CAPÍTULO 29

220 11 0
                                    

•❅──────✧❅✦❅✧──────❅•

VICTORIA

Septiembre 14 Washington Estados Unidos.

Recojo unos cuantos papeles de mi mesa y los meto en uno de los compartimentos del escritorio. Marina nos invito a cenar a todas, así que tengo que ir a cambiarme a casa.

A fuera ya a oscurecido y está llovir pero no muy fuerte. Me pongo mi abrigo y meto el móvil en mi bolsillo cuando le envío un mensaje a las chicas.

Ya casi no queda nadie en el comando así que bajo con tranquilidad por las escaleras. Me subo en mi coche y me dirijo a casa, no tardo mucho me pongo unos vaqueros, una camiseta con mangas largas y un abrigo diferente. Retoco mi maquillaje y vuelvo a bajar, me subo en el coche y arranco.

  Al cabo de unos minutos llego a un restaurante italiano, es el favorito de Marina así que aparco y le doy las llaves al chico de la puerta. Me doy cuenta de que ya todas están allí así que camino hacia ellas. El restaurante tiene mucha gente, es uno de los más visitados de la ciudad, las paredes son de color marrón, del techo cuelgan lámparas largas que dan una leve iluminación y un sentimiento acogedor, hay mesas cuadradas y al fondo un gran sofá alrededor de una mesa.

— ¡Por fin llegas! —dice Marina sonriendo.

— Lo siento, había tráfico por la lluvia pero ya estoy aquí. —digo.

Pedimos algo de beber mientras nos traen el menú, frunzo el ceño cuando abro el menú y veo una ecografía deslizarse por el menú.

— ¿Que es esto? —pregunto con la emoción que me toma y veo la cara de confusión de todas menos Marina.

Marina nos mira sonriente y Ivanna chilla.

— ¿¡Estas embarazada?! —grita Ivana y Marina chilla.

— ¡Si! —grita.

Una punzada cruza mi estómago recordándome el suceso de hace unas semanas. Siento el dolor en mi pecho palpable, recuerdo las pesadillas que he teniendo con el niño y  lo demás. No han sido los mejores noches sola.

Abrazo a Marina y le sonrió, ella no abandona la sonrisa y yo sonrió.

Soy feliz por ella. Porqué al final del día es mi amiga.

— Felicidades, se lo mucho que querías este embarazo. —la felicito sonriendo.

— ¡Gracias! —sonríe.

Todas ponemos nuestras manos en su barriga pero obviamente no sentimos nada. Estoy feliz por ella, enserio.

Aunque no puedo dejar de sentir este estúpido sentimiento de vacío.

— Está muy pequeño solo tiene dos semana y cuatro días. —sonríe Marina emocionada.

— ¡Joder! ¡Que lindo! —ríe Nicole.

— ¡Va a tener tías que se volverán loca con el!—ríe Vanessa.

— O ella.  —corrijo riendo.

Marina rodea los ojos.

— Lo que sea. —ríe— Lo vamos a recibir con el mismo amor.

Y estoy segura. Ella y Nick son increíbles y se merecen esto que estaban buscando hace tanto.

Nos sirven la cena, dos horas después salimos del restaurante, me subo en el coche y arranco mientras llamo el teléfono de Samuel, lo necesito. La lagrimas nublan levemente mi visión, ni siquiera se por que estoy llorando. Solo se que lo hago.

TÚ Y YOWhere stories live. Discover now