La Última Misión del Clan Uchiha: La despedida de Sasuke

Capítulo 19: Nuevos Aliados

Sakura

Habían pasado un par de días desde que Sasuke había perdido la conciencia. Mis captores habían permitido que me quedara junto a él, siempre y cuando, lo mantuviera con vida. Me traían un poco de comida de vez en cuando, pero mi cuerpo se sentía pesado y débil debido a la falta de descanso. Sólo me bastaba la energía para mantener a Sasuke con vida, pero lograría que despertara así consumiera todo mi Chakra en el proceso. Después de todo, algo en mí me gritaba que no me preocupara, que aún había esperanza y la cura llegaría en cualquier momento. Naruto, te estaba esperando.

Contemplé cómo las primeras luces de la mañana ingresaban por una pequeña hendidura del techo de piedra y acariciaban el rostro de Sasuke.

- Vuelve pronto. - susurré.

Suaves y rápidos golpes en la puerta me despertaron de mi ensoñación. Era extraño que alguien tocara la puerta. Usualmente, esas personas entraban sin anunciarse para preguntar si Sasuke despertaría pronto. Les había respondido que tardaría unos cuántos días en hacerlo, pues su estado era débil. Pero, tras cada hora, se volvían más impacientes. Aquellos Zetsus Blancos habían descubierto que sabía quiénes eran en nuestra primera conversación. Y, la única razón por la cual no me habían asesinado era por Sasuke, incluso sin estar consciente me seguía protegiendo.

- Adelante. - exclamé. - Y un par de pequeñas personas encapuchadas entraron en la habitación. Sólo podía ver sus ojos y cargaban el símbolo del Clan Desertor en sus brazos. Era extraño, incluso sin haber pronunciado una sola palabra, me daba la impresión de que estaban nerviosas.

- Nos dieron órdenes de que te llevemos al río para que puedas lavarte. - Dijo uno de los individuos con una aguda y dulce voz... ¿Era una chica? Era evidente que era una mentira la razón por la cual estaban aquí. Pero me intrigaba saber qué clase de personas eran, claramente, no eran parte de todo esto.

- ¿Río? - pregunté con suspicacia. - ¿No sería más sencillo que me permitieran ir al mar?

- ¡No! - gritaron al unísono y se miraron con nerviosismo. Tuve que contener un poco de risa.

- Es debido a tus labores de médico. - explicó la segunda persona con una voz un poco más ronca pero igual de dulce. Definitivamente, eran dos jóvenes las que había detrás de esas máscaras.

- ¡Sí! - intervino de nuevo la otra. - Porque necesitas agua dulce para... ¡Beber!

- ¡Curar! - gritó la otra al unísono. Y volvieron a mirarse con inquietud al notar que, seguramente, su plan no parecía estar resultando como lo esperaban.

- Iré con ustedes. - sentencié mientras apretaba la mano de Sasuke por un momento y me levantaba. Si continuaban estas chicas aquí, era muy fácil que cualquiera las descubriera. Y debía haber una buena razón por la cual estaban haciendo todo esto. - Pero... será mejor que yo hablé.

Atravesé la puerta y las dos ninjas me siguieron. Como lo esperaba, los guardias no parecían muy entusiasmados con la idea de que saliera del cuartel tan temprano en la mañana.

- Necesito una hierba medicinal del bosque. - expliqué con firmeza. - La mejor hora para cosecharla es ahora. Tenemos que hacer lo necesario para que despierte ¿No es así?

Sin responder, los dos hombres se movieron y bajé con mis acompañantes a lo largo de las escaleras de caracol. Sospechaba que mi explicación no había bastado para convencerles de que no intentaba escapar, pero tenía tiempo suficiente antes de que hicieran algún movimiento.

- Bueno... ¿Y ahora a dónde vamos? - Les pregunte a mis nuevas escoltas cuando llegamos al borde de la escalinata. Una de ellas se adelantó, tomó mi mano y me condujo a lo largo de cavernas y cuevas como si conociera este lugar como la palma de su mano.