Vampiro y hombre lobo, ¿imposible?

Capítulo 5

(...) Sonreí más ampliamente y procedí a explicarles el plan.

- Bien, este es el plan...- Empecé.

Unos minutos depués...

- Corre, corre, corre, que nos pillan!!- Grité a pleno pulmón a Jake desde el interior del cubo de basura que él empujaba.

A ver, os explico...

(Flashback)

- Bien, este es el plan, quienes son los más ligeros?- Pregunté.

- Sammy, Lily, Tú y Luck.- Respondió Jasper, que era el que estaba más entusiasmado con la idea de hacer una trastada.

- Bien, y los mas fuertes?- Volví a preguntar.

- David y Jasper, definitivamente.

- Bien, los Plumas (los más ligeros) vamos a ir al cuarto de la limpieza a coger contenedores grandes y un montón de productos de limpieza,.mientras, los demás vais a esperarnos en el pasillo de las aulas de geografía,  historia e idiomas. Los Plumas vamos hasta allí y nos empujais por los pasillos para llenarlos de legía y cosas de esas. Jasper empuja a Sam, Jack a Lily, David a Luck y Jake a mi. Cuando acabemos nos vamos corriendo y quedamos en Ya's Pizza.
- Ok.- Respondieron todos a la vez.
(Fin del Flashback)

