Detras del Abanicó

Capitulo I

Todos conocemos al gran maestro inmortal Shen, la escoria humana que lo único que puede hacerlo sonreír es la desdicha y la desesperación de los demás, un niño mimado de una familia adinerada, que empezó tarde su cultivo por ser un perezoso que creía que iba a tener todo lo que el pidiera.

Esa era la imagen que todos conocian de Shen Qingqiu, pero que pasaría si todo era solo... Una máscara, una cuartada  que olcutaba el sufrimiento en esos ojos verdes como si de dos esmeraldas se tratasen, tan fríos como el mismo hielo y tan astutos como los de un zorro, que solo olcutaban a un pequeño niño ezclavo que sufrió tanto que teme entregar su confianza, un niño que conocío a una corta edad lo asqueroso e injusto que puede llegar a ser el mundo, solo un niño que le teme a los de su propio género y solo puede encontrar consuelo en esas maravillosas mujeres que todos conocen como cualquieras que entregarían su cuerpo por un bocado de comida.

Y todos saldría a luz, la humillación de ser un esclavo, una rata callejera. Su máscara se caería en pedazos, al igual que su corazón hace ya tantos años y todo por esa maldito artefacto que trajo Liu Quingge o como le gusta llamarlo 'bastardo', 'mono ignorante', 'bestia sin cerebro', entre otros.