Escritos

Viaje con Alegria

En un momento muy cálido y sin ganas de hacer nada te conocí. Fue algo muy rápido y no se como paso volando pero se que cuando te mire hubo un click el cual me hizo sentirme mucho mejor y con algo más de confianza. Me dijiste muchas cosas aquella noche la cual obviamente hasta el día de hoy no me olvido ya que significaron el inicio de algo hermoso y que no tenía ningún precedente. Tu cuerpo en la oscuridad se movía de una manera muy abstracta y al mismo tiempo desconocía aquellos movimientos, pero solo puedo decir que me fascinaban y comencé a caer en ellos; te desvestiste como si en el lugar no hubiera nadie y la perfección de tu ser se contemplaba de una forma tan preciosa y cada contorno de ti se marcaba con delicadeza. Estando sin ninguna vestimenta me diste un beso con tus labios húmedos pintados con aquel labial rojo y de mezclas extravagantes y con ese simple roce ya vi que el poder de tu seducción se encontraba en tu boca y mi boca por acto seguido quiso probar que más podría haber en esta y se sumergió en un sinfín de sabores y emociones que sentía en minutos los cuales querían que se volvieran en un viaje de alegría. Con que intensidad tu boca chocaba la mía y con que magia me hiciste caer en la magia de tu belleza, todavía no entiendo como con un simple beso pude caer en la sensación más hermosa que jamás he sentido. Tus ojos- cristalinos y con una pupila característica de color verde- me han llevado a pensar que mirarlos era un laberinto y que el final sería algo que quisiera descubrir cada día que me levantará cuando los vea. El hechizo seguía y seguía debido a que mi boca y mi lengua no se separaban de la tuya mientras que mi mente quería buscar más exquisiteces que pudieran haber en tu hermosa escultura. Ya veía que tu labial iba pintando mi ser y te fuiste hacia mi cuello sin ninguna razón o sentido y lo mordiste, pero con unas ganas tremendas la cual se convirtieron en tatuajes que ni el mejor tatuador del mundo pudiera realizar ,y dentro de mis poros se conservaron la esencia de tu deseos que iban fluyendo por mis venas a un paso muy rápido y mi sangre ya formaba parte de ti. Con mi lengua quise improvisar y veía que el poema de tu cuerpo se encontraba muy vacío y sin ninguna letra, pues con esta quise utilizar mi lengua como lápiz para poder describir y palpar las maravillas que podían esconder tus hermosos paisajes y los lugares más inhóspitos que existieran en este. Pasando por dos montañas tan preciosas desde vista y aun más perfectas explorandolas me quede atónito sobre como un cuerpo humano podría ser tan delicioso y tan perfecto con el simple tacto de mi boca, y en vez de quedarme sorprendido seguí mi camino luego de succionar aquellas dos montañas que serán un recuerdo más para mi memoria. Pasando por muchos kilómetros, he llegado al placer infinito el cual no se como pero parecía mucho mejor que en mis pensamientos y sin antelación me introduje en el y sacaba de ti una parte muy diferente a la que conocía al inicio pero que al mismo tiempo me gustaba bastante y en la noche se escucharon aquellos gritos a los que se llamaban " gemidos " y en este viaje de alegría pude observar que no sólo hubo alegría, hubieron miles de deseos y emociones que se pudieron palpar aquella noche.