Capitulo 3

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Septiembre, 2012
9:24 AM


     Conducía a toda prisa para llegar al hospital, la noticia había sido tan inesperada que olvide nuestros pedidos en la cafetería. –Calma cariño, llegaremos enseguida. –Christy, me llamo apenas le di un sorbo al café, nuestra pequeña ya venía; salí casi volando de la cafetería para ir a casa a buscarla. Coloque mi mano en su barriga; era enorme, como si hubiera tragado una ballena completa. –Estamos cerca ya. –Pase un semáforo en rojo, algunos autos frenaron de golpe y maniobre para no chocar con otro.
     –¡¿Estás Loco?! ¡Hijo de perra! –Escuche el grito de enojo del conductor. No podía detenerme a pedir perdón y dar explicaciones, Christy se quejaba del dolor y apretaba mi muñeca. Conduje lo más deprisa que pude hasta la puerta de emergencias del hospital, al llegar los médicos tomaron una camilla y la llevaron adentro para prepararla para el parto, yo tomaba su mano mientras la trasladaban en la camilla, ella me miraba directamente a los ojos, podía notar el dolor reflejado en su rostro. Yo no podía entrar con ella a la sala de parto, no me lo permitieron.      Justo antes de entrar en la sala, nuestras manos debieron soltarse, sentí como solté todo mi universo entero en ese instante.
     –You're my wonderwall. –Le dije en un tono suficientemente alto para que me escuchara, luego acompañado de una sonrisa. Su rostro mostro alivio al verme aliviado a mí. Por mi mente pasaron cada uno de esos instantes en los que tomé su mano y en los que debí soltarla, como aquella vez antes del concierto. Estaba a punto de subir al escenario y ella tomaba mi mano, escuchaba los gritos de las personas emocionadas por vernos tocar y debía subir; justo antes de subir al escenario, Christy me apretó la mano halándome hacia ella, me deje llevar. –You're my wonderwall. –Me miro a los ojos mientras lo decía, luego me besó. You're my wonderwall, era como nuestro Te Amo. Puede traducirse como "eres mi maravilla", y una maravilla es como algo que ves y es tan sorprendente que no puedas creer que exista; así era Christy en mi vida, era perfecta y hermosa en todo sentido, después de todo este tiempo a su lado aun así la veo y no puedo creer que exista. En mi mente solté su mano un millón de veces y la tomé un millón de veces más; la observe un millón de veces y un millón de veces más observe toda esa belleza que la conformaba.

Finding My SelfWhere stories live. Discover now