Sr. Mancini

Confesiónes

Me levante ahogándome de calor, mi piel se sentía resbalosa y me costaba respirar, por un instante pensé que se trataba del cuerpo de Alex, pero al despertar bien, vi que nadie estaba a mi lado.

Me levanto Lagañosa, con el pelo alborotado y con la urgencia de correr al baño...

Dejo el agua llenando la bañera y mientras cumplo con mis necesidades y procedo a desnudarme para asearme, sin pensarlo mi mirada divisa marcas redondas y guindas en mis pechos, otras deformes en mis caderas.

Recuedo casi todo de lo que paso la noche anterior, pero no se como llegue a hacerme esto, me meto en el agua y cierro los ojos.

Me comporte como una idiota, con Lana... Con Alex.

No pretendo justificarme, fue absurdo lo que hice y si siento remordimiento por eso, pero bueno, soy joven... Voy a equivocarme muchas veces, estoy arta de forzar mi camino hacia donde los demás creen que debe ir, pase mi infancia y adolecencia forzandome a seguir el camino correcto, esta bien, no termine embarazada a los dieciséis, no deje la escuela, no escape de casa... Lo hice bien, pero eso no quiere decir que haya sido feliz, voy a dejar que por una vez la vida me guie, tengo que disculparme, pero al final pasara lo que tenga que pasar.

Salgo de la ducha, después de secarme y arreglarme salgo a la sala y me encuentro a Daniela sentada en la sala con su café a la mano y hablando por teléfono, sonríe y me saluda con la mano, la imito y me voy directo a la cocina.

Me sirvo una taza de café y lo bebo rápido.

- vale, te amo... Cuidate.- dice al telefono, segundos después me acompaña en la cocina.

- ¿como estas cariño? - dice besando mi mejilla.

- Bien, ¿que tal tu turno? - preguntó acabando el café.

- bien, aburrido.- sonríe apenas.

- ¿estas bien? - preguntó por como me mira insegura, saca un papel doblado en dos del bolsillo de su uniforme, no voy a preguntar que es, por que lo supongo...

- lo dejó esta mañana y se fue.- dice tan apenada que tal vez la leyó.

- ¿la viste? - preguntó.

- No, pero también dijo, que no lo busques.- dice bajando la mirada.- no se que paso entre ustedes Becky, pero lo siento mucho...- me abraza y besa mi cabeza.- pasare por mi casa recogere algo de ropa, almorzare con Jhon, pero pasare mas tarde.- besa mi mejilla y se va.

Me siento en la silla mas cercana, siento el frío rosando mi cara entumecida.

Abro el papel...

Princesa Rebekah

He estado pensando en muchas cosas, voy a contarte algo muy personal por que contigo ya no quiero tener mas secretos.

Cuando cumpli veinte años me case con la chica con la que salia desde los quince.

Estábamos muy enamorados y en ese momento solo deseaba darle todo de mi... Después de la boda, ella dejo sus estudios y pero yo no, poco tiempo después empezó a celarme hasta con la vecina cristiana, peleaba por todo y nunca apoyaba como debía, lo soporte por dos años.

Nunca planee algo así pero una noche cansado de sus reclamos y discusiones absurdas le dije que estaba arto y ella se fue llorando a hacer un show con sus padres, no dijeron nada por que era una gran reunión familiar, estaba simplemente bebiendo y charlando con su hermana Katherin, no se en que momento paso, pero despertamos juntos y desnudos, era obvio lo que había pasado, no tardaron en descubrirlo, Clawdden estaba un poco loca, así que hizo como si nada hubiera pasado, poco tiempo después apareció katherin embarazada de mi y también diagnosticaron a mi esposa de cáncer, a pesar de detestarnos, fue un golpe muy fuerte y ella aun sabiendo que le quedaba poco tiempo, ignoro también el embarazo, no dijo nada, es mas... Trajo a su hermana a vivir a nuestra casa, su hermana solía ser manipuladora cuando quería, así que mi madre no la quería mucho, el bebe nació y todos lo amábamos, una semana después Clawdden fallecio, pero parecía que nada había pasado, si que paso.

Por mucho tiempo me senti culpable por ella, debí comprenderla mas.. Pero solo me aleje y la lastime mas, sin embargo uno no puede vivir culpándose, las cosas pasan por algo Beck, hay que aprender a superar nuestros errores, salir de nuestros huecos y seguir adelante, lo que paso no fue tu culpa, Superalo linda... Tienes mucho por vivir, que una cosa así no te limite el placer de la compañía de los niños...

Por otra parte, como entenderas e cometido muchas equivocaciones y asumido las consecuencias... Pero no quiero hacerlo mas, tienes una vida por delante y no voy a ser yo quien te corte la vida.

Sal con chicos de tu edad, ten amigas y amigos, ve de fiesta... Convive y disfruta de tu juventud... Perdoname si hice las cosas mal.

Te deseo todo lo mejor y gracias por estas semanas increíbles.