"Lo único que Han YeJun quería era ver a su papá Sung feliz"
"Han JiSung solo quería ocuparse exclusivamente de su hijo, el amor podía esperar"
"Lee MinHo quería estar con JiSung y YeJun"
Así funcionaba esto; MinHo se acercaba a JiSung, el menor dud...
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Tres años antes
—¿Bebé?
JiSung sonrió al escuchar la pregunta que Chan (quién iba a cumplir dos años en unos pocos meses) le hizo.
—¿Bebé?—repitió la pregunta el menor, tocando despacio y con su dedito índice su prominente vientre de nueve meses.
El tiempo pasaba muy rápido y en cualquier momento podría tener a YeJun en sus brazos. Hace dos meses que se había graduado, fue un gran esfuerzo continuar yendo a clases embarazado pero parece que sus maestros estaban acostumbrados a los embarazos en la universidad porque incluso tenían un protocolo de distintos métodos de evaluación para las últimas semanas. Hablando de su embarazo, su pequeño crecía sano y fuerte en su vientre, además de que era un hambriento de primera porque ahora debía comprar mucha más comida que al principio pero eso no le importaba mucho la verdad.
Con el pasar del tiempo, la emoción logró igualar e incluso sobrepasar al miedo, sabe que se le vienen cosas difíciles y que la paternidad no será para nada fácil pero cada vez está más contento y anhela mucho tener a YeJun en sus brazos, todavía no ha podido tener a su bebé en brazos, ni siquiera lo conocía pero aún así, ya lo amaba.
En esos momentos estaban en una reunión en casa de Han, ahora pasaban más tiempo juntos para darle consejos al embarazado y también para ponerse al día por todo ese tiempo que estuvieron separados. JiSung agradecía la compañía de sus amigos porque así no se sentía solo, sabía que tenía gente que lo ayudaría y animaría en caso de necesitarlo. Los chicos también estaban encantados de estar ahí, sabían a la perfección que su paternidad sería más difícil porque sería padre soltero, así que tendría trabajo doble pero estaban seguros de que JiSung podría, además de que contaba con su apoyo para lo que sea.
La felicidad de Han aumentó al recordar que sus padres viajarían en dos días desde Malasia hasta Corea para acompañarlo en sus últimos días de embarazo. Se sentía bien y parece que su pequeño estaba igual de feliz porque no paraba de moverse en el estrecho espacio de su vientre.
—Channie, deja al bebé tranquilo—lo regañó Felix con una adorable sonrisa en su rostro al ver a su hijo pinchando con su dedo el vientre de JiSung.
—¿Bebé miendo?—preguntó.
—Sí, el bebé está durmiendo así que no lo molestes. Mejor ve a buscar a papá ChangBin, ¿bueno?
Asintió emocionado y recorrió el salón con su mirada en busca de Seo. Como no lo encontró con sus ojos, decidió salir en su búsqueda.
—¡Hey!—exclamó Chan, sobando su cabeza mientras miraba mal a JeongIn, quien sonreía malvado por haberle tirado la pelota a su mayor y haberlo golpeado en su cabeza—. ¡Malo!
