Capítulo 33

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Dos días...dos días han pasado desde mi ruptura con Oliver, creo que aún sigo asimilando todo lo sucedido, y aunque ayer después de que regresamos de comer traté de tranquilizarme, todo se fue a la basura cuando encendí mi celular y vi un montón de llamadas de Oliver.

Notas de voz y mensajes de texto inundaban mis notificaciones a cada minuto. Jesse optó por quitarme mi celular, según ella eso evitaría que me preocupara por cosas que no valían la pena, no repliqué y acepté su propuesta.

—Esto es por tu bien —comentó quitándole el celular

—Lo sé —murmuré

Sin mi celular trataría de despejar mi mente, eso me serviría durante unos días. Por el contrario, ahora estábamos en una decisión de vida o muerte, —o eso según Jess— la rubia me había pedido ayuda para saber que usar durante este día, pues hoy conocerá a los padres de André y está muy nerviosa, de hecho, no recuerdo haberla visto así antes.

Lo peor es que le pide ayuda a alguien que desconoce de moda.

—Si voy de negro, ¿parecería que estoy de luto? —cuestionó probándose el vestido por encima y negando al mismo tiempo—

—Ve con algo que te haga sentir cómoda —respondí mirándola con una sonrisa y tratando de darle ánimos— a ellos no les va a importar ese tipo de cosas, les interesa conocerte como persona, no por tu atuendo

—Eso es fácil para ti, yo conoceré a sus padres Lía, mis suegros —hizo mucho énfasis en esa palabra, creo que se preocupa por su apariencia frente a ellos— ¿sabes lo estresante que es eso?

—¿Y te estresa saber que los conocerás o el hecho de que tu apariencia no les agrade?

No respondió y me dio una mirada la cual pude descifrar.

Desde que el idiota de Samuel humilló a mi amiga en aquella fiesta, su apariencia es algo que le ha importado mucho. He tratado de convencerla y su progreso ha sido notorio, aunque no es suficiente y debo enseñarla a amarse más. André también la ha apoyado y eso es algo que aprecio mucho de él.

 —Ellos te van a amar Jesse —dije tratando de tranquilizarla

—¿Y si no es así?

—Te aseguro que lo será, no te mortifiques con ideas que no valen la pena

Ignoró eso ultimo que le dije e hizo un berrinche.

—No sé qué ponerme —bufó aventándose a la cama y pasándose ambas manos por el rostro— creo que iré desnuda o mejor aún, no me presento y listo. Si no voy no hay manera en la que puedan juzgarme

—Usa algo que sea a tu estilo, ya te lo repetí una y otra vez, ellos no se fijaran en esas cosas

—En este momento no tengo estilo —se quejó— no sé qué ponerme, todo me queda horrible y quiero verme bien

La miré con cara de odio y pasé por su lado. Busqué en su maleta y encontré un short amarrillo con un top rojo no era algo elegante, pero si muy lindo.

—Esto podría servir —hablé mostrándole lo que tenía en mis manos— Te verías preciosa, todo te queda muy bien

—Voy a parecer Winnie Poo —dijo con fastidio

—Eres odiosa —murmuré y me aventó un beso con la mano—. Deja busco algo más

De la mala gana rebusqué y encontré un vestido color verde, no era muy corto ni indecente.

Perfecto para ella…

—Este es el elegido —comenté con mucho entusiasmo y vi que su mirada se iluminaba

Fuera de mi planDonde viven las historias. Descúbrelo ahora