NADA ES GRATIS. - FanFic adulto Chilumi / Tartaglia /Lumine

𖧷 Capítulo 21 𖧷

Este capítulo se va a a basar en el encuentro que tuvieron Tartaglia y Ganyu. Posee contenido adulto.
Pueden saltearse este capítulo si así lo desean.

Aclaración: Ningún cuerno fue arrancado en esta historia.

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- ¿Qué les pasa soldados? ¿Así pretenden honrar a La Zarina? Más les vale que mañana su rendimiento sea más óptimo. No me gustaría tener que llamar a otro Heraldo para que los entrene. - bufo con enojo Tartaglia hacia los reclutas Fatui. - Saben muy bien que si entrenan con cualquier otro de Los Once que no sea yo, tal vez no salgan vivos de ese entrenamiento por inútiles. No desaprovechen mi bondad. ¿Entendido?

- Si señor Tartaglia - afirmaron al unísono más de los treinta reclutas Fatui que se encontraban entrenando.

- Los veo mañana, pueden volver a sus hogares.

Tartaglia, que estaba entrenando Fatuis, se dispuso a volver a la habitación que alquila en el Banco del Norte de Liyue.
El iba caminando tranquilamente por la montaña Nantianmen, hasta que se detuvo por ver algo que le llamo la atención.

Al pie de un gran árbol con extrañas ramas cristalizadas de color azul, vio a una mujer sentada en el piso, apoyando su espalda en el árbol. Se dió cuenta que esa mujer estaba llorando.

Tartaglia se acercó y se quedó parado delante de ella. La mujer sentada, lo observó desde abajo.

- Vete. - Le pidió entre lágrimas la mujer llorosa

- Tengo un pañuelo, si quieres es tuyo. - Tartaglia saco del bolsillo un pañuelo rojo de seda con bordados en color oro de la más lujosa calidad.

- Gracias. - La mujer tomo el pañuelo y se limpio las lágrimas con este.

La mujer era como todos la conocemos, la hermosa mujer de pelo azul y cuernos del color de la sangre.

- ¿Puedo hacerte compañía hasta que dejes de llorar? - A Tartaglia le daba mucha pena ver a una mujer en ese estado.

- Como quieras. - Le respondió la mujer de cuernos.

Tartaglia se sentó a su lado lo suficientemente cerca, pero sin invadir su espacio personal.

- Mi nombre es Nobile. ¿Puedo saber el nombre de tan hermosa y llorosa mujer? - le pregunto Tartaglia con una sonrisa en su rostro. Decidió usar el nombre falso que suele utilizar.

- Mi nombre es Ganyu, pero no soy hermosa -

- ¿Quieres ir a merendar? La comida levanta los animos. Conozco un lugar de comidas cerca de aquí. Yo invito por supuesto.

- No gracias, Nobile. No tengo hambre.

- Perfecto, no hay ningún problema. Pero me gustaría ayudarte para que dejes de llorar. ¿Quieres contarme? Así te desahogas.

- Es raro contarle mis problemas a un desconocido, pero no pareces una amenaza. - Le sonrió Ganyu, aún con un par de lágrimas.

- En realidad, si soy una amenaza, pero a ti no te haré daño.

Ganyu se rió, creía que le estaba haciendo una broma.

- Simplemente fui usada y rechazada por el único hombre que amo en mi vida. ¡Estoy tan enojada! - Ganyu se golpeó las rodillas de la bronca. - ¡Quiero devolverle el daño que me hizo!

- Puedo darte algunos consejos de pelea si quieres, así puedes acabar con el.

- ¡Si por favor! ¡Me harían bien nuevos consejos! - Ganyu se paró rápidamente de la emoción y tomo a Tartaglia de las manos para levantarlo.