🐺 Alfa 🐺 Namkook - Kooknam [Bts]

47.

Su costado derecho dolía horriblemente mientras corría, aunque agradecía que el sangrado se hubiera detenido, al parecer no había sido una herida tan profunda, incluso llegó a pensar que tal vez su padre había dudado en atacar al reconocerlo y... No tenía tiempo para eso, de algún modo (usando su voz de mando), logró que Jin tomará a un inconsciente, pero en mejor estado, Jungkook y huyera del lugar junto a Yoongi y Jimin quienes obviamente no querían hacerlo sin él pero no podía irse sin asegurarse de que Taehyung y Hoseok estuvieran a salvo. Los gritos, suplicas, llantos y el olor a sangre llegaron a él haciendo que su propia sangre se helara.

Llegó al pueblo más rápido de lo que espero y tanto como lo deseo, pues temía que su mejor amigo o hermano corrieran algún riesgo, corrió por las calles llenas de sangre y algunos cadáveres. Sintió la tristeza de reconocer algunos rostros, aulló con fuerza esperando una respuesta que nunca llegó, jadeó por la falta de aire y alzó el hocico para olfatear el aire. Logro percibir el dulce de durazno con alivio, sentía su desesperación, lo que lo llevó a apresurarse al lugar cuando también percibió un lobo con el menor. Llegó a la parte trasera de su casa donde se lleno de rabia al ver la escena, su hermano menor estaba en el suelo inconsciente y desnudo mientras era defendido por un lobo en diferentes tonos de café sobresaliendo el amarillo quemado, ambos eran rodeados por un numeroso grupo de vampiros.

Saltó junto al lobo que reconoció como a Hoseok y gruñó haciendo que varios dieran pasos atrás por la sorpresa, no lograba escuchar los pensamientos de su mejor amigo pero sabía que los dos querían lo mismo, por lo que atacó a los vampiros rompiendo sus cuellos y arrancando sus cabezas sin compasión alguna. Fue en ese momento que entendió algunas (muy pocas, en realidad) acciones de su padre. Cuando estuvo seguro de que estaban fuera de peligro, volvió a su forma humana y se acercó a su hermano aún en el suelo, sintió como su amigo también se acercaba pero sin dejar de ser un lobo. Suspiró aliviado, Taehyung no había sufrido ningún daño grave, tal vez habia quedado inconsciente por el cansancio de pelear contra tantos oponentes.

—Escúchame, Hoseok...— inició, mirando sus ojos ámbar —Tienen que irse ahora. Toma a Tae y busca a Jin, ¿bueno?— lo veía con seriedad.

El lobo gruñó en desacuerdo y lo miró de forma penetrante, Namjoon sabía que le estaba transmitiendo sus pensamientos (quejambres, en este caso) pero no lo entendía, su vínculo se había pedido y ese no era el momento de crear uno nuevo. Hoseok, al ver que no era escuchado, volvió a su forma humana y se acercó al más alto. Era claro lo que estaba por decirle pero el alfa no pretendía escucharlo, se agachó tomando en brazos a su hermano menor y advirtiendole al beta que no dijera nada con solo su olor, hizo que se transformará nuevamente en lobo para colocar a Taehyung en su lomo.

—Busca a Jin, no vuelvas y no permitas que Taehyung vuelva— le ordenó —¡Que nadie regrese!— rectificó.

El lobo gruñó y lamió una de sus mejillas, una clara señal de suerte y que volviera pronto, Namjoon sonrió viéndolo partir con gran velocidad pero siempre cuidando que Taehyung no cayera. Apretó los labios ¿Era estúpido hacer aquello? Todos dirían que sí pero él no lo creía del todo, tal vez no los podría nunca considerar como sus padres pero ellos le habían dado la vida, fuera como fuera les debía al menos un agradecimiento por eso, ¿no? Respiró hondo y comenzó a cambiar de forma, ya había sentido los olores de sus padres, lo que consideraba extraño ¿Por qué no estaban en su forma de lobo?

