•CONTRATO• | Taejin| *Cancelado*

Capítulo 10

Taehyung le acarició con suavidad al mismo tiempo que le quitaba ese brazalete, observó ahora claramente a aquella mujer desnuda tomando el lugar de Jin, era una ilusión pero nada de lo que ella tenía podía hacerle caer, esos pechos exuberantes y ese cabello largo y rojizo no le eran atractivos, solo tenía ojos para SeokJin y no dudo en apretar esa pulsera para quebrarla en su mano así haciendo que esa serpiente en forma humana se desintegrará. Vio a Jin caer sobre su cuello aún temblando perdiendo sus fuerzas al ser liberado de ese parásito. 

— Qué es lo que esperabas obtener al hacer este contrato insignificante? — Preguntó acariciando los cabellos húmedos del mago. — Qué es lo que estás buscando? — Agrego en un susurro gutural y seductor que provocó el temblor del humano desnudo sobre si.

— Quiero saber más de ti... — Pronunció apenas aún confundido y débil.

Taehyung no pudo contener una sonrisa satisfecha al oír su respuesta, Jin hizo un contrato para saber más de él y no pudo evitar que eso le pareciese lindo.

— Entonces dime — Insistió para coger ese cuerpo masculino entre sus brazos y comenzar a lamer la oreja ajena en un obvio intento de seducción.

— "Shadow", Por qué todos los demonios tiemblan al oír tu nombre? —

— Mi nombre? — Soltó más para si mismo al saber que Jin no era para nada ingenuo y supo su nombre entre los demonios así de fácil, quería a Jin pero no estaba seguro si decirle la verdad fuera conveniente, quizá hasta llegaría a temerle.— Fui un hábil soldado del rey demonio en el pasado, hasta los demonios le temen al verdugo del infierno... — Mintió para ver a SeokJin despegarse para mirarle a la cara.

— Verdugo? — Dijo pensativo aún acalorado pero ya más repuesto.

— Sí... —

— Eso es aterrador! — Pronunció pero Tae se llevó una sorpresa al sentir esos labios sobre los propios como si sus palabras no hubieran sido la gran cosa, pensó que quizá Jin se asustaría o algo pero lo tomo bastante bien aún así era una mentira.

Había expulsado a ese parásito pero SeokJin no cambio de parecer, estaba sentado en sus piernas mientras le besaba con insistencia y moviendo la pelvis de vez en cuando haciendo que sus erección se frotaran ente sus estómagos, provocador y atrevido como nunca imaginó a Jin.

— Hey! — Le llamó cuando su boca fue liberada y llevo sus propias manos a la pelvis ajena así deteniendo ese movimiento provocativo.

— No quieres hacerlo conmigo? — Preguntó acalorado y un tanto más serio.

— No es eso... — Tae estaba más que sorprendido, pensó que ese momento nunca llegaría, se conformaba con la lujuria a través del tacto y ese sueño erótico de antes, era consciente del hecho de que SeokJin ya no era un niño y como adulto obviamente tenía esas necesidades carnales que hasta ahora no se atrevió a saciar, había conseguido su objetivo al volverse un mago de élite, su trabajo era estresante y agotador, lo que significaba que el sexo era una buena herramienta para liberar tensiones.

— Solo es sexo, no es como si te amara — Aclaro para luego acariciar los pectorales del demonio bajo si, fue delicado y amable con cada caricia, sus besos fueron cortos y dulces a diferencia de esas palabras que escaparon de su boca. V apretó los labios algo dolido, deseo recibir palabras de afecto pero su contrato le impedía ser el receptor del amor ajeno, ahora solo podría consumir ese cuerpo y ser amado de forma no verbal.

— Suena justo! — Dijo al dejarse caer por el encanto ajeno, recibió gustoso los besos y tocó con libertad esa piel suave, recorrió los músculos de esa espalda amplia y masculina, delineando con las yemas de sus dígitos los huesos de la columna, su propia boca se lleno de jadeos ante la excitación, podía sentir el pene hinchado y palpitante de Jin sobre su abdomen bajo, además del calor de esa carne sobre si, con lentitud bajo hasta esos glúteos y los apretó con fuerza robando un jadeo sensual al hermoso humano quien le estaba permitiendo tomarle en ese momento.

