Viendo la verdad.

1.8K 353 314
                                    















- ¿Podrías dejar de seguirme?.- Yibo detuvo sus pasos.- Estuviste todo el día detrás de mí como un acosador, incluso te quedaste sentado mientras practicaba ¿No tienes nada que hacer?

- Claro que tengo que hacer.- Zhan sonrió con picardia.- Tengo que seguirte hasta que te convenza.

- Quierete un poco.- Yibo rodo los ojos.

- ¡Oh!.- Zhan asintió.- Pero yo me quiero mucho...- Se acercó más a Yibo.- Me quiero tanto que considero que debo ser premiado y ese premio eres tú.

- No deberías de estar haciendo esto.- Yibo suspiró.- Tienes novio, por lo que veo es un buen tipo.

- Y por lo que yo veo sigues siendo el mismo de antes.- Zhan arqueo una ceja.

- ¿Que quieres decir con eso?.

- Olvídalo...- Agitó su mano.- ¿No vas a abrir?.- Zhan apuntó la puerta.- Está haciendo frío aquí...

- Si tienes frío solo regresa a tu casa ¿Por qué tienes que tomar la mía como refugio?

- Porque la tuya es más cálida.

- En verdad eres un fastidio.- Abrió la puerta.- Solo regresa a casa, fue suficiente por hoy.

- Gracias...- Lo empujó y entró a toda prisa.- En verdad estaba congelandome.

- ¿Hasta cuando tendré que lidiar contigo?.-Yibo entró.

- ¡Joven Xiao!.- Un hombre llegaba a toda prisa cargado de paquetes.

- Tatsu...- Zhan sonrió.- En verdad eres eficiente.

- ¿Quien es este tipo?.- Yibo frunció el ceño.

- Este es mi hombre de confianza.- Zhan tomó los paquetes.- Fue por algunas cosas para comer, te dije que te invitaría el almuerzo.

- Ahorrate tu invitación.- Se dio la vuelta y se alejó.

- Gracias Tatsu.- Zhan palmeo su hombro.

- Joven Zhan...- El hombre parecía inquieto.

- ¿Sucede algo?

- Es que...El joven amo no ha regresado.

- Ese maldito mocoso.- Zhan apretó sus dientes.- ¿Dónde se habrá metido?

- Seguiremos buscando.

- Mantenme informado y por ahora no le digas nada a mi tío, no lo vamos a preocupar.

- Bien...- Hizo una reverencia.- Seguiré con la búsqueda.

Desde su asiento Yibo pudo escuchar la conversación de las dos personas que se encontraban a distancia, como licantropo sus sentidos eran agudos y subdesarrollados, gracias a ello pudo escuchar claramente lo que platicaban.

No podía estar desprevenido, tenía que mantener la guardia arriba, a esas alturas confiar en las personas no era una opción mucho menos confiar en esta persona que ya lo había lastimando una vez.

Noto la expresión de Xiao Zhan cuando este se acercaba y pudo darse cuenta que estaba un tanto preocupado, su sonrisa descarada se había borrado y su mirada fría era reemplazada por una llena de ansiedad.

- Espero que esto sea de tu agrado.- Colocó los paquete sobre la mesa.

- Ya te dije que no quiero nada, sobre todo si viene de ti.

- Vamos...- Zhan acomodó las cosas sobre la mesa.- Estoy hambriento y se que tu también, así que solo comela.

- Comela tu...

Marca.Where stories live. Discover now