Han YeJun // MinSung

3

YeJun abrió sus lindos ojitos y los restregó para alejar el sueño.

—¡Hoy es sádabo!—exclamó feliz bajando rápidamente de su cama y corriendo hacia la habitación de su papá.

—¡Papá!—llamó saltando en la cama pero se sorprendió cuando vio que no había nadie—¡Papá!—esta vez fue al baño pero tampoco se encontraba su padre ahí.

Hizo un puchero.

Los sábados eran para estar todo el día con papá Sung pero él no estaba ahí.

Al creer que estaba solo, sus ojitos se llenaron de lágrimas y comenzó a sollozar mientras llamaba a su papá.

—¡Junnie!—gritó Sung cuando sacó los audífonos de sus oídos y escuchó los sollozos de su bebé. Estaba en la cocina preparando el desayuno y quería escuchar música pero si ponía los parlantes, había una alta probabilidad de que despertara a su hijo, así que decidió ponerse los audífonos.

Corrió hacia su habitación y vio que su pequeño lloraba en su cama.

—¿Qué te pasó, corazón?—pregunta acurrucando a Junnie en sus brazos.

—Credí que te habías ido—respondió entre sollozos.

—Nunca me iré sin ti, nunca te dejaré solo. Siempre recuerda eso, bebé.

YeJun asintió mientras las lágrimas caían por su rostro, su padre puso sus manos en sus mejillas suaves y regordetas y comenzó a secar las gotas saladas que decoraban el rostro de su bebé. Si había algo que odiaba con su vida era ver a su pequeño llorar.

—¿Quieres desayunar? Tenemos galletas de tía Eun—propone.

El semblante de Junnie instantáneamente se alegró.

—¡Galletas!

—¡Butter, butter, butter!—cantó YeJun desde el asiento trasero.

JiSung rió.

—¿Qué estás cantando?

—No shé, Innie hyung cantaba ayer yo solo repito—respondió moviendo su cabeza al ritmo de la música que sonaba en la radio—. ¡Esha!