Marca.

Karma.

Después de 4 horas de inconsciencia Cain empezaba a arrugar sus ojos los cuales se sentían extremadamente pesados, su garganta se sentía rasposa e incomoda, su cuerpo completamente pesado y aquel ardor proveniente de su rostro empezaba a molestarlo, trató de llevarse la mano al rostro para palpar el lugar de la molestia y noto que había algo más.

Con sorpresa Cain abrió sus ojos y llevó ambas manos a su rostro solo para descubrir algo que inmediatamente lo aterro, una máscara anti mordida de metal cubría la parte inferior de su rostro. Con deses desesperación trato de arrancarla pero le fue imposible ya que esta estaba bloqueada con un dispositivo de seguridad electrónico.

Asustado y lleno de pánico examinó su cuerpo y justo en ese momento fue cuando se dio cuenta que en su tobillo izquierdo llavaba un extraño grillete electrónico el cual intentó arrancar sin éxito alguno debido a la descarga que recibió cuando este se accionó, alterado, confundido y mareado se levantó del pequeño colchón donde se encontraba y observó a su alrededor.

Unos enormes barrotes lo rodeaban no tenía que emplear mucho esfuerzo para deducir que se encontraba enjaulado. Aquel lugar era frío, lúgubre y silencioso, el eco golpeaba las paredes rebotando de un lado al otro hasta perderse por completo ¿Dónde estaba? ¿Como había llegado allí.

- Finalmente despiertas.- Una voz se escuchó de repente.- Pensé que estabas muerto.

- ¿Xiao Zhan?...- Cain se acercó a los barrotes.

- Por lo visto aún reconoces mi nombre.- Zhan dio algunos pasos hacia adelante.

- ¡Sacame de aquí!.- Cain sacudió los barrotes.- Sacame o te juro que...

- Cariño...- Zhan se carcajeo.- ¿No te has dado cuenta aún que no estás en condiciones de amenazar?

- Pensé que estabas muerto.

- Pues ya vez que no.- Rasco el puente de su nariz.- Dicen que hierba mala no muere.

- En verdad me alegra mucho saber que estas bien.- Cain sonrió.- No sabes lo asustado y culpable que me sentía...- Extendió su mano.- Lo siento mucho bebé, lamento haberme descontrolado de esa manera.

- Es increíble la forma en la que cambias tan repentinamente.- Zhan dibujó media sonrisa.- Hace solo unos minutos incluso estabas intentando amenazarme.

- Sabes como soy...- Sonrió.- Sabes que soy un tanto explosivo, pero contigo no puedo estar muy enojado, eres mi bebé ¿Lo recuerdas?

- En verdad eres patético.- Wang Tian caminó hacia Zhan mientras le hablaba a Cain.- Más que un Alfa pareces un chiste.

- ¿Tu quien eres?.- Cain frunció el ceño.

- Yo...- Sonrió.- Yo soy tu anfitrión...- Extendió sus brazos.- Eres mi invitado de honor.

- ¿Acaso sabes quien soy?.- Cain rugio.- ¿Acaso sabes con quien te estas metiendo?

- No...- El omega sonrió.- No lo sé...- Borró su sonrisa.- Ni me importa.

- ¡Sacame de aquí!.- Cain gritó con más rabia.- Te juro que cuando salga de aquí haré que te arrepientas de haber nacido.

- Creo que quien se va a arrepentir de haber nacido será otro.

En el momento en que Song Cain vio aparecer a Wang Yibo frente a él dentro suyo ocurrió un enorme estallido, ira, odio, rencor, incluso emoción, todo esto era provocado por la presencia de aquel Alfa que lo veía con altivez.

Esta era la persona que le había arrebatado prácticamente todo de sus manos, a quien consideraba el responsable de su arrebato de locura pero sobre todo de su caída, la persona que había odiado por tanto tiempo y quien prácticamente se había burlado de él en su propia cara.