Capítulo 84

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Esa noche, Lian Jue se encerró en su oscuro dormitorio e hizo algo que no era precisamente sincero.

Se tomó la libertad de revisar el teléfono de Shen Tingwei, repasando los clips relacionados con él innumerables veces.

La única foto que encontró en el álbum del teléfono de Shen Tingwei que podía considerarse un selfie era una foto borrosa con un ángulo complicado y una imagen desenfocada.

Shen Tingwei tenía un sarpullido rojo detrás de la oreja, y era del tamaño de un dedo. Tal vez porque le picaba y no podía ver detrás de su oreja, fue la razón por la que utilizó hábilmente la cámara para fotografiarlo, dejando en la foto una pequeña parte de su cara que no se veía con claridad.

Lian Jue reprodujo la foto una y otra vez mientras la detallaba, sólo para ver cómo el rabillo de los ojos de Shen Tingwei se acercaba rápidamente al teléfono frente a él.

Lo único que podía pensar era en la idea de que Shen Tingwei había dormido a su lado durante tantas noches, y... ¿cómo no sabía que tenía un eczema detrás de la oreja?

Lian Jue escuchó un audio de Shen Tingwei dirigido a la chica llamada [Kaixin], con la intención de tranquilizarle repetidamente: [—Es su primer matrimonio, no te preocupes.] —Luego vió que más tarde, Shen Tingwei fue preguntado con un poco de impotencia por las sucesivas preguntas de la otra parte, y envió otro audio dónde utilizó ese tono tan suave que se oía para apaciguar, y parecía llevar un poco de vergüenza: [—De acuerdo. Pero adivina, es realmente muy bueno para mí... tener la oportunidad de presentarlos.]

Estaba confundido y desconcertado por la lista de contactos vacía del teléfono de Shen Tingwei, pero esos pensamientos pronto fueron sustituidos por la acidez y la amargura que desbordaban su corazón, como si la frecuencia de sus latidos se hubiera vuelto aburrida e insoportable.

La pálida luz blanca del cielo que se filtraba por la ventana sin cerrar, iluminaba el diminuto polvo que flotaba en el aire.

Lian Jue se incorporó de la cama aturdido, mientras salía de sus pensamiento llenos de soledad y miraba la pálida luz que se proyectaba sobre la superficie de la sábana.

Tras recuperar lentamente la conciencia, Lian Jue se levantó rápidamente de la cama, fue al baño a lavarse, se cambió de nuevo la ropa y se dirigió a la comisaría para pedir los resultados de búsqueda.

Mientras esperaba en el banco de la comisaría, el teléfono móvil de Shen Tingwei sonó muy suavemente.

Lian Jue vió que el número de Shen Tingwei había sido vinculado a las TIC de la escuela de Kang Tong sin su conocimiento, y que el profesor de la clase había enviado los resultados del examen de recuperación.

Kang Tong era muy competitivo, quizá porque sabía demasiado o porque Lian Jue le había presionado sin querer, y había estado estudiando mucho durante el tiempo que le había descuidado. Incluso en el inglés, que normalmente no se le daba bien, obtuvo una puntuación perfecta en el examen complementario.

Mientras ojeaba el calendario, Lian Jue se dió cuenta de que hoy era viernes. Podría ir personalmente a la escuela esta tarde para recoger a Kang Tong y darle un pequeño elogio y una pequeña recompensa, como Shen Tingwei había esperado de él.

Y aunque no estaba de humor para considerar exactamente qué tipo de elogio daría, hizo todo lo que Shen Tingwei le pidió.

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Cuando Shen Tingwei se despertó, todavía seguía acostado en la cama polvorienta y cada respiración contenía el extraño olor de los ácaros del polvo que lo mareaba.

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