Erasermic

El otro cumpleaños

Hizashi Yamada se encontraba tirandose de los pelos en la sala de profesores, adoraba a Aizawa 24 horas 7 días a la semana durante los 12 meses del año excepto... Cuando tenía que comprarle su regalo y es que para el rubio las semanas previas a la entrega del regalo se convertían en un infierno sin precedentes, podían conocerse desde hacía muchos años pero para el de ojos verdes el comprar un regalo al moreno era un auténtico sufrimiento.

- ¿Estás bien? - dijo Midnight mientras entraba en la sala - Todos los años tienes el mismo problema y no dejará nunca de sorprenderme, sabes que a Aizawa le va a gustar lo que sea que le compres.

- ¡Ese es el problema! - grito el rubio - se que le va a gustar porque se lo regaló yo pero quiero que le guste ¡Porque le guste! Osea que le guste se lo regale yo o se lo regales tu o se lo regale Toshinori - hablaba exaltado dando vueltas como un tigre enjaulado

- No entiendo porque es un problema - dijo la morena sentándose en su sitio - sabes que no le gustan las cosas materiales ¡Se compró una cama cuando empezasteis a salir! Y el resto de los muebles también - dijo entre risas recordando como fue el antes y después del apartamento del moreno.

- No solo fue por mi - dijo restándole importancia - bueno si fue por mi pero ¡Algo tendrá que querer!

- A ti

- ¡Nemuri! No ayudas - dijo mientras fingía lloriquear

- En cada cumpleaños, en casa aniversario, navidades, San Valentín... Tenemos esta discusión - suspiro pesadamente la heroína.

- Lo se...

El rubio se dejó caer sobre la mesa y la repentina llegada de Aizawa y Toshinori, cuya clase había terminado por lo que la conversación quedó suspendida en el aire y en la cabeza de Hizashi Yamada un lío asombroso.

El resto de la mañana para el rubio se resumió en lo mismo de siempre, terminar su trabajo como docente ir corriendo a su ronda como héroe y al volver a casa preparar el problema de esa semana mientras esperaba a que su adorable pareja regresará a casa de su trabajo como héroe clandestino.

Apenas quedaban dos días para el cumpleaños de su pareja, fue entonces cuando trabajando en la preparación de su programa cuando fijo su vista en uno de la foto enmarcada que decoraba ma estancia y donde aparecía ellos dos, el rubio con su habitual sonrisa resplandeciente y el moreno con un ligero sonrojo por el abrazo al que le estaba sometieron su recién nombrado novio, porque se trataba un selfie de ambos, el día que el moreno accedió a salir con. Una sonrisa apareció en sus labios, y en su cabeza una idea comenzó a tomar forma, puede que después de todo, ese año Nemuri si le hubiera ayudado.

Habían pasado dos días y el rubio se levantó alterado, no fue algo que pasase desapercibido para el moreno pero no le dio mucha importancia, después de todo su pareja siempre se ponía muy nervioso cuando le tenía que entregar un regalo. El día transcurrió con normalidad, durante las clases los chicos se quedaron más tranquilos que de costumbre lo cual fue agradecido por el moreno y por suerte esa noche no trabajaba asique podría descansar agusto lo único que lamentaba era que Hizashi tuviera que ir a su dichoso programa de radio, pero así era la vida de los adultos.

Al llegar a casa Aizawa cambio su ropa de héroe por una más cómoda para estar por casa, aunque realmente su traje no era precisamente lo que se dice incómodo. El hombre se dejó caer pesadamente en el sofá para luego encender la radio, poniéndose a escuchar de ese modo el programa de su pareja cerrando los ojos mientras comenzaba a escuchar la voz del rubio.

No sabía cuánto tiempo había transcurrido pero de pronto escucho un ruido, sobresaltado al seguir escuchando la radio y a su pareja. Se dirigió a coger su arma de captura cuando vio como una silueta muy reconocible se acercaba a el. Dejó escapar el aire que contenían sus pulmones corriendo a abrazar al hombre que se encontraba de pie quien le correspondió dándole un apasionado beso en los labios.

- ¿Que haces aquí? - dijo mientras se dirigía a apagar la radio

- No podía perderme el estar contigo hoy - dijo mientras le abrazaba - deje pre-grabado el programa, simplemente fui al trabajo para poner la grabación - dijo con un pícara sonrisa - por un día puedo permitirme escaquearme del trabajo.

- Eres de lo que no hay - río el moreno mientras tiraba de su pareja para sentarse en el sofá.

- Lo se - río mientras se sentaba junto a su novio, abrazándolo por la cintura - espera... Tengo algo para ti - dijo mientras se incorporaba sacando una cajita ante la extraña mirada de su novio - sabes que te quiero mucho, desde hace demasiado y que nunca se que comprarte porque siempre te encanta todo lo que te regalo solo porque te lo regalo yo y bueno, hablando con Nemuri me di cuenta de que yo soy tu cosa favorita en el mundo - dijo mientras se reía un poco de sus propias palabras - y bueno, pues este año tu regalo... - hablo mientras habría la cajita dejando ver el anillo en su interior - soy yo ¿Aizawa Shota, aceptas este humilde anillo y a este humilde hombre como esposo?

- Claro que sí - dijo para luego dar un beso en la mejilla al rubio que estaba prácticamente tirado sobre el moreno descansando cómodamente - pero... Podrías haberte arrodillado o algo ¿No?

- ¡Que! Pero si a ti esas cosas románticas no te gustan - se quejó el rubio.

- Pero a uno no le piden matrimonio todos los días... Además no creo que nadie a parte de ti quiera casarse conmigo - río el moreno

- Ya... Si es que tengo un mal gusto... - río a su vez mientras colocaba la sortija en su dedo y luego le volvía a besar siendo correspondido por el moreno.

- Entonces, señor del mal gusto... ¿Puedo desenvolver ya mi regalo? - dijo antes de volver a besarlo.

Y es que si había algo seguro es que Aizawa pensaba disfrutar de su regalo de cumpleaños.