La historia es +18, advertencia de contenido adulto, existe la violencia y los escenarios sexuales a medida que avanza la historia. Por favor, leer con discreción.
Todos los personajes en mi historia son
mayores de edad.
❌ QUEDA TERMINANTEMENTE P...
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Tartaglia levanto con extremo cuidado a Lumine en sus brazos. Y la apoyo suavemente en el sofá que tenía más cerca.
-Mierda, mierda, mierda - Se repetía a si mismo el Fatui.
Xiao estaba un poco petrificado. El accidente lo habia conmocionado. El sabía el calibre de los golpes de Tartaglia y estaba seguro de que Lumine sintió un dolor extremo en su frágil cuerpo antes de caer inconsciente.
Tartaglia con mucho cuidado levanto la camisa bordo que tenía puesta Lumine a la altura de sus pechos, obviamente cubriéndolos para que Xiao no la vea, aunque si no le quedó otra que dejarla expuesta con su ropa interior.
Tartaglia tanteo el torso de la viajera, y al tocarlo, Xiao podía divisar la cara aterrada del Fatui.
- ¿Lumine está bien? - Pregunto el Yaksha.
- Le rompí más de dos costillas - Tartaglia estaba totalmente pálido.
El Fatui de los nervios y la desesperación llevo sus dos manos a su propia cabeza, Xiao pudo ver cómo ejercía fuerza con sus dedos, tirando fuerte de su cabellera.
Tartaglia estaba devastado, no podía creer que no fue capaz de frenar el golpe. Tampoco podía creer que Lumine se interponga de esa forma.
¡Le había prometido no volver a ponerse delante de él en medio de un ataque!
¿Cómo iba a mirar a Lumine a los ojos después de lastimarla así por su incompetencia?
El corazón de él latía a mil por hora, le costaba respirar, sentía pánico y ansiedad. Su mente se nublo, sin poder pensar adecuadamente.
Una presencia se hizo notar en el salón, Zhongli había llegado a la escena.
Tartaglia se dió media vuelta y lo vio.
- ¡Vení cuando quieras a detener al imbécil de tu hijo, no pasa nada! - Le reprimió con sarcasmo en voz baja, para no despertar a Lumine.
- Disculpa Childe, podía sentir lo que estaba ocurriendo, pero no pude acudir, estaba en el medio de un contrato en el que no podía retirarme hasta finalizarlo. - Lamento Zhongli, acercándose a ambos, hasta que vio la escena de Lumine en el sillón, quedando totalmente espantado.
Zhongli, con una cara de indignación y frustración se dirigió a su hijo.
- Has roto mi corazón Xiao, después hablaremos nosotros, ahora lo importante es Lumine. - Zhongli estaba tan triste por la actitud de Xiao que ni siquiera podía enojarse. - Ve ya mismo a la farmacia de Baizhu, coméntale la situación de Lumine y que traiga las medicinas necesarias. También asegurate que venga con la niña del talismán.