Y aquí estamos, con tres profesores llenos de jabón y legía que se resbalan cada dos por tres persiguiendonos a Jake y a mi mientras este último me empuja por los pasillos en un contenedor vacío. Es muuuuy normal (nótese el sarcasmo).
- Corre Jake! Ya casi llegamos a la puerta!
- Ya voy, ya voy!- Me respondió él, gritando tambien.
Como faltaban menos de 20 metros para llegar a la puerta le hice una seña a Jake y éste asintió, empujó el contenedor con fuerza y yo di un salto para salir del recipiente de plástico. Di una voltereta en el aire y caí al suelo de cuclillas, pero como tengo tan buena suerte (sarcasmo mode on), me resbalé y caí de culo, pero eso no fue lo peor, noooo, lo peor fue que como yo iba por delante de mi amigo, él se tropezó conmigo y se cayó al suelo y terminamos los dos empapados de productos de limpieza.
Giré el cuello para ver si los profes estaban cerca. En efecto, ya estaban en el principio de este pasillo y cada vez más cerca. Aún resbalándose y cayendo cada dos segundos eran rápidos los putos. Putos. Me levanté lo más rápido que pude y corrí hacia Jake, que trataba desesperadamente de levantarse. Sin éxito. Tiré de él con todas mis fuerzas y lo cogí como a una princesa. Salí corriendo por la puerta del edificio, y temiendo que nos cogiesen, miré a los lados, y como no había nadie, me transformé de un salto, colocando así a mi amigo sobre mi lomo. Corrí por las calles desiertas con la intención de llegar al bosquecillo que había a dos manzanas del centro. Llegué rápido. En mi lomo, Jake se agarraba fuerte a mi pelo y apretaba las piernas para no perder el equilibrio. No era la primera vez que lo llevaba así. A él era al único que le permitía subirse encima cuando estaba en forma de lobo.
- Jake, cuando me transformo rompo mi ropa, te importaría dejarme tu sudadera?- le pregunté un poco avergonzada.
- Por- por supuesto...- Cogió aire para respirar.- Claro, es lo menos que puedo hacer por mi heroína.- Me dijo y acto seguido me guiñó un ojo y me pasó la prenda. Estaba con un poco de jabón, pero por lo menos no iría desnuda por la calle.
Cogí la sudadera negra con los dientes intentando no babarla y me metí destrás de unos arbustos. Casi no me tapaban en forma lobuna, pero cuando me volví a transformar me llegaban por encima de la cabeza. Me puse la prenda y salí de mi escondite.
- Te queda enorme!- Exclamó el inteligente de Jake cuando me vió.
- Obvio, eres mucho más grande que yo, genio! Además, se trataba de que tapase lo máximo posible, y está cumpliendo con su misión gratificantemente, no?
- Quién dice hoy en día gratificantemente? Oh, cierto, me olvidaba, la señorita 10 en lengua....
- Cómo lo sabes?- Pregunté sorprendida.- Que yo sepa ninguno estais en mi clase de esa asignatura....- Confesé cautamente.
- Un gran mago no desvela sus secretos...- Dijo él misteriosamente.
- Ya, pero tú no eres mago, así que desembucha!
- Nop.
- Bien, pero como se lo digas a alguien te quedas sin descendencia, capicci?
Él asintió frenéticamente, agitando así su ya enmarañado cabello rubio. Al mismo tiempo se tapó sus partes.
- Qué os pasa a todos que cuando os amenazo con eso os tapais las partes con las manos? Creeis que vuestras manos me van a impedir daros un buen golpe?
- N-no, pero... No lo se...- Dijo rascándose la nuca, pensativo.- Ya puestos a desvelar secretos del género opuesto.... Por qué las tías siempre vais más de una a la vez al baño?- Me preguntó, realmente interesado.
Sonreí y le di la misma respuesta absurda e infantil que él mismo me había dado hacía unos momentos.- Recuerda, un gran mago no desvela sus secretos....
- Pero eso no tiene sentido!- Protestó haciendo pucheros. Se veía realmente tierno haciendo ese gesto.
- Lo se, pero no tenía otra respuesta.- Me encogí de hpmbros y dando por finalizada la conversación nos dirigimos a nuestra cafetería favorita andando tranquilamente. O casi. En el camino (menos mal que no había gente) íbamos empujándonos y pellizcándonos y riéndonos de nuestras propias tonterías cuando sentí un olor a rosas, chocolate y bosque mojado. Si, el bosque puede estar mojado.
Me paré en seco y miré a mi alrededor, buscando el foco de aquel olor. Sabía lo que ese olor significaba: mi mate. Pero en la calle no había nadie más a parte de nosotros.
- Qué ocurre Kei?- me preguntó Jake, consciente de que estaba olisqueando el aire.
- Pues... Es que he olido a mi mate, pero no veo a nadie por aqui...- Susurré esta última parte.
- A tu mate?- Preguntó abriendo mucho los ojos.- La dura Keira ha encontrado a su pareja eterna? Pobre del que tenga que aguantarte...- mumuró esta última parte, pensando que yo no lo oiría.
Le di un golpe con el puño en el brazo.
- Hey! POr qué hiciste eso??!?!
- Te olvidaste que tengo mejor oído que tú!- lo acusé indirectamente.
- Oh, vaya... Pero admítelo, es la verdad!
- Nunca! Yo soy más adorable que un unicornio con ojos kawai y con el pelo del color de arco iris!- Grité.
Jake se empezó a reír como un loco y yo, consciente en esos momentos de lo que había dicho sin pensar, me puse a reír con él. Y allí estábamos, dos adolescentes delante de la puerta de nuestra cafetería favorita, riéndonos a más no poder como un par de focas retrasadas. En efecto, un espectáculo digno de grabar.
Cuando nos calmamos un poco abrimos la puerta y nos internamos en el edificio. Realmente aquella caferería era especial. Las paredes eran totalmente negras, con bustos partidos a la mitad de diferentes piezas de ajedrez colgadas cada x centímetros. El suelo era estilo tablero de ajedrez, y las mesas y sillas de madera pintada de color blanco. Raro pero acogedor y especial.
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Hola!!! Antes de nada: LO SIENTOOOO!! Se qye dije que iba a subir ayer, pero como empecé en la selva, no tuve tienpo porque los simios que se hacen llamar profesorrs me mataron a deberes.
Lo siento de verdad!
Bueno y ahora despues de comer intentare dedicar capitulos desde el ordenador.
Muchos Besos y Gracias Por Leer Mi Alocada Historia.
Cambio y corto, minnie.
( me hacia ilu decirlo!! No me juzguen!! ;P xd)

En multimedia el lobo de David. Es así solo que más grande y con una mancha negra en el ojo izquierdo