"Jongin, Chanyeol..." Quisiera que sus pensamientos los hubiera alcanzado pero solo pudo observar como ambos, tomados de la mano y vestidos únicamente con pantalones, corrían. Estaban huyendo. Huían, aprovechando la conmoción en el pueblo. Entró en alerta, estaban siendo perseguidos por vampiros, probablemente no querían transformarse para no correr el riesgo de ser descubiertos y más aún sabiendo que el líder estaba cerca. Se lanzó para protegerlos, haciendo que por fin notarán su presencia, sus amigos lo vieron con asombro y luego parecieron preocuparse al notar la herida cicatrizandose en su costado. Volvió a su forma humana rápidamente.

—Si van a irse, háganlo rápido— demandó en voz baja.

—Tú... ¿Estás bien?— Jongin miró la gran herida.

—No se preocupen por eso— respondió con voz plana —¿Qué hay de Jaebum y Jinyoung?— ellos también le preocupaban.

—Ellos...— Chanyeol dudó en responder —Huyeron— voz baja e incomoda.

Namjoon bajó la cabeza y sonrió, si eso era lo que consideraban correcto, se alegraba por ellos. Se despidió de ambos y volvió a su forma de lobo para seguir su objetivo inicial, Chanyeol y Jongin lo vieron irse en silencio antes de compartir una mirada y volver a correr, huyendo tan lejos como les permitieran sus piernas. Él también corría, corría con desespero porque había sentido el olor a sangre y no era un gran problema, ya que estaba rodeado de ese olor pero sí lo era cuando ese olor provenía del mismo lugar donde estaban sus padres. Sus padres que no se habían transformado. Sus padres a pesar de todo.

—¿Qué se siente estar en esa posición, señor líder?— ¿A quién pertenecía esa voz?

Llegó, por fin había llegado. Se congeló. Sus ojos abiertos en shock, su gran cuerpo temblando, su boca abierta con un grito atorado en su garganta y un nudo imposible de quitar. Su madre, aún tibia y desnuda, tirada en el suelo con una gran herida que atravesaba su pecho. Tal vez Hyolyn nunca se comportó como la madre que era con él pero la tristeza de perderla estaba ahí, ahí en su corazón sensible y destrozado. Su padre, golpeado y desnudo, estaba arrodillado junto a la mujer que amaba con lágrimas secas en su mejillas y, de algún modo, incapacitado para hacer algo. Su presencia fue notada rápidamente, su padre y el vampiro que parecía ser el líder, lo miraron.

—¿Qué tenemos aquí?— el vampiro sonrió con sorna —Debe ser uno de tus adorados hijos, ¿no?— se burló de Kyungjae —Su transformación se parece a la de ésta zorra— señaló a Hyolyn.

Namjoon gruñó, aunque era verdad, su madre era una loba negra con patas blancas, era realmente hermosa y era a ella a quien había salido. Kyungjae frunció el ceño hacia él, advirtiendole en silencio que no actuará, tal vez su instinto paterno por fin se había activado con él. El lobo negro dio unos pasos atrás manteniéndose en alerta y cuidándose de su agresor, movió sus ojos para ver alrededor, más vampiros habían aparecido. Su padre parecía sorprendido por ello, pues tenía noticias de un pequeño grupo, no un aquelarre completo. Fueron rodeados rápidamente, estaba en clara desventaja, era aún más notable gracias al estado de sus padres.

—Me encargare de ustedes y después...— hizo una pausa dramática —¡Iré por todos los que sobrevivieron!— gritó eufórico.

Su mente viajo hacia sus hermanos, amigos y... Jungkook. No. No le permitiría hacer algo así, no le importaba arriesgar su vida si con eso se aseguraba de que todos ellos estuvieran a salvo, no permitiría que nada los dañará. Se lanzó contra aquel horrible ser, fue detenido por los vampiros, gruñó deshaciéndose de ellos y volviendo al ataque. Ignoró el dolor de su herida volviéndose a abrir, ignoró las nuevas heridas obtenidas e ignoró las ordenes de su padre por detenerse. Ignoró todo, todo menos a sus enemigos.