CAPÍTULO 50

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Combate.


El mesero en la puerta de la habitación empujó el carrito de servicio y luego esperó un momento. Volvió a llamar y, esta vez, la puerta se abrió.

Shi Shanyan miró inexpresivamente al mesero.

—Caballero —el camarero era completamente sonriente—. La comida que ordenó está aquí.

—¿Qué tipo de platillos? —Shi Shanyan preguntó con mucha cortesía.

—Carne de res ahumada, lengua de res en corte grueso —el mesero dijo mientras extendía la mano para levantar el mantel sobre el carrito de servicio—, y vino tinto...

Debajo del mantel, había una daga delgada y afilada, la cual embistió hacia la garganta de Shi Shanyan en el momento en que el mantel salió volando del carrito de servicio. Shi Shanyan levantó la pierna y pateó el carrito, este golpeó el regazo del mesero, dejando que su daga apuñalara al vacío.

Un plato del carrito de servicio cayó oblicuamente al suelo, rompiéndose en el pasillo. Esto fue como una señal, Shi Shanyan no esperó que el mesero reajustara su postura, pisó los fragmentos del plato y pateó violentamente el pecho de este último. El mesero retrocedió unos cuantos pasos, pero, aún antes de alzar su vista, Shi Shanyan volvió a patear su pecho. Esta vez, él reaccionó con rapidez, enmarcó ágilmente ambos de sus brazos para obstruirlo, mas quién diría que el revés de Shi Shanyan recogería el vino tinto insertado en el carrito de servicio y lo estrellaría contra la frente del mesero.

Súbitamente, el mesero estalló en una tonalidad rojiza y no pudo discernir si era vino o sangre.

No obstante, Shi Shanyan no continuó, porque, de pronto, aparecieron dos cañones de pistola a su derecha e izquierda. Shi Shanyan levantó lentamente su mano bajo la mirada de los cañones a ambos lados, aún sujetando la botella de vino tinto rota en su mano derecha.

—Levántala —el hombre de la izquierda sostenía una pistola mientras le hacía una moción a Shi Shanyan para que continuara—. ¡Mantente abajo!

Shi Shanyan inclinó la cabeza para mirar al hombre y realmente continuó levantando la mano, pareciendo que no quedaba ninguna estrategia que intentar.

El hombre se acercó a Shi Shanyan, con la intención de ponerle unos grilletes. Asomó su rostro desde la puerta, pero no tuvo tiempo para mirar al interior, ya que la mano que sostenía el arma fue clavada con un pinchazo. Inmediatamente, la pistola del hombre cayó al suelo y, entonces, el perfil de su rostro fue golpeado por Yan Junxun. Cuando el hombre de la derecha quiso moverse, Shi Shanyan torció su brazo directamente e insertó la botella rota de vino en el ojo del oponente.

El hombre gritó mientras se cubría los ojos.

Shi Shanyan no pudo soportar el bullicio, por lo que tomó el cabello del hombre y lo golpeó para noquearlo.

—Estamos muy tranquilos. —Yan Junxun no miró hacia atrás, pero disparó directamente de revés, matando al hombre de la izquierda. Entonces, le dijo al guardaespaldas que apareció nuevamente al final del pasillo—: Escucha, un silenciador.

El guardaespaldas levantó los brazos. Él era un hombre de mediana edad, medía unos dos metros de altura y se situó frente a la puerta en el extremo del pasillo con gran ímpetu. Frunció el ceño y le dio un vistazo al cadáver en dicho pasillo, mientras decía:

—De acuerdo.

Tan pronto como su voz aterrizó, Shi Shanyan presionó la cabeza de Yan Junxun hacia abajo a toda velocidad. La bala que vino desde el otro extremo golpeó el marco de la puerta con un "bang" y derribó un poco de polvo, el cual cayó en su cabello.

Caza de Tiempo Limitado [XSSL]Where stories live. Discover now