Tres corazones una relación, recuerdos perdidos ❦ SEGUNDO LIBRO

Capitulo 60 ❦ Capitulo Final / Caminos Separados

De acuerdo.

Esto no estaba llendo bien, los gemelos acababan de terminar conmigo y yo solo estaba sentada en mi sofá llorando, no salían palabras, las lágrimas caían sin parar de mis ojos pero ningún sonido era emitido de mis labios, sabía que esto pasaría, tal vez era lo mejor.

Por mí mente también había cruzado el pensamiento de que muchas cosas de las que habíamos pasado en nuestra relación eran terribles de recordar, había mucho dolor y trauma como para sobrellevarlo.

Cuando estaba en el hospital y pensaba en el ejemplo de la chica con cáncer pensé que los gemelos de verdad no serían capaces de dejarme, pero lo hicieron, rompieron el círculo y pesar de que estaba feliz por ellos, por su capacidad de tomar una decisión tan difícil y tomar el camino correcto, a pesar de todo eso, estaba triste y sentía que me acababan de romper el corazón.

Me deje caer en el sofá de lado, cuando comenzaba a cerrar los ojos alguien golpeó mi puerta, por un segundo creí que podían ser los gemelos, que volvían para decirme que todo era una broma de mal gusto, que se arrepentian y que volvían, obviamente solo fue un segundo, ni Evan ni Ethan eran de los que harían eso, no se retractan de sus palabras mucho menos de algo tan serio.

Me levante y camine a la puerta, mire por la mirilla, por supuesto, abrí la puerta y de inmediato la abrace.

- Kayla...- comencé a lloriquear como una bebé

- Lo sé amiga...lo sé - caminamos hasta el sofa y llore en sus brazos mientras acariciaba mi cabello

No se cuanto tiempo pasó así.

Se supone que no debería doler tanto verdad, se supone que esta era la decisión correcta, yo también lo pensaba, entonces ¿Por qué dolía tanto?.

No pude encontrar una respuesta más lógica, sólo los amaba demasiado, eso era todo, por eso dolía tanto.

Paseando por las calles, llendo a la universidad, llendo a un bar o solo a tomar café, cada pensamiento y lugar me conducía a ellos, cada pequeño rincón de esta ciudad.

Creo que eso fue lo que me permitió tomar la decisión final de irme.

Hacia mis maletas un día lunes, solo una semana después de que los gemelos terminaron conmigo, no los había visto en la universidad, ni siquiera por coincidencia en las calles, la sensación de buscarlos por doquier me sacaba de quicio, siempre quería verlos aunque fuera solo un poco y eso me desquiciaba.

Ya había dado aviso a todos, Esme dejó de ser mi abogada por supuesto, tuve que cambiar de agente porque Alex no podía acompañarme al otro lado del mundo y tuve que buscar como seguir con mi tratamiento psicológico, cuya lista de cosas que tratar había aumentado un numero más, demonios.

Sentía que el peso se iba aligerando con cada paso que daba lejos de aquí, en el fondo deseaba que llegarán mis gemelos para detenerme pero ellos ni siquiera sabían lo que estaba pasando, que pronto ya no estaria aquí.

Kayla me llevó en mi último recorrido por la ciudad, la primera parada fue la casa de mi infancia, ya se había vendido asique no podía entrar pero del otro lado de la calle se veía como una familia pequeña se balanceaba en la banca que colgaba del pórtico, la misma en la que mi mamá y mi hermana conocieron por primera vez a los gemelos, me despedí de la casa a lo lejos mientras sonreía.

Recordé los brazos de mi madre a mi alrededor, su aroma siempre dulce, su mirada tierna y comprensiva, la extrañaba mucho.

La segunda parada fue la universidad, también solo por fuera por supuesto, aquí había empezado todo, la recordaría como el lugar donde volví a ser yo misma, donde pude encontrarme nuevamente y descubrir lo que quería hacer con mi vida, también es el lugar donde conocí a Evan y a Ethan.