Capítulo 41

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Enfrentar tus miedos es algo para lo que no estás preparado, todo el tiempo creí ser lo suficientemente fuerte como para salir adelante.

Mi padre decía que los guerreros salen a luchar y tienen la esperanza de acabar con el enemigo, aunque su propósito es ganar una batalla, eso no quiere decir que sea el fin de la guerra.

Eso pasa conmigo, justo ahora quería enfrentar a mi enemigo, pero no estaba segura si eso sea lo mejor. La muerte de mi padre dejó una huella muy grande sobre mí, dividió a la familia en dos bandos diferentes.  En uno estaba mi hermano Santiago, quien constantemente dejaba en claro su desagrado hacia mi, en otro estaba yo, quien pese a las circunstancias trataba de salir adelante, mi madre tampoco volvió a ser la misma, fue difícil tener que empezar una vida sin su fiel y leal compañero.

Para todos fue difícil empezar de cero, aquella familia bien posicionada y con una imagen intachable estaba yendo en picada para abajo.

El conocido abogado Santiago Evans acaba de sufrir un grave accidente, sus dos hijos Lía Evans y Sebastián Evans iban en el mismo auto. Hasta el momento no se sabe nada de ellos, todo se mantiene en el anonimato —esa era la nota que salía en todos los noticiarios de la ciudad, el accidente era la sanción de ese momento

—Sabía que te encontraría aquí —la voz de Jesse se hizo presente, vi cómo se sentaba a mi lado.

 Apagué el celular y me quedé mirando a la nada, el silencio no es algo común entre ambas.

—Quisiera no haber venido Jess —esas palabras raspaban mi garganta, pero debía dejarlas salir—. Ojalá y en ese accidente yo hubiese muerto —mis ojos empezaron a llenarse de lágrimas que rápidamente limpié

—No digas eso —Jesse se acercó y recargó su cabeza en mi hombro, a pesar de que ese tipo de afecto no es lo suyo, poco a poco se ha ido acostumbrando a mí— no podría imaginar ni siquiera la vida sin ti

—Yo tuve que haber muerto, mi padre estaría aquí y mi madre no estaría sola. Los tres serían la familia perfecta que papá alguna vez se imaginó

En el fondo sabía que hubiese sido lo mejor para todos.

—¿Crees que ellos serían felices si tú no estuvieras? —no me dejó responderle—. No, no lo serían. Estoy segura de que ellos no serían felices, así como tampoco nosotros, yo no me imagino una tarde sin ti, y te aseguro que Alexander ya no se imagina una vida sin ti

—Por años he fingido ser fuerte. Lo perdí todo cuando él murió, no solo lo material, una parte de mí se fue con él, todo ha sido tan duro Jesse

—Tu padre no quiere verte así, él necesita que seas fuerte

—Ya no puedo, he vivido con la culpa —dejé salir el aire que contenía y suspiré con melancolía—. Lo mejor sería regresar

—Vinimos por ti y si crees que lo correcto es irnos, entonces eso haremos. Iré a avisarle a los chicos. Ellos también han estado muy preocupados por ti

Asentí sin decir nada y escuché como Jesse se marchó. Justo cuando sus pasos dejaron de estar presentes volví a encender el celular y busqué un nuevo video.

Hasta el momento seguimos sin saber noticia alguna sobre el estado de salud de la familia Evans, la esposa del abogado no ha dicho palabra alguna ellos. Trataremos de investigar más a fondo lo que ocurrió en este lamentable accidente —busqué otro video y le adelanté lo más que pude—. Han pasado aproximadamente cinco días desde el accidente de la familia Evans, se rumora que todos están en grave estado de salud. No hay declaraciones de nadie, todo sigue en el anonimato, pero la policía lleva días investigando como ocurrió todo esto. ¿Será acaso que el famoso abogado Sebastián Evans sabía información que no era del todo limpia? —ese fue uno de los reporteros que comenzó a hacer especulaciones sobre mi padre, lo que fue un simple comentario terminó siendo un chisme en toda la ciudad

Fuera de mi planDonde viven las historias. Descúbrelo ahora