¡Hey tú! ¡El chico malo! ♡︎ 김남준 ; ☁️ TERMINANDA

13

Cuando entré a clases extrañamente nadie me miraba, ni siquiera Jimin o Yook Daniel.

Al parecer era un día muy tranquilo.

Perfecto.

En la entrada noté como Kim Seokjin entraba rodeado de chicas, algunas más alocadas que otras.

“Que fantástico sería poder estar rodeado así de gente...” pensé al mirar aquella escena. 

Seokjin ignoraba a aquellas chicas, anteriormente no lo hacía pero al parecer hoy no estaba de humor para eso.

Cuando la hora del almuerzo llegó compré un pan y un jugo para ir a dónde solía comer tranquilo.

Estuve a punto de caminar para salir de la cafetería pero alguien me jaló ligeramente.

— Sígueme. — susurró.

Seokjin me estaba diciendo que lo siguiera y mi mente empezó a enloquecer.

¿Acaso hice algo malo?

— ¿Seokjin, a dónde vamos? ...

Antes de que mi pregunta fuera contestada nos detuvimos en una mesa de la cafetería que estaba libre.

— Siéntate. — ordenó demandante.

Y me senté. ¿Él quería que almorzaramos juntos? ...

— ¿Por qué me trajiste aquí, Seokjin? — me atreví a preguntar aún con los nervios de punta.

— Hoy no estoy de humor para comer con mucha gente, si estoy contigo nadie más vendrá aquí.

Así que era eso ... Bueno, tiene sentido.
Nadie se sentaría conmigo en un millón de años.

Dí el primer mordisco a mi pan, pero ví como Seokjin ponía una bola de arroz enfrente de mí.

— No me gustan estás cosas, cómetelo. — dijo con un tono bajo, pero desviando la mirada. 

— Gracias... — fue lo único que pude decir por el extraño ambiente entre ambos.

Seokjin era muy extraño.

Era la primera persona que conocía que no le gustan los onigiris.

****

Al terminar las clases fuí el último en salir pero cuando atravesé la puerta del salón Jimin estaba ahí.

— Te estaba esperando, Nam.

Era extraño que en todo el día no me hubieran dicho algo. Supongo que este era el momento.

— ¿Qué haces aquí? — pregunté un poco asustado.

“Me amenazaría con decirle a todos mi secreto” era lo único que cruzaba por mi cabeza.

— No le diré a nadie tu secreto. — contestó, como si hubiera leído mi mente en aquel momento.

— ¡¿Qué? ¿Por qué?¡

¿Acaso yo estaba sordo? 
No sabía si creerle a Park Jimin.

— Me dí cuenta de mi error, ya sabes, me junto con puro imbécil y las cosas resultan así. Yook Daniel es una bestia, nada que ver conmigo. Me gustaría hacer las paces contigo. — su seguridad era espeluznante, no sabía cómo podía cambiar de opinión tan fácil.

Mis oídos no creían lo que estaban escuchando.

Park Jimin me estaba pidiendo disculpas.

Ahora que recuerdo Park Jimin nunca me golpeó, siempre fue Daniel, ¿Debería creerle?

Por ahora solo acepté su disculpa.

— Está bien, creo que hacer eso es lo mejor. — accedí.

— Sabía que tú entenderías Namjoon — me dió una sonrisa que no sabía si era verdadera— deberíamos salir a comer un día de estos. No te preocupes, esta vez pagaré yo.

Park solo sonrió victorioso y dió media vuelta para marcharse que ni siquiera pude responderle.

Salí de la escuela y para acabar, las sorpresas no terminaban.

Me tope con Jeon Jungkook...