Escritos

Azul intenso

Humedad es lo que empezó a verse en mi ventana y ya entraste hacia mi habitación con una mirada que me inspiraba una absoluta admiración hacia la belleza de tu ser y de la cual me quedo tan impactado ante ti. Parece que giras zumbando en mi paladar y se que hoy esta noche será algo tan especial para mi en el cielo con un azul tan intenso como tu ganas de hacer miles de tentaciones.

Mi lengua nómada recorre sin tregua la belleza de tus fresas que se encontraban tintadas de un labial tan exquisito y llenos de elocuentes colores donde mi boca que andaba buscando placer y lo encontré en tu boca , el roce es algo tan característico cuando me deleito contigo y nuestras lenguas no se quedan atrás con estas sensaciones de la cuales se comienzan a unirse poco a poco.

Vamos metiendole más intensidad al asunto y el sonido que sucede cuando nuestras bocas chocan una con otra y el fuego que se incrementa dentro de nuestras bocas y la saliva que produce tu cueva se llena junto con la mia se vuelve como un elixir que le da muchas ganas en mi vida y que la existencia tuya sea una de las mejores que me han pasado.

Desde que me comenzaste a besar no paraste de consumir todo el contenido que había en mi boca y lo hiciste, absorbiste todo de mi con esos roces de tu lengua con la mia y dejaste también marcas en ella entre mis labios inferior y superior y como me encantaba cada movimiento de tu boca. Te fuiste como si fueras dracula y pasaste directamente hacia mi cuello en el cual lo consumiste de una sola vez sin presión ni agite desgastaste parte de tu saliva y mucho de tu amor en el con unas marcas tan bellas y perfectas a las cuales denomino como moretones y que se convirtieron como tatuajes que su tinta va a correr por mis venas hasta que yo me muera.

Mi lengua con mucho deseo va bajando de tu boca la cual ya me deleite voy descendiendo despacio llegando así a dos montes de olimpo donde en lo mas alto de ambos se presentaban muchas luces divinas y en su camino unos laberintos llenos a sus alrededores de flores que brotaban un perfume tan excepcional y sin ninguna cosa de la cual quejarme, entonces mis manos manosearon ambos para palpar lo que mi boca va a probar y en un camino tan áspero llegué a ambos y uno por uno comencé a succionar su contenido con mucha dicha y gozo hasta que estos estuvieran vacíos por fuera pero por dentro llenos de mi boca y por fuera cubiertos por toda la saliva que se derramaba de sus picos.

Al pasar por la belleza de tus montañas fui a los niveles bajos de tu ser probando cada pliegue y centímetros de tu oscuridad y viendo ya la luz en el camino aterrize en la palpo de tu clitoris y con muy poca espera mi mano se introdujo en este y tus gritos van subiendo de decibelios y a pesar de esto era la hora de que mi mástil se pudiera introducir pero con más profundidad hacia el interior de tu ser y ya los decibelios de tu voz eran más y más fuertes y con cada segundo que pasaba ya me pude ir a un mundo donde el cielo con un azul intenso nos daba más felicidad de probar cada cosa de nosotros mismos que nos hacía más unidos.