¡Hey tú! ¡El chico malo! ♡︎ 김남준 ; ☁️ TERMINANDA

37

♡︎ [Nota: este capítulo será narrado de forma omnisciente ya que lo requiere]

(Omnisciente: ajeno a los personajes, narra en 3era persona)

****

La corriente del aire hacia que el cabello de Jeon Jungkook se balanceara hacía atrás mientras chocaba contra su frente, su aliento de a poco se empezaba a agitar y cuando vió a la persona que buscaba caminando por la orilla de calle decidió parar un minuto para observarlo sin culpa por un par de segundos para después acabar de una vez con todos aquellos sentimientos que había guardado por tantos años.

— Seokjin. — dijo de manera agitada mientras sus manos se sostenían de sus rodillas. — Tenemos que hablar.

Seokjin quién vió a su joven compañero de vida tan inquieto tragó saliva y asintió a la petición del menor, a lo mejor en el fondo sabía que vendría una seria conversación.

Ya más tranquilos decidieron sentarse en una banca pública, donde no muchas personas solían pasar y ambos intentaron relajar el ambiente con un par de suspiros.

— Jungkook, también quiero decirte algo. — Seokjin se recargaba de aquel asiento y miraba a las nubes que lentamente avanzaban en el cielo azul. — ¿Tu crees que yo soy un imbécil?

— Pff, claro que lo eres.

— Entonces supongo que si. — contestó un poco avergonzado. — me enamoré de nuevo y ahora tengo un poco de miedo de arruinarlo tal como lo hice con Jung.

Jungkook con la cabeza gacha escuchaba a su tonto amigo, quién aún no podía escuchar sus sentimientos.

— No creo que lo vallas a arruinar con él, Namjoon es un Hyung grandioso y ya no es como el día que lo conocí, ahora empieza a confiar más en si mismo y no le pone tanta importancia a su apariencia. — un pesado suspiro salió de los labios de Jungkook, quién ya no podía guardar un poco más lo que tenía en su corazón. — Si terminas saliendo con él cuéntamelo, no me dejes fuera de todos tus planes como siempre.

Seokjin guardó silencio por un par de minutos, él sabía que había echo las cosas mal, pero no sabía cómo cambiar todo de un día para otro. Jungkook había presenciado todos sus cambios de personalidad en los últimos años y aún así lo había seguido ciegamente, pero ¿Por qué Jungkook no parecía feliz nunca que estaba a su lado?

— Lo voy a hacer Jungkook. — Las pocas veces que Seokjin había visto sonreír feliz a el menor no era gracias a él, porque siempre lo único que lograba causar era dolor a las personas que quería. Con la mirada un poco más desolada decidió cambiar el tema por primera vez a algo relacionado con Jungkook — ¿Aún no te reconcilias con tu amigo del dojo?

Jungkook se sorprendió por la pregunta de Seokjin, porque realmente su amigo nunca se preocupaba por esos temas, siempre hablaba de lo mal que estaba su vida o lo mal que le iba, pero desde que conocieron a Namjoon Seokjin estaba regresando a su personalidad original.

— ¿Mi amigo del dojo? Ah, hablas de Park Jimin. Él y yo seguimos siendo extraños, la última vez casi le rompo la cara, no creo que quiera verme.

— ¿Y su padre no te dijo nada?

— El señor Park no sabe nada, me está apoyando con lo de las estatales pero surgieron unos problemas con el dojo así que no presta atención a la relación que llevamos Jimin y yo.

La conversación había sido cómoda hasta el momento pero por alguna razón Jungkook se empezaba a cansar de tener que evadir el verdadero tema por el que estaba ahí.

— Sí, he visto a ese amigo tuyo un par de veces, pero no me cae para nada bien.

— Seokjin, dejemos ese tema a un lado, no quería hablar sobre esto. — Jin se asustó por el tono un poco fuerte con el que Jungkook lo silenció y solo se detuvo a asentir y escuchar. — Seokjin, me gustas. Me gustas tanto que por eso sigo detrás de ti como un perro, aunque hagas las cosas mal.