capitulo 8

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Capítulo 8: El bebé no es feliz


Por una puerta entró un hombre con un traje negro. Tenía un cutis oriental que rivalizaba con el de las estrellas de cine, y su largo cabello negro estaba casi hasta los muslos, sin embargo, cada mechón parecía haber sido peinado con ternura, suave hasta las puntas. Hacía que la gente quisiera ... preguntarle qué marca de champú usaba.

Aunque tenía el aspecto oriental, su atuendo se parecía al de la nobleza occidental. En su mano, sostenía un bastón de plata. Pero a pesar de que se veía refinado y cortés, las palabras que salieron de su boca fueron todo menos corteses.

"¿Desde cuándo una pequeña estación espacial tenía derecho a ejercer los poderes de la corte de leyes galácticas? ¿Dices ser inocente y eres absuelto? Sus ojos se entrecerraron mientras miraba directamente a Lu Ren, que estaba a un lado.

"Yan ... Yan Xuan, min ... ministro". Los ojos de Lu Ren estaban muy abiertos por la sorpresa, como si no pudiera soportar esta revelación. Toda su persona estaba congelada en el acto.

Yan Xuan dio dos pasos hacia adelante y su sonrisa se ensanchó. "Oh, entonces me reconoces".


"..."

¡Obviamente! No había nadie en toda la galaxia que no supiera sobre este demonio, el ministro de asuntos exteriores del planeta rojo sangriento, a cargo de todo lo relacionado con otras especies. Además del hombre cuya existencia era legendaria, la persona más famosa de los bloodlings era esta persona.

Lo que lo asustaba de él no era su noble estatus entre los sangrientos, sino esa boca que podía sacar a los muertos de sus tumbas. Para ponerlo en palabras simples, se especializó en hacer un agujero en todo y no se rendiría hasta que le hubiera quitado una capa de piel a su oponente. Era seguro decir que se podía ver su figura en cada pelea en la que estaban involucrados los sangrientos, y estas peleas generalmente se convertían en guerras raciales.

Si los bloodlings ordinarios tuvieran un problema, entonces este ministro tendría un problema. Los ministerios de asuntos exteriores de otras personas se crearon para resolver disputas, pero el suyo, sin embargo, fue hacer que esas disputas fueran desproporcionadas.

"Ministro Yan ... ¿Por qué ... usted ... vino en persona?" ¡Por qué los sangrientos enviarían a este demonio a recoger a la persona! El corazón de Lu Ren se convirtió en una tierra de barrennes, y podía escuchar indistintamente el sonido del "juego terminado".

"Escuché que exigías una explicación del ministro de Asuntos Exteriores". Yan Xuan sonrió con mucha gentileza y dijo: "Mira, así que aquí estoy para darle al Comandante Lu nuestra explicación".

"Ja, jaja, jajaja ..." La tristeza de Lu Ren se había convertido en un río que fluye dentro de él, ahogándolo lentamente. Tenía una fuerte necesidad de viajar en el tiempo y abofetearse varias veces en la cara. ¿Por qué pidió problemas y maldecir a sí mismo? "Malentendido ... Es un malentendido ..."

¿Explicación? Parecía que esta vez tendría que entregar su vida aquí.

"Las cosas serán mucho más fáciles ahora, ya que el comandante me conoce". Yan Xuan ignoró automáticamente la última mitad de la oración de Lu Ren. Dejó su bastón y agregó: "Pero antes de dar una explicación a su puesto, me gustaría hacerle una pregunta al gran comandante Lu. Calumniando a mi especie como intrusos; examinar nuestros genes sin permiso; y encarcelar a un miembro de nuestro tipo durante varios días, ¿qué tipo de explicación piensas ofrecerme por estas cosas?

"Mi ... Ministro Yan".


"Oh, espera, hay uno más ..." Sus ojos de repente se volvieron severos, y dijo: "Intentando engañar a un recién nacido de mi clase para que acepte un tratado desigual sin la presencia de su tutor".

My Father is The Galaxy's Prince Charmig (FINALIZADO)Where stories live. Discover now