Capitulo 10

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Después de andar en moto por unos 20 minutos finalmente llegamos a un mirador, me solté de la espalda de Nahoya.

Yo sentía náuseas de lo que pudiera pasar, Souya entrelazó nuestra manos, todo me estaba temblando. Finalmente nos paramos debajo de un árbol para cubrirnos del sol.

-No como empezar- Souya carraspeaba

-Niky, me gustas-Nahoya volteo a ver a su hermano -Bueno nos gustas.

-No te queremos presionar, pero creo que es algo que necesitamos hablar- El rostro de Souya se relajó un poco.

-Niky ¿Nosotros te gustamos?

Sentía que el aire me faltaba y me empecé a marear.

- Es raro que me gusten los dos.

-Entonces te gustamos.

-Que cosas dices Nahoya.

-Solo dinos Niky, Smiley y yo necesitamos saberlo

-No es tan difícil contestarnos.

-Mierda... si me gustan ¿bien?- Me sentía enojada por admitir mis sentimientos en voz alta y frente a los que me gustaban le quité mi mochila a Souya y empecé a caminar sin saber a donde ir.

Di un par de pasos y Souya se puso frente mío me tomó la cara con las dos manos y se fue acercando lentamente, quería quitarme pero el cuerpo no me respondía y sentí como dejaba tres cortos besos en mis labios, acarició mi cabello y se hizo a un lado. Nahoya estaba frente mío tomó mi mentón y me acercó a él, tuve que pararme de puntitas para poder alcanzarlo y el beso con él fue más largo, ninguno de los dos intento ir más allá que de un pico.

-Podemos hacer que funcione, los tres, nos gustas y te gustamos eso hace las cosas más sencillas- Por primera vez escuchaba a Nohoya hablar tan calmado.

-¿Quieres ser nuestra novia?- Souya volvió a tomar mi mano.

Tenía la mente en blanco, si intentaba hablar no podría hacer una sola frase coherente. Así que dejaría que el calor del momento hablará por mi.

-No- ví terror, decepción y confusión todo mezclado en sus caras -Me gustan mucho, mucho pero creo que es demasiado pronto para formalizar una relación de tres... tampoco es como que quiera seguir siendo solo su amiga.

-No entiendo- Souya tomaba más fuerte mi mano.

-Podemos intentar salir los tres juntos y ver cómo funciona y si todo va bien podemos formalizar las cosas y si eso no funciona olvidaremos que esto pasó.

-No me gusta- su sonrisa apareció de nuevo en su rostro -Pero el que no arriesga no gana ¿cierto? preciosa. Por cierto ¿quien de los dos es mejor besando?

-No es que como con un pico pueda decir mucho.

-Puedo intentar algo más atrevido.

Los nervios se apoderaron de nuevo de mi.

-Bien, me voy- Souya me abrazó por la espalda.

-No, he esperado por semanas para esto- hundió su cara en mi cuello. Por otro lado Nahoya me abrazó por el frente y dijo para que Angry y yo pudiéramos escucharlo.

-No puedo esperar para decirle a los chicos.

-Si, sobre eso hasta saber si esto funcionará no le diremos nada al resto, no quiero que las cosas se pongan raras.

-Pero...

-Smiley ya la escuchaste
Pero yo también tengo una condición, una semana tenemos una semana para saber si esto no funcionará.

-¿No creen que es muy poco tiempo?

-Para mi es una grandiosa idea. mira ahí venden helados, ¿Que sabor quieres? Tal vez uno con sabor a durazno.

-No me gusta el durazno.- Se tocó el pecho como si se sintiera ofendido, Souya se rio -De chocomenta esta bien.

-Lo que tú pidas preciosa- Antes de irse me dio un beso.

Souya y yo nos quedamos solos ninguno decía nada era un poco raro dado que acabamos de iniciar una especie de relación. Tomé todo el valor que quedaba en mi cuerpo.

Puse mi manos en ambos lados de su rostro y lo acerque a mi, al principio nuestros labios solo se unieron y sentí como su lengua se abría paso hacia mi boca, nuestras lenguas jugaron un rato, Souya se tomaba su tiempo para disfrutar cada etapa del beso, estuvimos así un rato hasta que necesitamos tomar algo de aire y antes de separamos me dio un corto beso en los labios.

Cuando finalmente nos separamos del todo Nahoya estaba comiendo su helado mientras sostenía otros dos en la otra mano.

-Vaya, creí que no acabarían nunca- seguro que estaba roja como un tomate -Tomen- Nos entregó nuestros helados, apenas si pude probar un poco de mi helado cuando Nahoya agregó -Mi turno.

Me tomó por la nuca y esta vez el fue quien se agachó hacia mi no me dio tiempo de reaccionar, los besos de Smiley eran más acelerados parecía que no quería quería perder ni un segundo, mordió ligeramente mi labio un par de veces finalmente yo fui quien terminó con el beso.

-Mmm chocomenta.

-Mira como le dejaste los labios, la próxima vez no seas tan tosco.

Puse la cámara frontal de mi celular, mi boca estaba roja he hinchada pero no había ninguna marca. Aproveché para ver la hora aún faltaba 40 minutos  para empezar mi turno en el trabajo, era tiempo suficiente para ir a mi casa a cambiarme y de ahí a la cafetería.

De regreso fui en la moto de Souya se estacionaron frente al edifico y me esperaron a que me cambiara para llevarme a la cafetería. Salí corriendo y me subí de nuevo detrás de Souya. Al fin le había perdido el miedo completamente a las motocicletas, entre que salía con los gemelos y Kazutora estaba arriba de esas cosas al menos unas tres veces al día.

Cuando finalmente aparcaron, me bajé de un salto y le di un corto beso a cada uno.

-Nos vemos luego

-¿Quieres que pasemos por ti cuando salgas?- Me gritó Smiley

-No gracias, me quedaré hasta tarde.

-Cuídate linda. Esta vez fue Souya.

Gemelos Kawata Onde histórias criam vida. Descubra agora