Gemelos Kawata

Capitulo 38

Estaba tan nerviosa por conocer a los abuelos paternos de los gemelos, el único problema es que debía fingir que solamente salía con uno de ellos. No me gustaba pero tampoco tenía opción. Antes de que entráramos a la casa Angry les había comentado la situación a sus papás para que no dijeran nada al respecto.

-Niky que gusto verte de nuevo, hacia mucho que no te traían mis hijos- Su mamá siempre fue muy linda conmigo incluso hubo una ocasión donde amenazo a sus hijos que tuvieran cuidado con no romperme el corazón, cosa que si sucedió. -Ven cariño, deja te presento a mis suegros.

-Ikeda Niky, es un placer conocerlos- la mamá de los Kawata me llevo hasta el comedor donde nos esperaban los abuelos. Los señores tenían cara muy seria.

- Que muchachita tan bonita- su abuela se paró de donde estaba y me dio un abrazo, yo me sorprendí mucho. -Llámame Hidaki

El hombre que estaba sentado a un lado de la señora Hidaki hablo desde su lugar -¿De cuál de los dos monstruos eres novia?

-Es mía abuelo- recalcó la palabra mía mientras miraba de reojo a su hermano, incluso su sonrisa se volvió más grande.

-Pues te deseo suerte de los dos ese es el peor- todos reímos ante el comentario de su abuelo, al parecer tenían la misma cara de enojo que Angry pero con su personalidad amable -¿Tu novia no va a venir?- Se dirigió a Souya.

-No, está fuera de la ciudad .

Me acerqué y le susurré a Smiley solo para que él pudiera escuchar -No dijiste que tus abuelos no sabían que salían con alguien.

-No, ellos saben que tenemos novia, pero no que la compartimos.

Nahoya me dirigió a uno de los asientos vacíos por suerte quede en medio de los gemelos. Souya tenía la cara enojada más de lo normal, le apreté la mano discretamente por debajo de la mesa y me regreso el apretón.

Los chicos se habían esmerado en la comida, estaba realmente buena, no creí que fueran capaces de hacer ese tipo de cosas.

Mientras comíamos charlábamos de diversos temas, algunas historias que pondrían en vergüenza a los gemelos, los molestaría con eso más tarde. -¿Tienes planes para el futuro cariño ? - Me preguntó la señora Hidaki.

-Si, quiero estudiar arquitectura- me pase lo que tenía en la boca -Tengo cuatro opciones, en cualquiera que quede estará perfecto.

-¿Están aquí en Tokio?- Está vez fue la mamá de Nahoya quien preguntó.

-Solo dos, pero estoy tomando unas clases de preparación para los exámenes de admisión, me gustaría quedar aquí en Tokio- Aún no había habido oportunidad de ponernos al corriente de todo lo que sucedió en ese mes que no estuvimos, ellos tampoco sabían nada de mis planes con la escuela.

Souya fue el más tenso después de que dije lo de la universidad era un tema delicado de tratar pero seguía sin entender el porqué. Después de un rato Angry se retiró de la mesa dejándonos a su hermano y a mi con el resto de su familia.

-¿Puedo usar su baño?- realmente no tenía ganas de ir, solo quería ver a Souya.

-Claro, pero ve al de los chicos, el de visitas esta en reparación.

-Muchas gracias

Entre directamente al cuarto de Angry, estaba recostado con las manos en los ojos, me senté a un lado suyo. Lo moví un poco para ver si estaba despierto.

-Amor ¿Estás bien?

-Si, es solo que me cuesta creer que te podrás ir lejos- Acariciaba mi brazo sobre la chamarra de mezclilla -Ya lo viví y no me gusto.

-Técnicamente fue la culpa de ustedes- Me recosté a un lado suyo. -No hay que hablar al respecto, no sabemos que pasará- Hubo un pequeño silencio -La comida estuvo deliciosa.

-Recuerdo que dijiste que le darías muchos besos al chef.

Le empecé a dejar muchos besos cortos por toda su cara, sabía que le gustaba que hiciera ese tipo de cosas, el último lo deje en sus labios pero el atrapó mi labio inferior con sus dientes, obligándome a besarlo.

Termine sentada sobre la pelvis de Souya mientras nos besábamos el recorría mis piernas con sus dedos subiendo hasta mis muslos, los dejó ahí un momento para seguir a mi entrepierna, hizo mi ropa interior a un lado e introdujo uno de sus dedos sentía como empezaba a masajear mi punto sensible, yo pegue aún más mis labios a los suyos para acallar un gemido.

Sentí como se posaban unas manos en mi cintura y me susurraban al oído.

-Por mucho que me guste esa imagen tuya, creo que debemos regresar con los demás.

Era Nahoya, tenía esa maldita sonrisa burlesca en el rostro. Souya sacó sus dedos con sumo cuidado de no lastimarme.

-¿Desde cuando estás ahí?

-Desde que te empezaste a comer a mi hermano- pude ver un pequeño bulto en la  entrepierna de Nahoya -Aún queda postre, vamos.

Me quite de arriba de Angry y me acomode un poco la ropa interior. Nahoya quiso sacarme del cuarto de su hermano pero me paré para preguntar.

-¿No vamos a esperar a Angry?

-Tiene que primero ocuparse del problemita que le dejaste.

Souya se tapó el rostro con una almohada para cubrir lo rojo que estaba y vi a lo que su gemelo se refería.

Nahoya y yo bajamos de nuevo, pero esta vez a la sala de estar, Souya se nos unió varios minutos más tarde.

-Toma dejaste esto en el baño- Era el anillo que me habían dado por mi cumpleaños, recuerdo que cuando terminamos de los regrese. No estaba segura si quererlo de vuelta, tome el anillo pero no me lo puse, lo guardé en mi chamarra.

-Gracias am... Angry.

Odiaba fingir.