Día 13. Capítulo 20.

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Amelia

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Amelia.

Para la mañana del lunes 13 noviembre Dani seguía sin aparecer. Mi preocupación iba en aumento, algo debía haberle pasado. La paranoia llenaba mi mente de pensamientos oscuros. Tenía que buscarlo.

Me cambié, y por fin mis pies tuvieron un buen calzado. Mis amadas botas al estilo militar... no me las había llevado el día del desfile, según Maggie eran "demasiado informales", pero sin lugar a dudas era el mejor par de zapatos que tenía.

Cuando salí de la habitación noté un ligero olor a quemado. Ernest estaba en la cocina con un sartén en la mano y el ceño fruncido.

—¿Qué haces? —le pregunté.

—Creo que es muy obvio —puso los ojos en blanco—. Estoy cocinando.

—Pues no eres muy bueno, al parecer.

—Se me quemó un poco el huevo, eso es todo.

—¿Por qué hoy estas tan "amable"? —me senté en la mesa—. Ayer habrías golpeado a un perrito solo porque según tu "te miró feo", y ahora haces de comer.

Rió sarcásticamente.

—Que gracia me da tu comentario, Amelia. ¿Vas a querer tus huevos o no?

—No creo que haya tiempo de comer huevos quemados Ernest. Dani sigue sin aparecer. Tenemos que buscarlo.

—¿Piensas salir así nada más? —dejó el sartén en la estufa.

—Cuanto antes. No sabemos que le pueda estar pasando.

—¿Desde cuando te volviste tan valiente? Amelia es muy peligroso...

Nos quedamos en silencio.

—Si fuera Maggie... —dije con cuidado, sabía que le calaría, pero no quería perder tiempo—, ¿irías por ella no es cierto?

Me lanzó una mirada que decía: "Te gusta jugar con fuego, ¿no Amelia?".

—Si —respondió después de un rato.

—Ayúdame, por favor Ernest. Sabes que a él si podemos salvarlo...


.∞∞∞∞∞∞.

Al final, Ernest accedió, aunque antes me obligó a comer su desayuno quemado. Preparamos las armas que habíamos encontrado, yo el bate y el la pala. Salimos tapándonos con las gorras de los abrigos la cara. Ernest puso su huella y la puerta principal del edificio se abrió.

—¿Si quiera sabes dónde buscar?

—Busquemos en los alrededores.

Suspiró.

—Esta bien, mantén la cabeza agachada, no llames la atención y no le hables a nadie.

Asentí.

Cuando una Ciudad Despierta (#TA2021)Where stories live. Discover now