Trauma [Omegaverse] Larry Stylinson

Capítulo V

El sonido del teléfono los regresó a la realidad desde ese mundo ficticio en el que se inundaron al momento de apreciar sus labios mutuamente.

Un tono carmesí apareció en el rostro de los dos, burlándose del uno al otro.

El sonido se repitió y ambos alejaron las miradas.

Un fuerte latido permanecía en el corazón de el alfa y en el de el omega.

Y ambos no entendían a qué se debía.

El alfa se alejó, dándole la espalda al menor para caminar hacia el teléfono irritante que resonaba en la habitación. El omega no perdió la oportunidad de apreciar la tonificada espalda del alfa que se alejaba de él, deleitándose levemente con los músculos que se marcaban a través de la ligera camiseta que usaba el rizado en esos momentos.

¿Cómo se puede estar tan bueno? 

Con esos músculos se le haría muy fácil abusar de mi, cómo todos los alfas quieren.

Harry contestó y era Susanna.

- ¿Harry? perdón si te interrumpo pero te llamo para avisarte que tu próxima cita es en una hora - dijo la beta en un tono amable.

- Está bien Susy, lo tenía en mente - dijo mintiendo, porque la noción del tiempo se perdió en cuanto un lindo omega atravesó el umbral de su puerta.

- Bueno, es que te estás pasando un poco y quizás no te de tiempo para tu café, pero bueno, tú sabes tus tiemp...

Preocupación.

Incomodidad.

Miedo.

Puede oler al omega sintiendo fuertes emociones y su alfa se inquietó de inmediato y no pudo seguir oyendo la conversación que tenía por teléfono con la secretaria.

Colgó abruptamente y se giró sobre sus talones para observar a un Louis llorando, cubriendo su hermoso rostro con ambas y temblorosas manos.

Estaba notoriamente encogido sobre si mismo y lloraba sobre el lindo sofá de la sala.

El corazón del rizado se hundió por la tristeza de ese pequeño omega que volvía loco indiscriminadamente su corazón.

Proteger.

Los aromas invadieron la sala y podía sentir a flor de piel la debilidad que sentía Louis sobre si mismo. Se acercó seguro y decidido.

- ¿Louis que te pasa? - preguntó con un tono de voz dulce para no alterarlo.

Se sentó a su lado y el omega dio un salto y un respingo.

- ¡No te acerques! no quiero que me hagas daño, ¡por favor! - sollozaba dolorosamente.

Harry se preocupó más hasta no poder.

- N...no quiero hacerte daño Louis, pensé que lo tenías claro.

- T...odos l...los alfas q....quieren hacerme daño, soy un... un jugue...te para ellos - dijo con mucho dolor y angustia en su voz, la cual apenas se oía.

El corazón de Harry dolía.

Yo no quiero dañarte, quiero devolverte tu brillo.

- No Louis, créeme por favor, jamás te haría daño - Se acercó un poco para acariciar su espalda.

Lo hizo y Louis dio un respingo, pero no se detuvo. Mantuvo su mano allí sabiendo que el omega odiaba el contacto físico, pero sabía que era necesario, Louis necesitaba apoyo emocional y necesita alguien en quién sostenerse.