Vampiro y hombre lobo, ¿imposible?

Capítulo 28

(...)
- Y yo.- Dijo alegre Christian

POV. Keira

En cuanto la familia McFin se fue volvimos cogidos de la mano al "campamento". En él se encontraban los niños de quince para abajo durmiendo, y alguno de dieciseis también, por ejemplo: Mark y Abby, que fueron de los que más trabajaron. Entramos en la estancia todavía de la mano. Los chicos que no dormían estaban en el suelo distribuídos en  diversas posturas y lugares. Nos había dado tiempo a construir algun soporte amplio para poner colchones que había en el almacén del gimnasio y un par de mesas con sillas de diferentes materiales y tamaños.

- Alpha Keira, que haremos ahora?- me preguntó Jasper algo preocupado. Él tenía los ojos irritados y rojos y se le notaban sombras oscuras debajo, lo que le hacía parecer mayor. LE sonreí con cansancio. Atraje la atención en silencio de todos aquellos que estaban despiertos. Ellos se levantaron y acudieron deprisa a mi lado. Formaron un corro para escucharme bien todos.

- Lo primero, quiero que me llameis Keira, como siempre, no alpha Keira, me hace parecer mayor.- Dije con voz de ofendida, imitando a alguna chica zorr... Digo humana que yo me se. Aquello sacó una sonrisa a muchos y a unos pocos carcajadas. Sonreí feliz. Había logrado mi propósito de animarlos.- Siguiente, en cuanto despierten todos voy a crear un link y un vínculo que nos una como manada de nuevo.- Todos asintieron.- Tercero, vamos a volver todos a la escuela, pero quien quiera tomarse unos dias de descanso tiene mi permiso.- Asintieron de nuevo. Sus rostros se ensombrecieron de nuevo. Mierda Keira, animalos de nuevo!- Y por último, pero no menos importante... Quién viene a cazar conmigo??- Dije con voz de teletienda. Volvieron a reir y sonreir.

- Yop!- David gritó.

- Ssssshhhh!!!- lo callamos todos a la vez. Él rodó los ojos.- Yooooo!!- susurró. Reimos silenciosamente.

- Yo también.- Dijo Jasper.

- Y yo.- Dijo Josua, un chico de veintitres. Asentí, conforme.

- Alguien más?- pregunté.

Negaron con la cabeza.

- Bien muchachos, descansen, mañana será un día largo, puedo asegurarlo. Chris, vigilas?- Christian asintió.- Bien, en marcha mis queridos sabuesos.- Les dije a los chicos acompañado de un guiño. Salí corriendo al ver sus caras ofendidas.
+ Por qué siempre acabas siendo perseguida por chicos que están más que buenos?- Me preguntó Saphira.
- No lo se, soy como un imán, supongo...
- Arrogante...- Masculló entre dientes.
- Celosa...
-...
- Ya decía yo...

Giré mi cabeza para ver si David, Jasper y Joshua me seguían y en efecto. Como me empezaban a alcanzar de un salto me transformé y volví a mirar hacia atrás. David ya era blanco, grande y peludo con una mancha negra en el ojo y Jasper canela con manchas marrones oscuro. Sonreí. Entonces vi pasmada como Joshua era un gran lobo totalmente gris. Mi mala suerte me acompañaba, por lo que cuando al poner mi cabeza derecha me golpeé en ella con un gran tronco.

- Puto árbol... Quien coño te puso ahí? Eh?- le hablé al árbol. Lo sé, es estupido, pero me había dado un buen golpe en el coco (cabeza).

- Me plantaron hace cien años, por si lo preguntas.

Abrí mi boca a más no poder. Justo en el momento en el que el árbol habló llegaron los chicos. Estos miraban al árbol como si fuera un alien.

- Por favor, decirme que lo habeis oído y no es producto del golpe en mi cabeza...- murmuré. David y Jasper rompieron a reir. Los fulminé con la mirada. Callaron.

- Si... Nosotros tambié lo hemos oído.- Contestó el maravilloso Joshua. Menos mal que por lo menos me acompañaba alguien que no era imbécil...