18

6.6K 477 15
                                    

Una luz ilumina el lugar en dónde me encuentro, doy una rápida repasada para ver si puedo identificar a alguien «por más absurdo que se escuche», bajo la vista un poco y me topo a una Jay muy animada mirándome y a un Asher con una cálida sonrisa dándome la mano, recojo un poco el vestido para no tropezar, bajo cuidadosamente hasta llegar a Asher, siento todas las miradas puestas en mi, como no, llevo un enorme vestido rojo y ¡Oh! Claro, me voy a comprometer con uno de los vampiros más importantes de aquí, casual.
Una vez abajo le doy una pequeña sonrisa y tomo su mano, siento como me da un ligero apretón y me deposita un beso en la mejilla, después voltea a los invitados y la fiesta comienza.

-¿Sabes? Pudiste haber escogido algo menos llamativo, algo casual- digo mientras nos dirigimos a una mesa en dónde se encuentra Jay, un chico y una chica.

-Lo sé, pero eres alguien que merece ser apreciada, la belleza de la mujer no debe ser opacada o menospreciada, todo lo contrario, debe relucir ante todos- no digo más y llegamos a la mesa, Jay se levanta y me envuelve en sus brazos.

-Por Dios, luces realmente hermosa, pfff se esmeró la persona que te arregló, toda una profesional- dice tomando una pose de diva mirándose las uñas, me provoca una ligera risa.

-Sí, es toda una experta en lo que hace, lástima que no pudo hacer mucho con ella misma- digo bromeando, cambia su semblante y se pone una mano en el pecho-

-Eso me ha dolido, no sabes cuánto- se limpia unas lágrimas falsas- pero bueno, dejando de lado esta humillación. Gissel, te presento a Omar y a Mónica, son viejos amigos míos y conocidos de Asher-

-Un gusto- extiendo la mano para saludar a Mónica, en un rápido movimiento me atrae a sus brazos.

-Deja las formalidades, que eso no va conmigo, como Jay ya dijo, soy Mónica. Se la ha pasado todo el tiempo hablando de ti, de lo importante que eres para ella- dice con una sonrisa- y no está demás decir que luces preciosa-

-Gracias, Moni-

-Y yo soy Omar, hermano de esta mocosa de al lado- Mónica le da un ligero golpe-

-Que estoy aquí, animal-

-Ya lo sé- voltea los ojos-  como sea, un gusto conocerte, nos han contado mucho de ti, espero y podamos conocernos un poco más-

-El gusto es mío-

-Bueno, ya fue mucha presentación- aparece Asher entre nosotros- debemos seguir con la fiesta y con eso me refiero a presentarte al consejo- dice tomándome la mano, nos encaminamos hasta una mesa en dónde están unos señores de la tercera y edad, mientras más nos acercamos más me pongo nerviosa ¿Debería? No lo sé.

-Señores, les presento a Gissel, mi prometida- se levantan de la mesa y me sonríen.

-Un gusto al fin conocerte, pequeña, mi nombre es Andre y espero que no estés molesta por tan repentina decisión sin siquiera haber pedido tu opinión- este señor me agrada, es muy amable.

-Oh, descuide, sé en las situaciones en las que estamos y sé que esto es lo correcto aquí-

-A decir verdad, tampoco es que supieramos de tu existencia hasta hace poco, dónde nos enteramos que Asher te había convertido en uno de nosotros- un segundo señor se acerca.

-Mi nombre es Li y ella es mi esposa Esme, un gusto concerte-

-Hola, queridita, luces hermosa, ven alejemos de estos esqueletos aburridos- dice empujandome y tomándome por sorpresa ante su comportamiento.

-Querida, aún no se terminan de presentar los demás, no hay prisa- responde su esposo.

-Son unos lentos. Mira querida, el señor pelinegro, alto es Matt, el pelirrojo de allá es Carlo y ya los demás los conoces, con eso basta. Ahora, si nos permiten iremos hablar de cosas de mujeres- Asher se me queda mirando con una sonrisa de lado mientras los demás miran con confusión a Li, él solo levanta los hombros.

-No puedo hacer nada, podré estar viejo pero ella manda- alcanzo a escuchar a lo lejos.

Me lleva hasta el otro punto del salón, nos sentamos en unos sillones y comienza a hablar.

-Luces igual que tu madre- su comentario me toma por sorpresa.

-¿Usted conoció a mi madre?-

-Era apenas una niña cuando la vi por primera vez, tenía el cabello marrón claro, piel blanca y ojos celestes, era un amor de persona y a la vez una persona muy rebelde, siempre andaba fuera del castillo y andaba en el pueblo- sus ojos denotan cierta melancolía y no sé porqué- la manera en la que nos conocimos no fue muy agradable para mí, ya que en aquel entonces había detonado la guerra entre vampiros y lobos, tu madre me salvó- voltea a mirarme.

-Estaba en casa con mis padres, trataban de esconderme ya que los lobos estaban matando a todo el que se le cruzara. Me metieron a un cuarto que estaba en el sótano, ellos salieron y ya nunca más volvieron - baja la mirada y su voz comienza a perder volumen- después de eso escuché ruidos y creí que eran ellos, salí y me topé con tu madre, me tomó en brazos y me sacó de mi antiguo hogar, pensé que jamás me encontrarían pero ella...ella lo hizo. Viví con unos amigos de ella, siempre iba a visitarme, a ver qué estuviera bien, fue muy amable conmigo hasta que tiempo después dejé de verla, las malas lenguas dijeron que se había fugado con tu padre, su alma gemela. Luego nos enteramos del tráfico accidente, se decía que tuvieron una niña pero que estaba perdida y ahora -toma mis manos- estás aquí, apunto de comprometerte con Ash, que cosas.

-Wow, no sé que decir al respecto, nunca conocí a mi madre o a mi padre y mucho menos tuve una fotografía de ellos hasta que mi vida dio un cambio extremo-

-Las cosas pasan por algo querida, no lo olvides- veo como se acerca Asher con su sonrisa, al parecer jamás se le va a quitar.

-Señoritas, ¿Me podría permitir a esta bella dama,Esme?-

-Por supuesto, yo ya regreso con el anciano de mi marido, disfruten de su día-

Asher me toma de la mano y me lleva hasta el centro de la pista, comienza a sonar Rainbow Connection, esa canción me trae bonitos recuerdos.

-¿Será que esta bella dama me permite está pieza?- se inclina y me extiende su mano.

-No miro a nadie más disponible así que solo me quedas tú, me veré obligada a bailar contigo-

Ríe levemente y me atrae hacía él, pone una mano en mi cintura y con la otra me toma la mano.

-¿Crees en el amor a primera vista-

-Que cliché te has escuchado, Ash-

-La vida es un cliché, esto es un cliché-

-Claro, cliché es que te secuestren, te conviertan en vampiro y o si, que estes apunto de casarte con el causante de todo eso-

-Sí lo dices así me pones como el malo-

-oh ¿Y no lo eres?- suelta una carcajada y me mira.

-Un poco, tal vez, pero te faltó algo en esa lista de cliché-

-¿Qué?-

Me besa, es un beso lento, cálido, me produce mil y una sensaciones. Sus labios son tan cálidos, no me quiero alejar de ellos.

Eternidad CompartidaWhere stories live. Discover now