal...

-¿A quién buscas, preciosa?- dice alguien al lado mío causandome que de un pequeño brinco en mi lugar- Vaya, ya ni porque eres vampira pudiste captarme, a menos de que aún no desarrolles tus poderes- me mira fijamente con los ojos entrecerrados, joder, otra vez este tipo que se apareció en mis sueños.

-Vaya mierda, otra vez tú- digo alejándome un poco pero este se acerca.

-Igual es un gusto verte de nuevo, hermosa-

-¿Cómo sabes que ahora soy...una vampiresa?- digo mirándolo con curiosidad.

-Los chismes corren rápido, querida, igualmente se sabe que se van a casar tú y aquel tonto de adentro- siento como se acerca más y más- es un lástima que una belleza como tú se vaya a quedar con este tal Asher, en cierto punto lo envidio pero aún no gana la guerra- dice mostrando una sonrisa macabra, con un rápido moviendo se pone sobre mi, trato de forcejear pero lo único que logro son risas por parte suya- ternura, aún no eres lo suficientemente fuerte como para defenderte, solo causas pena ajena- su rostro está a escasos centímetros de mi cara- no sabes cuánto te deseo-

-No te conozco lo suficiente, aléjate de mi, imbécil- él solo ríe y me mira con sus ojos llenos de lujuria.

-Pronto serás mía- siento como me besa, su lengua trata de entrar a mi boca pero no se lo permito, me muerde el labio para poder abrir mi boca y así con facilidad mete su lengua, su beso es salvaje pero siento repugnancia con cada movimiento. Sus manos van subiendo por mi cuerpo hasta que llega a mis pechos, los aprieta con fuerza produciendo un ligero quejido por parte mía, siento su erección entre mis piernas. Esto no es posible, siento como lágrimas corren por mis rostro hasta que escucho el grito de alguien.

-SUELTALA, MALDITO HIJO DE PUTA-

-Nos arruinaron la fiesta, guapa, no me extrañes que después vuelvo por ti- y así sin más se desaparece, como si fuera polvo, se esfumó de mi vista.

-Gi, ¿Estás bien? ¿Quién era ese maldito? - no puedo hablar, el llanto no me lo permite- Oh mi pequeña, ya pasó- me acurruco en los brazos de Asher mientras me susurra cosas tranquilizadoras- hablaré con el consejo, adelantaremos para el día de mañana la presentación, entre más rápido unamos nuestras almas mejor será- ni digo nada, solo me quedo callada, dejo todo en sus manos.

Eternidad CompartidaWhere stories live. Discover now