Apoteosis

CAPÍTULO DIECISÉIS: EL REY DESAPARECIDO

CAPÍTULO DIECISÉIS: EL REY DESAPARECIDO

En una vieja fábrica abandonada que se había convertido en una base secreta, Izuku estaba sentado en una silla mirando una gran pantalla de computadora. Su guantelete del infinito se levantó mientras apretó lentamente el puño. Detrás de él, un automóvil que encontró cerca, estacionado ilegalmente junto a una boca de incendios, estaba siendo aplastado lentamente y convertido en una bola de metal.

"Esto es problemático", había pasado los últimos tres días entrenando con el guante e intentando descifrar los secretos de esta peculiaridad específica. Había hecho grandes progresos con su invento. El ADN que adquirió, no tanto. No importa cuántas veces escaneó la muestra de sangre, la genética todavía se lee como sin peculiaridades. Algo faltaba aquí. Algo que no pudo entender sobre esta peculiaridad.

"Parece ... necesito más datos", dijo Izuku tirando el coche arrugado. Acercándose a una mesa cercana, tomó un holgado suéter gris con capucha y se lo puso sobre su camisa negra, asegurándose de cubrir el guantelete y esconder su cabello con la capucha. Al abrir un portal, Izuku entró para ir a encontrarse con la única persona que podría proporcionarle las respuestas que necesitaba.

LA ESTACIÓN

"Ya te lo dije, no sabía que estaba tramando algo como esto", dijo el jefe de investigación y desarrollo de Geonosis. Había sido entrevistado por la policía en la estación durante las últimas dos horas sobre su interno rebelde Izuku Midoriya.

"¿Nunca hizo nada sospechoso o fuera de lo común?" Interrogó el detective Naomasa.

"Era un chico brillante dedicado a crear los mejores dispositivos de apoyo para héroes", frunció el ceño el hombre. "Si existía un monstruo dentro de él, entonces lo escondió muy bien"

"Gracias por su tiempo", suspiró el oficial con decepción despidiendo al hombre. Lo mismo sucedió con todas las personas a las que entrevistó. Todos tenían nada más que cosas positivas que decir sobre Midoriya y estaban honestamente sorprendidos de que en realidad fuera un villano. Su teléfono sonó antes de que pudiera ordenar más sus pensamientos. Al ver el número de Toshinori, respondió.

" ¿Cómo va la investigación?" Preguntó el héroe.

"No bien", Naomasa hizo una mueca. "Nadie tenía ni idea de lo que era Midoriya o de lo que estaba haciendo en secreto. Ni la gente de la empresa, ni sus profesores, ni siquiera su propia madre lo sabía".

" ¿Tenía amigos en esa escuela?" Toshinori se preguntó con esperanza. "Debe haber tenido algunos"

"Por lo que pude deducir, el chico no tenía nada", suspiró el detective. "No tenemos rastro ni pistas sobre lo que hará a continuación"

" Han pasado cuatro días y aún no ha hecho nada ", Toshinori estaba preocupado por lo que estaba planeando el chico. Ahora tenía un poder abrumador, entonces, ¿por qué no lo está usando?

"Tendrá que mostrarse tarde o temprano", dijo Naomasa con determinación.

" Aunque tengo buenas noticias", pudo escuchar el entusiasmo del flaco. "Creo que encontré un sucesor para heredar mi poder"

"¿De verdad? ¿Quién es?"

" Es un tercer año en la UA llamado Mirio", dijo Allmight.

"Eso es bueno. ¿Vas a pasarle One for All pronto?" Preguntó Naomasa.

" Todavía no, necesito corregir un error antes de retirarme", suspiró Toshinori con tristeza.

"¿Midoriya verdad?" El detective frunció el ceño entendiendo que su amigo necesitaba detener a ese chico como su último acto de heroísmo.