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Je suis désolé | Dao Ming Si 💋

576 palabras.
Narrado en tercera persona.
⚠️ Contenido +18 (no explícito). ⚠️

___[T/n] rió al escuchar el pésimo intento de su mejor amigo por hablar francés.

–Lo siento –se disculpó entre risas– ya, inténtalo de nuevo. Prometo no reírme.

–Eso dijiste las últimas diez veces –replicó Daoming Si con un tono molesto.

A pesar de que el chico no era una persona agresiva, el escuchar a la chica riéndose de ėl durante la última media hora vaya que le hizo sentir desesperación.

–Lo siento, Si. Te dije que sería difícil. Aunque podríamos descansar un rato, supongo. –Concluyó la joven, colocando el libro que sostenía en el piso y recostándose de espaldas sobre la cama.

El chico de cabello oscuro suspiró, tratando de tranquilizarse.

Su mirada se despegó del piso de la habitación y terminó posándose sobre su acompañante.
___[T/n] mantuvo sus ojos cerrados, a pesar de saber que su amigo la miraba.

Él jamás aceptó que había imaginado ver el cuerpo desnudo de su amiga más cercana; ni mucho menos que se había masturbado pensando en ella.
Sin embargo, ___[T/n] estaba más que consiente de eso.
Y esa es la razón por la que ofreció ayudarle a aprender francés en su casa y no en algún otro lugar.

Desde cuándo existía tal atracción sexual, ninguno de los dos se lo había cuestionado.
Únicamente sabían que estaba ahí y que tal vez sólo había una forma de eliminarla.

___[T/n] respiró profundamente mientras comenzaba a deslizar lentamente su playera blanca sobre su abdomen.
Daoming Si negó con la cabeza, pero terminó por rendirse ante aquella mínima provocación.

Había tratado de huir de la situación tantas veces en el pasado que en aquel momento no pudo pensar en alguna excusa que le pudiera ayudar a escapar.
Así que se dejó llevar.

La mano del joven se posó sobre la de ella, levantando más rápidamente la ropa que cubría el vientre de la chica de cabello oscuro.
Él se inclinó sobre ella, mordiendo la piel justo debajo de su ombligo.

Ella sonrió, bajando sus manos hasta tomar a su amigo del cabello mientras él separaba sus piernas con delicadeza.
Al fin la anfitriona abrió los ojos, encontrándose con la mirada de un hombre llena de deseo.

–Te has tardado demasiado –susurró ella con respiración pesada.

Si le sonrió antes de subirse a la cama encima de ella y decirle al oído– Je suis désolé.

Sus labios viajaron hasta su cuello, dejando una marca púrpura sobre la sensible y pálida piel de ___[T/n], quien notó de inmediato el perfecto acento francés de su mejor amigo.

Ella en verdad había creído que Daoming Si necesitaba toda la ayuda del mundo para aprobar la materia; sin embargo, él le acababa de demostrar todo lo contrario.
¿A caso es que esto lo había planeado con demasiada antelación?

Si logró sacarla de sus pensamientos antes de que ella continuara recordando cada momento que los llevó a aquella tarde nublada.
Sus finos labios continuaron besando el cuello de la joven mientras sus manos se deslizaron por su espalda, desabrochando su sostén con facilidad.

___[T/n] gimió al sentir sus pechos desnudos; el frío aire que erizó su piel pronto calentándose gracias al aliento del joven sobre ella, quien no dudó en hacer realidad una de sus mejores fantasías, sin saber que sería la primera vez de muchos encuentros más. Con la única diferencia de que lograrían dar ese paso fuera de la amistad más pronto que tarde.