sempiterno ❜ ❪ ron anderson, carl grimes ❫ ✓

𔘓 33. Paying your karma

╭┈˖⋆ ❁ paying your karma ┊ ˖⋆࿐໋₊ ☆

UN SENTIMIENTO ASFIXIANTE se instaló en mi garganta, jadeé y por último saqué aquellos cuchillos del vientre de mi tío, ví sus muecas ser presas del dolor, del pánico y del miedo, por primera vez, logré notar que el ya no tenía mandato sobre mi, que ahora yo lo intimidaba a él, que ahora el me rogaría a mi, no sentía absolutamente nada de piedad hacia él.

Y quizás eso fue lo que terminó por asustarme.

Presa del pánico, me alejé arrastrando mis pies, mi espalda chocó contra el pecho de Ron, quien dejó un casto beso en mi hombro intentando darme apoyo, quería irme, de verdad necesitaba abandonar mis sentidos por un momento, tenía miedo, mucho miedo de perder mi humanidad por aquel hombre que ya me había arrebatado suficiente.

- Lo has dado todo por mi, hoy, te sacaré un peso de los hombros.- Dijo mi novio, me di la vuelta con rapidez al sentir la mano de Ron deslizarse por la pistola, sus dedos apretaron con seguridad el arma mientras yo escondía mi rostro en su cuello, sentí su otro brazo acurrucarme en su cuerpo y me sentí segura, apesar de estar enfrentando mi mayor pesadilla.

- ¿Qué harás? ¿Me matarás? ¿Eso quieres, Feyla? ¿Ser igual que tu tío?- Escuché la voz acelarada de Johnny tras mis espaldas, sabía que sufría el dolor de la herida que provoqué en él, era notorio en los jadeos desesperados que salían de sus labios.- ¿Sigo dándote miedo, no?

- No, Johnny, tu ya no significas nada, absolutamente nada para mí, dejaste de tener mandato sobre mi, ahora eres tú, quien sufre por la culpa del otro, espero y te revuelques en el infierno, pedazo de mierda.- Escupí con brusquedad, dirigiendo mis iris en su dirección, dándole una última mirada cargada de ira.

Volví a esconder mi rostro en el cuello de Ron, me sentí embriagada por su olor a chocolate y café, su piel pálida y suave acariciaba mi nariz, intenté concentrarme en él, solamente en él, en la paz que lograba darme. Pero nada de lo que intenté podría hacerme olvidar aquel sonido del gatillo siendo jalado, la bala impactando contra el cráneo, y el sonido abrupto de un cuerpo dejándose caer en la tierra mojada, ese exacto momento quedaría grabado en mi mente para siempre.

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TIRÉ LA CABEZA DE JOHNNY BRIGTON de forma brusca al suelo, Negan se dió la vuelta, y al ver lo que había dejado a sus pies, hizo una mueca de asco, luego, empezó a reír de forma casi demente.

- Dios, sabía que tenías una obsesión con él, asesinas a su esposa, le cortas los huevos solo porque el no era incestuoso como tú, y ahora ¿¡Lo matas!? Niña, estás demente, dime, Rick ¿Enserio está chica es de tu grupo?- Se burló de forma descarada, mientras empujaba la cabeza de Johnny en dirección al ojiazul, quien me miró con cierta preocupación naciendo en sus iris claros, Carl se mantenía atrás de su padre mirándome fijamente, su rostro se suavizó al verme, dándome a entender que estaba ahí para mi.

- Johnny te mintió de grandes maneras.- Ron tomó mi mano y entrelazó nuestros dedos con cariño, me sonrió de forma tranquilizadora, dándome la valentía y apoyo suficiente para poder encarar a aquel hombre.

- Johnny Brigton era un pedófilo, un violador y un ser asqueroso, no sé que mentiras te dijo, pero mi tío abusó de mí desde pequeña, eres tan ingenuo, que caiste en las mentiras de un hombre totalmente demente.- Escupí de forma brusca, sintiendo la ira recorrer la sangre dentro de mis venas, solté la mano de Ron y me acerqué a Negan, quien, parecía aturdido ante mis palabras.- No sé quien es más asqueroso y despreciable, si lo era Johnny, o tú, por dejar un futuro niño sin su padre y familias sin sus seres queridos, ojalá, que quien sea que hayas amado en algún momento, se esté revolcando en la tumba gracias a tu mierda, Negan.

Choqué mi hombro contra al suyo lléndome de la escena con rapidez, sentía las miradas de todos fijas sobre mi, me sentía demasiado abrumada como para seguir tan solo un segundo más rodeada de aquellas personas.

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- CARIÑO.- Escuché el susurro de Ron acariciar mis oídos, sequé mis lágrimas con cuidado mientras le terminaba de poner sus pantalones a Theo, quien no había dejado de moverse desde que llegué a la casa.

- ¡Papi, papi, papi!- Chilló el niño moviendo sus brazos con ansias, sonreí en su dirección y lo agarré entre mis brazos, luego, se lo pasé al peliclaro, que aún mantenía una mirada llena de preocupación en mi, ignorando totalmente como Theodore se metía su camisa a la boca.

- Estoy bien, no te preocupes.- Dije acercándome a él, besé sus labios con cariño y salí de la habitación, bajé las escaleras dando pequeños saltos, aún sintiéndome bastante aturdida y confundida respecto a lo que sentía, pero ignoré aquello totalmente al ver a Enid, Mikey y Carl en mi comedor.- Saben, el hecho de que sean mis amigos, no les da el derecho de vivir en mi casa básicamente.

- ¿Estás bien?- Preguntó Mikey levantándose con rapidez al verme, asentí dando una pequeña mueca.

- Solo venía a darte esto, sabes que prefiero hablar las cosas en privado.- Dijo Enid acercándose, mientras dejaba un libro en mis manos, sin embargo, no lograba reconocer el título.- Si quieres puedes ir a verme al rato, estaré siempre dispuesta a escucharte.

- Gracias, bestie, sabía que te ablandarías conmigo.- Me burlé, logrando que ella rodara los ojos y saliera de la casa, con Mikey a sus espaldas, al parecer el castaño pasó de tener un enamoramiento hacía mi, a uno por Enid.

- Los salvadores ya se fueron, y Negan no dijo ni hizo nada respecto a lo de Johnny, papá entendió lo que dijiste así que pidió que sean cuidadosos con el tema.- Explicó Carl aún sentado en el sillón, me lancé a su lado, dando un gran suspiro.- ¿Le disparaste? Dime qué al menos sufrió.

- Ron le disparó.

- ¿¡Qué!?- Preguntó sobresaltándose.- ¿El mismo Ron que no sabía agarrar un arma hasta poco después de que llegué a Alexandria?- Dijo de forma dramática, yo rodé los ojos y asentí.

- No te sorprendas tanto, sabes que haría lo que fuera por Fey.- Gruñó Ron bajando las escaleras mientras Theo lo agarraba del cabello, intentando treparse a sus hombros.- Baja al demonio, por favor.- Solté una carcajada al ver a mi novio y mejor amigo mirarse mal, luego, agarré a Theodore entre mis brazos, quien con rapidez le dió un mordisco a Carl, quién aún se mantenía a mi lado.

- ¡Aush!

- ¿Quién te enseñó eso?- Pregunté riendo de forma burlona, viendo a Carl quejarse debido a la mordida, Theo apuntó de forma inocente a Ron, quien sólo sonrió disimuladamente.