Apoteosis

CAPÍTULO 30: OPCIONES

CAPÍTULO 30: OPCIONES

Todoroki se sentó en la parte trasera de la limusina en silencio. A su lado estaba sentado Midoriya, quien estaba tratando de preocuparse mirando por la ventana a la gente y los edificios por los que pasaban. Se encontraron en una situación tan incómoda. Que no es lo que uno de ellos pretendía.

"¿Todavía no eres muy hablador, verdad?" Midoriya finalmente rompió el silencio.

"¿Eso es algo malo?" Todoroki preguntó mientras lo miraba de reojo.

"Para nada." Midoriya sonrió agradablemente. "Significa que eres más una persona de acción que de palabras. Me gusta eso".

"Sabes que no tenías que llevarme". Señaló Shoto.

"Sí, pero resulta que el lugar donde voy a estar cerca del hospital en el que se aloja tu mamá". Izuku explicó. "¿Cómo van las cosas por cierto? ¿Con tu familia?" Se le dio solo silencio en lugar de una respuesta. "Entiendo si no quieres hablar de eso."

"No, está bien tener curiosidad". El portador de doble peculiaridad tomó aliento antes de continuar. "Después de que me emanciparon legalmente de la custodia de mi padre, Natsuo se mudó. Mi hermana Fuyumi es la única que se quedó atrás y no se irá sin importar lo que le digamos".

"Después de todo este tiempo, ella todavía está tratando de mantener unida a una familia que hace mucho tiempo que se hizo añicos". Izuku realmente lo pensó triste y trágico. Honestamente aplaudió a Fuyumi por sus esfuerzos, pero hay algunas cosas que simplemente no se pueden reparar. "No sé qué decirte. Realmente nunca he tenido un padre en mi vida, mi madre me cuidó, así que no soy la mejor persona a quien acudir en busca de consejos familiares".

"¿Qué le pasó a tu padre?" Ahora era el turno de Shoto de ser curioso.

"Realmente no recuerdo mucho de él. Tuvo que trabajar en el extranjero y se fue cuando yo tenía unos cinco años". Había algo extraño en la forma apresurada y apática con que hablaba. Todoroki decidió dejarlo en paz. Como dijo Izuku, no era su lugar para fisgonear, pero hablar de eso ayudó. "Creo que esta es tu parada". La limusina se detuvo en la entrada principal del hospital. Allí, uno de los titanes le abrió la puerta a Shoto. El niño miró la máquina que formaba parte del equipo que patrullaba las instalaciones. Uno de los beneficios de ser parte de los Caballeros del Equilibrio de Izuku Midoriya fue una tropa de robots Titán para proteger a cada una de sus familias y seres queridos. "Llame cuando esté listo para irse". Fue todo lo que dijo Izuku cuando la puerta se cerró detrás de Todoroki. Shoto saludó en silencio al vehículo y entró al hospital para ver a su madre. Después de registrarse en la recepción, subió en ascensor a su habitación. Llamó lentamente a la puerta y dio un paso para ver el rostro sonriente de su madre. "Hola mamá." Ella le devolvió el saludo mientras se sentaba junto a la ventana en una silla.

"Hola Shoto, ha pasado un tiempo." Ella comentó sobre la ausencia del niño. Sin embargo, Rei lo entendió completamente. Con todo el entrenamiento y la escuela probablemente fue difícil encontrar tiempo.

"Lo siento." Shoto se disculpó con pesar mientras se acercaba. Dejó que ella lo tirara suavemente para abrazarlo. Fue incómodo la primera vez que sucedió cuando lo visitó, pero poco a poco se estaba acostumbrando a esto y le devolvió el abrazo.

"Está bien, tienes muchas cosas que hacer". Este fue su primer día libre en mucho tiempo. "Entonces, ¿cómo has estado? La última vez dijiste algo sobre tomar una decisión importante". Shoto decidió contarle todo. Él le contó cómo abandonó UA, se unió a Midoriya, su razón para unirse a él y al Departamento de Regulación de Héroes. Shoto también le contó sobre sus otros ex compañeros de clase que se unieron a él. Se sorprendió al escuchar algunas de las cosas que dijo, pero había visto las noticias y sabía quién era Midoriya y lo que había hecho. Ella no lo aprobó exactamente, pero si Shoto confiaba en él, estaba bien.