Capítulo 6

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Tras ese momento de deseo y placer, me di cuenta de que había perdido la virginidad.

Acababa de tener una de ls sensaciones más increíbles de mi vida. Había sido algo nuevo para mi y a pesar de mi miedo y mi inexperiencia en este tema, he podido disfrutar.

Aiden se quitó el preservativo y lo tiró a la papelera de color negro que tenía al lado de mi escritorio para luego acostarse a mi lado. Él me observaba desde mi derecha con una sonrisa de ternura mientras yo me tapaba con las sábanas de mi cama con un poco de vergüenza.

—Eres increíble—me dice apartándome un mechón de pelo que se había posado sobre mi mejilla.

Yo me quedo muda. No sabía lo que decir en ese instante de intimidad ya que nunca había tenido un momento como este con algún chico. Había sido mi primera vez. Aunque también he de decir que Aiden había sido el primer chico en literalmente todo.

—Lo siento si te ha dolido...—se disculpa mientras coloca su brazo suavemente debajo de mi cabeza mientras yo me acerco a él y me acurruco en su pecho.

—No te disculpes amor, ha estado bien...—digo arropándome hasta mis mejillas por la vergüenza que me daba decir esas palabras.

Le abrazo mientras él me rodea con sus brazos hundiéndome así aún más en su pecho devolviéndome el abrazo.

—Te amo—me susurra al oído esbozando una sonrisa.

—Yo también te amo—le dije acercándome a centímetros de su boca con una sonrisa para luego besarnos lenta y suavemente.

Unos minutos más tarde, ambos nos dispusimos a vestirnos ya que aunque mis padres no estaban en casa y mis hermanos estaban practicando fútbol en una de sus actividades que hacían por la tarde, es decir, eran horas para descansar de sus insultos hacia mi.

Me daba mucho miedo y pudor si entraba alguien de sorpresa y nos pillaba en la cama estando completamente desnudos.

Imaginaba las caras de mis padres si entraran a mi habitación en ese momento. Se enfadarían fe una forma colosal y después echarían a Aiden de casa prácticamente a patadas.

Me quito esos pensamientos de la mente moviendo la cabeza a ambos lados rápidamente. Mis padres no se encontraban en casa, estábamos completamente solos, no había nada de que temer.

—Date la vuelta—le pido a Aiden mientras me levanto de la cama sujetando la sábana sobre mi pecho, escondiendo así mi cuerpo completamente desnudo.

Aiden se levanta sin ningún miramiento al hecho de que él tampoco llevaba ropa. Se coloca su ropa interior y tras decirle que se diera la vuelta se acerca a mi lentamente con una sonrisa ladeada.

—¿Por qué? Tu cuerpo ya no tiene secretos para mi—dice mordiéndose el labio inferior para esbozar una sonrisa ladeada y observar mis labios con cierto deseo.

Mis mejillas comenzaron a arder. Era como si un incendio se hubiera desatado sin control en mis mejillas y no hubiera bomberos que lo pudiesen extinguir.

Doy media vuelta dándole la espalda queriendo evitar que se diese cuenta de mis mejillas sonrojadas. Noto como sus manos recorren mi cintura desde la espalda hasta llegar a abrazarme por  la tripa entrelazando sus dedos. Deposita suaves besos llenos de deseo desde mi cuello hasta el lóbulo de mi oreja causando que un escalofrío recorriera todo mi cuerpo y quisiera sentirle de nuevo.

—Está bien princesa—me susurra al oído provocando otro escalofrío que recorre desde mi nuca hasta el fin de mi columna vertebral.

MI NIÑERO 2Where stories live. Discover now