— Taehyung... — Le llamó completamente entregado al placer que esas manos le entregaban, su cuerpo estaba sensitivo y su corazón latía apresurado como si en cualquier momento fuese a explotar.

— Eres hermoso. — Comento Tae al ver a Jin recto, su cuerpo era masculino, su pezones sobresalían en contraste con su piel lechosa, quería tocarlos así que abandonó los glúteos para subir y agarrar con firmeza esa cintura pequeña, definitivamente tenía un cuerpo maravilloso, varonil y encantador, observó ese pene duro y rojizo perdiendo de vista su objetivo inicial, SeokJin tenía un buen tamaño pero el suyo lo era incluso más grande.

Estaba ansioso y no tardó en impacientarse aún cuando disfrutaba bastante del juego previo, quería comerle y ya no aguantaba el hambre, le tuvo a su lado y le vio crecer con lo años, cuando Jin cumplió los diecisiete ya había comenzado a oler de esa forma lasciva, esa fragancia deliciosa del primer día se transformó en una incluso más apetitosa como una fruta madura de olor dulce.

Se perdió en su propio deseo, segado por su libido se dejo caer en sus bajos instintos, mordía esos pezones con hambre, dejando marcas en esos pectorales mientras metía sus dedos en ese apretado orificio cada vez más húmedo. Los gemidos y jadeos de Jin eran encantadores, nada que decir de las expresiones sobre ese agraciado rostro, no podía despegar la vista de esas hermosas facciones. SeokJin notó la mirada azulina sobre si y avergonzado se refugió en el cuello de su compañero.

— No me mires — Pidió abrazando al pelinegro.

— Pero te ves tan hermoso y apetitoso... — Dijo divertido para sacar sus dedos para comenzar a frotar su miembro entre esos glúteos firmes, Jin temblaba a la espera tan ansioso como él.

Sin hacerle esperar más le penetró con lentitud, soltó un gemido grave al sentir esa carne caliente abrirse a su paso apretándole de forma acogedora, su corazón se llenó de un sentimiento cálido, amaba a ese hombre y tenerle jadeando por él le fascinaba.

— Dime si duele — Pidió Taehyung comenzando a moverse de manera pausada apretando ese trasero masculino entre sus dedos.

— Estoy bien... — Jin se acomodó para mirarle ahora con los ojos húmedos y su rostro sonrojado, le beso por enésima vez con tanta dulzura como el primero.

SeokJin le estaba volviendo loco, tan dulce y sensual, no podía contener sus ganas y le dio una embestida fuerte, el placer le recorrió por completo, comenzó ese ritmo rápido y fuerte al ver como el mago se estremeció y le apretó de forma deliciosa.

— El agua... — Pronunció apenas sin lograr terminar la frase cuando ese miembro golpeaba tan profundo en sus entrañas que casi pierde la cabeza, era la primera vez que tenía sexo y las nuevas sensaciones y el placer le estaban destrozando. — Me gusta! — Soltó tembloroso agarrándose de los extremos de la tina, con los ojos cerrados y su boca abierta.

Sus alas salieron a relucir, el agua escurrió de sus plumas estremeciendo con cada embestida, se sentía demasiado bien.

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Su cuerpo estaba sudado, pegajoso y las sábanas se pegaban a su piel, estaba agotado pero no podía descansar cuando Taehyung le estaba empujando desde atrás, hundiendo su miembro dentro y golpeando su estómago en los que fueron las ultimas embestidas, el orgasmo le consumió y gritó con la voz quebrada. Tae le dejo ir por fin, la calidez entre sus entrañas le abandonó y recibió besos en su nuca y cuello con ese demonio aún aplastándole, acomodó la cara en la almohada viendo esas alas negras batir ligeramente, amaba eso y con dificultad estiro su brazo para alcanzar con sus dedos esas plumas, las acaricio con torpeza y entonces se encontró con la cálida sonrisa en el atractivo rostro de ese demonio de hermosos ojos azules.

— Te quiero... — Habló el ser alado acariciándole con lentitud y amor.

— Yo... — Su corazón estaba en su garganta, su pecho se volvió cálido y escuchar esas palabras solo empeoró sus síntomas, gustaba demasiado de ese demonio pervertido, no le importaba ser devorado pero ni siquiera logró decir más de una palabra porque Tae le silencio.

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Gracias por leer! 💞