𝑨𝒈𝒓𝒊𝒅𝒖𝒍𝒄𝒆 -𝑩𝒂𝒌𝒖𝒈𝒐 𝑲𝒂𝒕𝒔𝒖𝒌𝒊 𝒙 𝑹𝒆𝒂𝒅𝒆𝒓

40.

Después de que Bakugo me pidiera ser su novia, venia por mi todas las mañanas a despertarme; caminábamos juntos a la academia y aunque seguía llamándome fea o tonta sabía que lo decía con cariño, no deje de molestarlo cada que podía era parte de mi día ver lo gritar.

¡Despierta pato! - se escuchó el grito del rubio en mi puerta a lo que abrí la puerta- Es tarde, ¿Por qué sigues dormida?

Para mí es temprano- respondí tallándome los ojos y sentándome en la cama.

Eres una floja- se acerco a mi y me quito las manos de la cara para darme un beso en la frente.

Una floja a la que quieres- dije en un susurro tratando de abrazarlo, pero alejo mi cara de el.

En tus sueños- dijo saliendo de la habitación- Te espero abajo, apúrate fea.

Y así fue, claro este día fue un poco mas temprano de lo usual; un reportero vendría a investigar sobre la clase 1-A; por su puesto a unos no les molestaba como a Aoyama que parecía ser el mas arreglado o Mineta que junto a sus hormonas esperaba que fuera una mujer, pero todo lo contrario era un hombre.

¿Qué es lo que usualmente hacen? - pregunto el hombre frente a toda la clase.

Desayunamos- respondió Iida de una forma demasiado formal a lo que el hombre dijo que no era necesario.

En el almuerzo estábamos Kirishima, Todoroki, Bakugo y yo en una mesa; ¿Se pueden imaginar estar comiendo y que te tomen una foto? Demasiado raro a mi gusto, deje de comer y espere a que tomaran la foto, pero mi excéntrico novio, no. En el momento que se dio cuenta que el hombre empezaba a tomarle fotos paro de comer y le salto gritando, posiblemente solo salieran sus ojos histericos, claro que pediré la foto.

A decir verdad, el hombre parecía extraño no sabía sus intenciones, pero me inquietaba, cosa que el rubio noto.

¿Ese imbécil de la cámara te hizo algo? - pregunto Bakugo gritando lo suficiente para ser escuchado por el hombre.

No... solo es un poco raro, ¿sabes? - dije ladeando un poco la cabeza haciendo que el rubio rechistara.

Te preocupas por tonterías- dijo avanzando más rápido que yo- Apúrate pato.

Soy mas pequeña que tu tonto- dije llegando a su lado haciendo una mueca, lo bueno fue que el oji rubí tomo mi mano sin voltear a verme- Eres una masita por dentro.

¡Cállate! - me respondió a lo que solté una pequeña risa.

Llegamos al aula y el fotógrafo seguía tomando fotos y preguntando por nuestros koseis, nada fuera de lo normal por ahora. En las clases como era de costumbre usábamos el gimnasio para entrenar, era por parejas y como era de esperar elegí al rubio.

Levántate- ordeno el rubio después de haberme empujado con una explosión.

¡Prepárate tonto, te hare papilla! - grite levantándome cubriendo mis puños con la aura morada golpeándolo, pero no tanto para dañarlo, claro el logro esquivar poco más de la mitad.

¡Muy lenta! - el chico había aparecido detrás mía, me hizo caer para después el estar arriba de mí, claro que intente forcejear, pero la vista era buena.

No me quejo al estar así- dije dándole una sonrisa, a lo que en el chico había aparecido un leve sonrojo.

Maldita pervertida- hablo levantándose de mí y extenderme una mano para levantarme- Seguiremos hasta que tú me derribes.

Esto va a ser cansado, Kats- toque mi cuello para volver a ponerme al otro extremo de la plataforma.

Así fue esa hora, hasta logre derribarlo; use su misma táctica solo que me apoye de la bara arrinconándolo.

Te miras mejor de esta manera- dije tocando su pecho con la vara.

Nunca te confíes solo por eso, pato- el chico creo una explosión haciendo que soltara la vara y me alejara de él.

Eres increíble, Kacchan- eso fue en tono de burla haciendo que el chico ahora me persiguiera mientras yo corría por mi vida.

Al terminar las clases nos encontramos con una lluvia que no paraba, por lo que mi lógica me dijo "Corre" y así lo iba a hacer hasta que sentí una mano deteniéndome.

Te vas a enfermar- hablo Bakugo mirándome serio y quitándose el saco de la escuela para ponerlo sobre nosotros- Vamos.

Eres cursi- dije para seguir avanzando mientras caminábamos hasta la residencia. - Cada día me gustas más, Kats. - dije bajando un poco la mirada.

Te ves tierna. - hablo el chico haciendo una media sonrisa.

Al llagar ambos estábamos empapados, cosa que el resto no. Pero no me quejo, pude estar con él, ambos acordamos darnos un baño y hacer la tarea juntos.

¿Aun no acabas lo de historia? - pregunto el rubio regresando a su habitación con algo en la mano.

Me aburre...- dije para dejar caer mi cabeza en la almohada.

Tch, ten- me entrego un monito de papel que parecía ser yo. - Es un teru terubouzu, es para desear un buen clima.

¿Me hiciste uno? - pregunte haciendo que el chico mostrara uno que parecía ser el- Kats, sigues siendo así y en serio te comeré a besos- dije con voz chillona haciendo que el chico se acercara a mí.

¿Me comerás a besos? - él estaba demasiado cerca de mí, estaba a nada de mi rostro.

Déjame- dije escondiéndome entre la sudadera ya robada del chico.

Cúmplelo- protesto acercándose mas a mi, ya resignada le di un beso pequeño en los labios a lo que él lo siguió volviéndolo aun mas largo.

Kats...- susurre al parar haciendo que el chico se separara dándome un último beso en la mejilla y me extendiera la mano.

Vamos a ponerlos en el balcón- dijo a lo que me pare de la cama y lo hicimos.

Era una sensación totalmente diferente, el estar con él, el no estar gritándonos tanto; solo conociéndolo mejor y enamorándome aun más. 

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Perdon por hacerlo tan corto :c