Crecer.

2.8K 404 436
                                    











Ambos observaban el monitor, cada uno tratando de discernir lo que había en aquellas imágenes, tratando de digerir la noticia que acababan de recibir, no habían tenido tiempo para pensar en ello pero ahora frente a sus ojos podían ver aquellas diminutas y extrañas figuritas que apena se podían distinguir y sabían que era real.

- Todo está bien.- El doctor sonreía mientras movía con suavidad el visor.- Aunque apenas tiene una semana puedo decir que están bien.

- ¿Acaso dijo...están?.- Zhan parpadeo.

- Si...- El doctor asintió.- Veamos...- Llevó su dedo al monitor.- Uno...dos...y...tres...hasta ahora puedo ver tres embriones.

- ¿Tres?...- Zhan se puso pálido.

- Doctor...- Yibo veía hacia el monitor.- ¿Está seguro que son tres?

- Muy seguro.

- Entonces...- Yibo observó a Zhan.- ¿Están bien?

- Están muy bien.- El doctor acomodó sus anteojos.- Siendo sincero para lo que el joven Xiao vivió recientemente debo decir que sus cachorros son los más fuertes que he visto.

- ¿Tiene alguna instrucción?

- Bueno.- El doctor observó a Zhan.- Ahora que ya sabes de tu condición debes cuidarte mucho más, ya no puedes ser imprudente con tu cuerpo, debes alimentarte y descansar correctamente, pero en especial.- Se dirigió a Yibo.- Cada tiempo los bebés necesitarán de tus feromonas para mantener su estabilidad.

- Entiendo...- Yibo asintió.

- Bien...- El doctor se levantó.- Ahora me retiro, debo ir a firmar la autorización para enviarte a casa, hoy tanto tus tíos como tus primos también serán enviados a casa.

- Gracias doctor.- Zhan sonrió con suavidad.

- Te recomendaré con mi colega él cual es un excelente obstetra así puedo asegurar que tanto tu como tus bebés estarán bien cuidados.

- Muchas gracias doctor.- Yibo se levantó e hizo una reverencia.

Xiao Zhan trataba de asimilar lo que acababa de ocurrir ¿Como es que había caído en esa situación? Luego recordó que debido a que las cosas ocurrieron una tras otras había olvidado tomar algún tipo de prevención adecuado. Llevó sus manos a su pelo y tiró de él con frustración, en verdad era un grandisimo idiota, pensó para sí.

Después de haber despedido al doctor Yibo regresó al lado de Zhan, se sentó junto a la cama y lo observó mientras resoplaba y sollozaba por lo bajo, no necesitaba preguntarle sabía que en aquel momento Zhan se encontraba un tanto frustrado consigo mismo y no lo podía culpar porque él también llegó a sentir cierta frustración cuando recibió la noticia, pero ahora que sabía que todo era real sólo pensaba en una cosa y era afrontar la situación y seguir adelante.

- Te ayudaré a preparar tus cosas para regresar a tu casa.- Yibo se levantó.

- Yibo...- Lo tomó de la muñeca.- Lo siento...en verdad lo siento.- Sus ojos se llenaron de lágrimas.- Te juro que no lo hice a propósito, lo siento.

- Lo sé...- Yibo volvió a tomar asiento.- Se muy bien que no lo hiciste.

- Ahora estamos en esta situación...

- Situación que yo provoque...- Yibo lo interrumpió.

- ¿Que?.- Zhan se sorprendió.

- Zhan...- Yibo suspiró.- Aquella noche en la cueva...yo estaba consciente de lo que hacía.

Marca.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora